La presidenta de la Confederación General del Trabajo (CGT), Miryam Luz Triana, lanzó una nueva propuesta para el incremento del salario mínimo en Colombia para 2024 basado en un aumento del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de noviembre más tres puntos porcentuales.
De ser aceptada esta propuesta, el salario mínimo tendría un aumento del 13,15%, lo que representa un ajuste que pasaría de $1′160.000 a $1′312.540, sin incluir el subsidio de transporte.
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La discusión sobre el ajuste salarial surge en un contexto en el que no se ha concretado aún un porcentaje definitivo de incremento. Los gremios de trabajadores sugieren un aumento del 18%, mientras que los empresarios argumentan que debería ser entre el 10% y el 12%.
Triana enfatiza que la CGT no participa actualmente en la mesa de concertación y considera que un 18% de incremento no sería la mejor opción en términos de preservar empleos y apoyar a sectores vulnerables como los jóvenes y mujeres.
“Nosotros hemos hecho una propuesta para el incremento salarial alrededor de que tomemos el Índice de Precios al Consumidor del mes de noviembre y se aumente sobre ese a tres puntos. Eso hicieron el año 2022. Con tal de conservar el empleo, vemos que es vital tener un acompañamiento a jóvenes y mujeres”, declaró Miryam Luz Triana en entrevista a Caracol Radio. Esta proposición se fundamenta en el mantenimiento del poder adquisitivo y en la promoción de equidad en el mercado laboral.
La Confederación General del Trabajo (CGT) se enfoca en términos de política salarial en un balance entre el crecimiento económico y la protección social. El incremento propuesto por la CGT del 13,15% se basa en un análisis de la inflación y busca favorecer la estabilidad y crecimiento del empleo, así como un mejor acompañamiento para jóvenes y mujeres en el mundo laboral.
La última palabra sobre este incremento la tendrán las conversaciones entre los distintos sectores y el gobierno, cuya decisión final tendrá un impacto directo en millones de trabajadores colombianos.
La presidenta de la CGT, Miryam Luz Triana, enfatizó sobre la necesidad de proteger el poder adquisitivo de los trabajadores colombianos, enfocándose en no incrementar el salario mínimo sin un completo análisis de las repercusiones económicas que esta decisión traería para los colombianos y para la economía del país en general.
Insiste en la importancia de congelar los precios de la canasta familiar en congruencia con estas medidas y ajustar multas y otros pagos no según el salario mínimo, sino de acuerdo al Índice de Precios al Consumidor (IPC) del mes de noviembre.
Triana también sostiene que un aumento indiscriminado del salario mínimo podría desencadenar la pérdida de capacidad de compra. Así lo recalca: “También decimos que se congelen los precios de la canasta familiar y que las multas y otros pagos que hay que hacer aumenten no con el salario mínimo, sino con el IPC del mes de noviembre”, explicó al medio citado.
Su declaración subraya un enfoque en equilibrar el crecimiento salarial y el mantenimiento del poder adquisitivo. Este posicionamiento busca garantizar que los trabajadores no enfrenten una devaluación de sus ingresos frente a los costos de vida.
La preocupación principal de Triana y la CGT es asegurar que la población trabajadora mantenga su capacidad de compra y que, paralelamente, se incentive la creación de empleo en el país.
“Nosotros hemos analizado que lo importante es que no se pierda la capacidad de compra de los trabajadores y que se siga produciendo empleo”, afirmó la presidenta de la CGT a Caracol Radio.
Este comentario refleja un esfuerzo por balancear la estabilidad económica y el bienestar laboral en medio de discusiones sobre ajustes económicos y reformas salariales en Colombia.
Estas declaraciones se dan en un contexto donde el ajuste del salario mínimo es un tema recurrente en las negociaciones entre sindicatos, empresarios y el gobierno colombiano. La CGT se posiciona en este debate subrayando la importancia de que cualquier aumento esté alineado con la realidad económica del país y no lleve a consecuencias negativas para los trabajadores.