Entre el 13 y el 17 de diciembre de 2023 se llevó a cabo la Feria Buró 2023 en una de las zonas de parqueo del centro comercial Hacienda Santa Bárbara, en Bogotá. Aunque esta era reconocida como una de las ventanas más importantes para emprendedores en el país, la última edición fue un caos y quienes que apostaron por hacer parte del encuentro terminaron perdiendo dinero por la poca afluencia de público que tuvo el evento.
Entre los videos que se han dado a conocer sobre el supuesto fracaso que fue Buró 2023 está el de una publicista que compartió su experiencia a través de una publicación en TikTok.
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La mujer, que entre lágrimas expresó su frustración por lo vivido durante los cinco días que duró la feria en la capital del país, es la publicista de la marca de ropa para niños Blentley Kids. Según su relato, fue ella quien convenció a sus jefes de comprar un espacio en la feria para exhibir los productos de la empresa y así aprovechar la supuesta buena afluencia de visitantes que tendría la edición en 2023.
“Yo creo en las segundas oportunidades y sentía que yendo a Buró y diciéndole a mi jefe como “sí, vamos con toda, yo me encargo, yo le meto la ficha, yo soy publicista”, yo debería estar haciendo otras cosas, pero me fui allá, a vender, a darla toda, a supermadrugar y salir supertarde y no tener ni siquiera para recuperar lo del stand”, explicó.
En el metraje en el que la mujer compartió su tristeza y frustración, aseguró que ella fue la que gestionó que el emprendimiento invirtiera en la feria y pagara un espacio para dar a conocer su ropa, por lo que pidió que confiaran en ella.
“Yo sé que a mí personalmente no me van a echar, pero es frustrante porque yo como publicista les dije a mis jefes “confíen en mí, nos va a ir bien” y no tengo qué resultados entregarles”, confesó la trabajadora entre lágrimas.
La historia entre la publicista y Buró no es nueva, pues en la publicación confesó que había trabajado para una de las empresas que la feria contrata para que se encargue de la logística del evento, pero incluso en ese momento su experiencia fue mala, pues la trataron mal por ser una “empleada de bajo rango”.
“Yo trabajé en Buró hace años como parte del staff, no directamente en Buró sino de una de las marcas que ellos contratan para logística, control de acceso y esas cosas, y tuve muy malas experiencias y para mí volver ahora también era como, de cierta manera, sanar mi corazón y olvidar todo lo mal que me trataron en ese momento por solo ser una empleada de bajo rango”.
A pesar de su pasado en la feria, la publicista buscó la oportunidad de llevar a la feria la marca para la que trabaja y apostar por ganar visibilidad, pero con el paso de las horas su frustración fue creciendo, pues pocas personas visitaban el puesto en el que vendían sus productos, por lo que no tuvo más camino que llorar para dejar salir sus sentimientos por haber confiado en una feria que, según ella, la volvió a defraudar.
“Confío, doy la segunda oportunidad, apoyo para que la marca vaya, convenzo a mis jefes y encontrarme con esos resultados es como defraudar mi confianza al 200% porque solo sirvió para conocer marcas bonitas, señoras increíbles, porque ellas estaban conmigo, me abrazaban cuando me veían desesperada y ellas me dicen que fuimos es stand que más se llenó, no me imagino el resto de stands”