Se llevaron hasta la comida: ladrones acabaron con un emprendimiento campesino en Antioquia

Un robo afectó a la comunidad agrícola en Cocorná, Antioquia. En el municipio del Oriente antioqueño, 20 familias enfrentan una situación de desolación tras ser víctimas de un robo significativo. Delincuentes irrumpieron en las instalaciones de la asociación Capsicum San José, un proyecto dedicado a la elaboración y venta de productos agrícolas, sustrayendo valioso equipo necesario para su operación. El incidente ha impactado directamente en la producción y comercialización de ají, uno de los principales cultivos y productos de la comunidad.

El acto delincuencial ocurrió el miércoles 13 de diciembre de 2023 en la vereda San José. Edilson Eduardo Duque Ramírez, representante legal y administrador de la microempresa, al llegar a la sede empresarial a las 6:00 a. m. del día siguiente a los hechos, descubrió evidencias de que las rejas del establecimiento habían sido forzadas.

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La comunidad campesina de Cocorná confirmó que el emprendimiento de alimentos sufrió un robo considerable después de que delincuentes ingresaran por el techo y abandonaran el lugar por una reja que forzaron. Entre los objetos robados, según informó El Colombiano, se encuentran una procesadora de vegetales, una empacadora automática, una selladora de bolsas, una codificadora de empaques y el computador que contenía valiosa información empresarial.

El robo también afectó a la Tienda de paz San José, un proyecto de comercio comunitario que operaba desde 2005, en el que hurtaron dinero en efectivo y mercancías de abarrotes. Este golpe afectó directamente a las víctimas del conflicto armado y a los campesinos que participaban en el intercambio de productos para su canasta básica y la alimentación de sus animales.

La asociación campesina afectada por el robo señaló que los bienes están valorados en aproximadamente 50 millones de pesos, por lo que podrían enfrentarse a una bancarrota inminente. El incidente puso en jaque la estabilidad financiera de la entidad.

Una semana después, la comunidad rural enfrenta un duro revés económico debido al cierre inesperado de la tienda y de la sede de procesamiento local, ambas vitales para la venta y procesamiento de productos agrícolas.

Las familias campesinas de la región se encuentran sumidas en la incertidumbre tras la suspensión de estas actividades, que son esenciales para su sustento. Este cierre fue atribuido al miedo generalizado y la falta de medios para continuar con el trabajo, lo que ha dejado a la asociación de agricultores sin la capacidad de procesar y vender sus productos.

Lo que más tiene atemorizada a la comunidad de la vereda San José de Cocorná es que con ese robo ya son seis las ocasiones en las que la asociación campesina es víctima de la delincuencia en cinco años. Anteriormente, otro equipo de cómputo, la motocicleta de Edilson Eduardo Duque Ramírez -el representante legal de la microempresa-, y el moto carguero, que era usado para transportar los productos desde fincas hacia los clientes finales, fueron hurtados por ladrones. Con estos hechos las pérdidas alcanzan los $90 millones.

La microempresa Capsicum San José ha generado un impacto significativo en la vida de sus asociados. Este proyecto no solo adquiere productos agrícolas de familias campesinas locales, sino que además logró crear y registrar una marca propia para la comercialización de estas materias primas una vez procesadas. Este modelo de negocio realzó valor a las cosechas tradicionales y ofreció una oportunidad de crecimiento económico para los agricultores involucrados.

El proyecto cuenta con clientes de restaurantes y plazas de mercado en el departamento de Antioquia, en regiones como Cocorná, Rionegro, Medellín y El Santuario.

“En 2012 nos constituimos, éramos 18, cada uno puso $10.000 y con eso empezamos, con un capital de $180.000. Ahora quedamos en una situación muy dura, casi a empezar de cero”, sostuvo Edilson a El Colombiano, que también comentó que tras los robos les ha tocado reforzarse en seguridad e infraestructura con la instalación de rejas y candados.

Las familias que sobreviven de este emprendimiento pidieron que se lleve a cabo una investigación del caso para determinar quiénes fueron los autores del más reciente robo; asimismo, pidieron aumentar la seguridad en la región.