Durante un extenso cónclave que se llevó a cabo en la Escuela de Ingenieros Militares del Ejército en Bogotá, el presidente Gustavo Petro se reunió con los 18 ministros, directores de departamentos administrativos y altos consejeros de su gabinete. La reunión, que abarcará dos días, se enfocó en la presentación detallada de la ejecución de cada sector, los desafíos que enfrentan y las propuestas de solución.
Por este encuentro, se rumoró que el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, estaría próximo a ser relevado de su cargo, información que se divulgó al conocerse el posible sucesor: Armando Benedetti, exembajador de Colombia en Venezuela y actual diplomático en Reino Unido.
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Pero Velasco compartió algunos puntos de introspección sobre este encuentro, de esta manera destacó que fue un diálogo que calificó como “sincero” entre el presidente y sus ministros. El jefe de cartera reconoció que se abordaron tanto los logros como las fallas del Ejecutivo, y admitió la existencia de “jalones de orejas”.
El ministro subrayó la honestidad de la reunión, donde se habló sin reservas sobre el funcionamiento de cada sector. Ante la posibilidad de cambios ministeriales que podrían derivarse de este encuentro, Velasco reiteró que es competencia exclusiva del presidente Petro determinar los perfiles más adecuados para su equipo.
“Tenemos un contrato que se tiene que estar renovando cada 24 horas”, explicó Velasco, precisó que el mandatario tiene “la posibilidad de seguir o de retirar” a sus funcionarios. “El señor presidente será el que defina si continúa con este gabinete, si hace algunos cambios o si lo cambia todo. Es una decisión de él. Yo no me le meto en el fuero interno de sus decisiones”
En su intervención para los medios de comunicación, Velasco enfatizó que la reunión, diseñada para revisar los compromisos de campaña y el Plan de Desarrollo, se caracterizó por la sinceridad y la firmeza en la discusión. El ministro argumentó que, al ser responsables de brindar servicios esenciales a millones de ciudadanos, es necesario exigir que las tareas se realicen eficientemente.
“Necesitamos que la plata esté en la calle”, comentó Velasco acerca de la meta del gobierno de revitalizar la economía en medio de una desaceleración, mediante el aumento del gasto público.
A pesar de los rumores sobre la posible salida de Luis Fernando Velasco, este se mantuvo evasivo al confirmar su situación laboral. No obstante, la supuesta llegada de Armando Benedetti como su reemplazo generó especulaciones en el ámbito político.
“Hubo una reunión honesta dónde un presidente que cuida cumplir sus compromisos se sienta con sus funcionarios para saber si lo que está en el PND se va a cumplir. En esas reuniones se habla con mucha sinceridad”, dijo Velasco, que añadió: “Si uno tiene una responsabilidad con 50 millones de ciudadanos, uno tiene que exigirle el equipo que las cosas se hagan bien. Si hay alguna dificultad, se tiene que decir sin miel. Como debe ser”, concluyó el ministro del Interior.
¿Otros ministros están en peligro de perder sus puestos?
En paralelo, se especula sobre cambios en otras carteras gubernamentales, como la Cancillería y el Ministerio de Defensa. Álvaro Leyva podría ser sustituido por Luis Gilberto Murillo, actual embajador en Estados Unidos, mientras que el ministro de Defensa, Iván Velásquez, podría dejar su cargo, para ser relevado por el embajador de Colombia en Reino Unido, Roy Barreras.
Además, se contempla un enroque que implica el regreso de Laura Sarabia, directora de Prosperidad Social, al círculo cercano del presidente, en el que asumiría el rol de directora del Dapre (Departamento Administrativo de la Presidencia). Carlos Ramón González pasaría a liderar Prosperidad Social en este posible movimiento ministerial.