Mientras el presidente de la República, Gustavo Petro, se pronunció el miércoles 10 de enero en redes sociales apoyando a los países que arremeten contra Israel, por su arremetida contra Palestina en el conflicto que ya completa más de tres meses, también guardó silencio con respecto al asesinato de líderes sociales en Colombia, luego de que se registraran dos homicidios en el territorio nacional, según Indepaz.
Según reportó el Instituto de estudios para el Desarrollo y la Paz, en la jornada se reportó la muerte de Argemiro Mayo García y Geovanny Luna Cárdenas, en sucesos que se registraron en Mutatá (Antioquia) y Cúcuta (Norte de Santander). Lo que causó escozor entre las comunidades de ambas poblaciones, debido a la importancia que tenían estos hombres en la defensa de los derechos humanos.
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Continúa el asesinato de líderes sociales en Colombia
De acuerdo con Indepaz, Luna Cárdenas se desempeñaba como fiscal de la Junta de Acción Comunal del barrio Antonia Santos de la capital nortesantandereana, en cargo que asumió de forma reciente.
El crimen ocurrió cuando se encontraba al interior de un local, cuando iba a tomar su desayuno en compañía de otros hombres. En ese momento fue abordado por hombres armados que descargaron sus armas en contra del líder y le cegaron la vida. El hombre recibió primeros auxilios por parte de los presentes en el lugar, pero la gravedad de las heridas causadas por los fusiles hicieron imposible salvarle la vida.
Reconocido por sus vecinos, Luna Cárdenas se destacaba por las labores que adelantó para la legalización de este sector. Además, gracias a su trayectoria como vocero de los habitantes del barrio Antonia Santos, fue designado como miembro de la JAL, en un cargo en el que no alcanzó a ejercer el periodo para el cual fue escogido, en un hecho que despertó indignación entre los presentes.
Por su parte, en suelo antioqueño se registró el homicidio de Mayo García, reconocido líder social, que ejerció como director de la Casa Juvenil de su municipio, al mismo tiempo que era integrante del Consejo Comunitario del corregimiento Pavarandocito y, según Indepaz, aparecía en los registros de la Jurisdicción Especial de la Paz (JEP) como defensor de los derechos humanos de las comunidades afrodescendientes de este municipio de la subregión del Urabá.
Entre los habitantes era conocido como El Profe y fue ultimado por impactos de arma de fuego, en un sector conocido como Caucheras, zona rural de Mutatá. Este crimen también fue denunciado por Óscar Yesid Zapata, defensor de derechos humanos de la fundación Sumapaz. Con estos dos hechos macabros, ya son cinco los asesinatos que se han registrado en lo que va del 2024 en el territorio nacional.
A estos asesinatos se suman los del concejal de Tuluá Elieced Ávila, que murió el 2 de enero luego de sufrir un atentado el 31 de diciembre de 2023; Luis Fernando Osorio, cuyo cuerpo fue hallado el 4 de enero en zona rural de Andes (Antioquia); Emerson Pulgarín Sánchez, que cayó muerto en Amagá (Antioquia) el 5 de enero.
A ellos se suman dos firmantes del acuerdo de paz con la extinta guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionaria de Colombia (Farc): Giovanny Chávez Vega, que fue asesinado el 1 de enero en Sucre (Cauca), y Juan Gabriel Hurtado, el 6 de enero en La Macarena (Meta). Y la masacre registrada en el municipio Valle del Guamez, en Putumayo, en el que perdieron la vida tres personas, el 8 de enero de 2024.