Con el cambio de año varias personas hacen listas de propósitos para cumplir, muchas se plantean aprender un nuevo idioma, bajar de peso, dejar de fumar, etc. Pero hay un gran número que tiene como propósito para el año nuevo cambiar de empresa porque no se encuentran satisfechas, bien sea por factores económicos, bajo salario emocional, relaciones con otros compañeros, o porque quieren plantearse nuevos retos profesionales.
Con este panorama, la retención de talento se convierte en un pilar fundamental para las empresas, pues cambiar de empleados trae consecuencias como capacitaciones, afectación en la continuidad de los objetivos al igual que puede generar incertidumbre en los trabajadores que continúan en la compañía.
De acuerdo con el informe Reimaginando el trabajo en Latinoamérica de EY, líder mundial en servicios de auditoría, fiscalidad, asesoramiento en transacciones y consultoría, uno de cada tres trabajadores de América Latina está dispuesto a cambiar de empleo en los próximos 12 meses. En este mismo informe se señala que los empleadores están cada vez más preocupados por retener el talento.
Diego Pasjalidis, director del programa Ticmas Academy de Ticmas, señaló que “la retención de talento sigue siendo uno de los desafíos más apremiantes para las organizaciones en la actualidad, y las proyecciones para 2024 subrayan la urgencia de abordar este tema de manera estratégica y proactiva”.
“La dinámica del mercado laboral está evolucionando rápidamente, y las empresas deben adaptarse a los cambios para asegurar la retención de sus colaboradores más valiosos”, explicó Pasjalidis.
¿Qué deben hacer las organizaciones?
Para gestionar eficazmente el talento se deben considerar varios factores:
1. Dinámica del sector: El contexto del sector, ya sea en expansión o contracción, competitivo en costos o centrado en la innovación, y la percepción de la tecnología, son determinantes en la estrategia de retención.
2. Ikigai de los empleados: La cultura organizacional debe alinearse con los intereses y necesidades de los empleados, especialmente aquellos considerados como talento clave.
3. Perfil del talento: La formación, experiencia y demanda del mercado para perfiles específicos definen las barreras de salida de los empleados con respecto a la organización.
4. Potencial y desempeño: Evaluar tanto el rendimiento actual como el potencial futuro es esencial para anticipar la contribución a largo plazo de un empleado.
Finalmente, Pasjalidis considera que las propuestas de valor diferencial deben ir más allá del salario e incluir beneficios como vacaciones, tiempo libre, formación de alto nivel para el empleado y su familia, y un plan de carrera discutido de manera colaborativa.
¿Por qué renuncian los empleados?
Juan Pablo Chaustre, gerente general Staffing, un grupo Empresarial con experiencia en procesos de Gestión Humana en Colombia, señaló que “hay estudios donde se demuestra que seis de cada 10 personas quieren cambiar de trabajo”, el experto afirma que el motivo por el cual los trabajadores quieren renunciar es porque buscan un mejor salario, mejores beneficios laborales, al igual que un crecimiento personal y profesional.
Pero la retención del talento no se limita únicamente a puestos calificados o campos profesionales específicos, empleados de diferentes áreas también tienen esa idea en la cabeza.
Infobae conversó con Carolina González, trabajadora de un restaurante, quien indicó que el ambiente laboral donde ella está es muy agradable, hacen los pagos cumplidos y ofrecen espacios que aportan valor agregado. Sin embargo, no descarta la posibilidad de irse de la empresa más adelante para explorar nuevos horizontes y enfrentar nuevos retos profesionales.
Asimismo, Daniel Fernández, vendedor en una empresa de accesorios para bicicletas, manifestó a Infobae que le gusta mucho trabajar en lo que hace actualmente pero tiene planes a futuro lejos de la empresa. Fernández tiene este empleo para pagar su carrera universitaria con el objetivo de graduarse como administrador de empresas y conseguir trabajo en una compañía donde ponga en práctica los conocimientos adquiridos, al igual que pueda tener posibilidades de crecimiento profesional.
Finalmente, las empresas saben que enfrentarán un nuevo año con bastantes retos por delante, no es fácil retener a un talento que se quiere ir, pero también es pertinente señalar que se puede hacer algo para que los trabajadores se sientan más cómodos, trabajen mejor y prolonguen su estancia en la empresa.