En noviembre de 2023, el expresidente colombiano Juan Manuel Santos reveló en una entrevista con el periodista Alfredo Molano Jimeno que durante su mandato solicitó inmunidad diplomática para el también exmandatario Álvaro Uribe Vélez ante posibles acusaciones en cortes estadounidenses por violación de derechos humanos. Por lo que el ex jefe de Estado expresó que aunque quiere dejar temas en el pasado, va a hablar de ello, por lo que generó expectativa entre sus seguidores.
Según Santos, la decisión se tomó para evitar que Uribe compareciera en tribunales de Estados Unidos, considerando que sería inapropiado ver a un expresidente en esa situación.
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Ante estas declaraciones, Álvaro Uribe Vélez no tardó en reaccionar, por lo que en su cuenta de X (antes Twitter) que, de haber conocido el alcance del poder de Santos en la justicia estadounidense, habría evitado pagar a un abogado cuando fue acusado del asesinato de trabajadores de Drummond.
El líder del partido Centro Democrático adelantó que tocaría temas que preferiría dejar en el olvido, pero que las afirmaciones de Santos lo obligaban a revivir.
En su cuenta de X, Uribe compartió los apellidos de algunas personas de las que hablaría, en el que incluyó a “Santos, Silva, Makled, Chávez, Árias”, entre otros. “Historias que yo debería tener en el olvido, pero que el lucimiento mentiroso me obligan a revivir. Y alguito sobre María del Pilar Hurtado y Odebrecht”, escribió.
En relación con Juan Manuel Santos, el expresidente se refiere a la “inmunidad diplomática” que destacó el Nobel de la paz. Respecto al apellido “Silva”, hizo referencia a Gabriel Silva Luján, exembajador de Colombia en Washington, que desmintió que la búsqueda de inmunidad diplomática fuera para garantizar impunidad, sino que era para cumplir con la protección constitucional de expresidentes.
Uribe también mencionó a “Makled”, en el que hizo alusión a Walid Makled, empresario venezolano vinculado al narcotráfico. También conocido como El Turco o El Árabe, fue capturado en Colombia en 2011 y extraditado a Venezuela por su participación en casos de narcotráfico y lavado de dinero.
Es relevante tener en cuenta que durante ese periodo, el expresidente Uribe manifestó su oposición a dicho proceso de extradición. En ese momento, el narcotraficante afirmó haber acumulado una fortuna que superaba los 1.200 millones de dólares, resultado de transacciones ilícitas que incluyeron sobornos a altos oficiales de la Fuerza Armada y miembros del gobierno venezolano.
En cuanto al apellido “Chávez”, el expresidente hizo referencia a un enfrentamiento verbal con el fallecido dictador de Venezuela, Hugo Chávez, durante una cumbre en la que Uribe comparó el trato a empresas colombianas con el embargo estadounidense a Cuba. La situación generó un choque entre ambos líderes políticos, con amenazas de Chávez de retirarse de la cumbre, desde entonces, es recordado ese conflicto y otros más que rodeó a los dos exmandatarios.
El expresidente también nombró a “Arias”, refiriéndose a Andrés Felipe Arias Leiva, expolítico y economista colombiano condenado por conductas punibles relacionadas con contratos sin cumplimiento de requisitos legales mientras estaba a cargo del Ministerio de Agricultura en el gobierno de Uribe, en la implementación del programa Agro Ingreso Seguro.
Otro nombre mencionado por el expresidente en su publicación de X fue María del Pilar Hurtado, que ocupó la dirección del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) en 2007 durante el gobierno de Uribe. La exfuncionaria estuvo involucrada en escándalos de interceptaciones ilegales realizadas por ese departamento y fue condenada a 14 años de prisión en 2015.
Finalmente, el expresidente anunció que abordará el caso Odebrecht, puesto que en el pasado él se destacó por hablar de su postura de transparencia ante los sobornos de la empresa en el proyecto de infraestructura vial Ruta del Sol. Uribe aseguró que no existió vínculo irregular alguno entre su gobierno y Odebrecht, de hecho, desmintió acusaciones y calumnias en su contra.
Así, Álvaro Uribe Vélez se preparó para abordar estos temas en un contexto donde las declaraciones de Juan Manuel Santos pusieron bajo el reflector la gestión de su gobierno y las decisiones tomadas en lo que se refiere a la inmunidad diplomática para el expresidente.