El presidente Gustavo Petro aspira a que su proyecto político continúe en otro Gobierno y ya puso la atención en el que será su sucesor. Durante un evento público en el Cauca, el mandatario reiteró que varios de sus programas necesitarán de otro periodo para poderse implementar.
El mandatario señaló que el Estado colombiano durante dos siglos ha fracasado en transformar el territorio para permitir superar la violencia y las desigualdades. Según dijo, las élites que han dominado son blancas y consideran a los negros y a los indígenas como esclavos.
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“Es la exclusión del territorio que ha sido movido por una exclusión mental, la exclusión de la oligarquía colombiana y así han sido dos siglos. Se trata es de cambiar eso ahora”, sostuvo el presidente Petro, durante su intervención ante las comunidades del municipio de Buenos Aires.
“Un problema que es serio y esencial, que es cómo un territorio excluido se vuelve ahora un territorio próspero, en favor de las comunidades que viven en ese territorio, y yo creo que ese es el reto de este Gobierno. Claro que no tenemos el tiempo suficiente, hay que elegir también un Gobierno progresista”, agregó el mandatario.
Según Petro, ese tiempo es necesario para poder transformar los territorios que, en su concepto, es lo que producirá paz en el país. “Si lo ponemos en los temas concretos de hoy, pasa por saber reemplazar la economía ilícita por una lícita o volver lo ilícito lícito, es decir pasa por tumbarnos una i”, señaló.
El mandatario puso de ejemplo la granja Alto del Cauca, que fue entregada a comunidades campesinas a través de la Sociedad de Activos Especiales, que tendrá capacidad para tener cuatrocientos mil pollos de engorde y hasta cien vacas lecheras, así como otros espacios de producción agrícola.
Señaló que será responsabilidad de la comunidad demostrar el éxito de ese programa que será medido por la “oligarquía”. Según Petro, eso permitirá reemplazar la economía ilícita de la cocaína. “No necesitamos ir ahí con fusil en mano a reprimir a la población, no necesitamos fumigar con venenos como antaño, no necesitamos que alguien por ahí piense en cómo se hace una masacre allá para que la gente dizque aprenda a partir del terror y del miedo, no, necesitamos demostrar que se puede”, afirmó el presidente.
El presidente señaló que si se demuestra que por ese medio es posible la transformación del territorio y la superación de las economías ilícitas, se extenderá el cumplimiento de un eje del acuerdo de paz con las Farc en el país y permitirá demostrar el cambio en el Estado.
“Una frustración de un Estado de dos siglos que no ha podido hacer progresar los territorios excluidos y la población excluida aquí mostramos que entonces cambiándolo se puede hacer, se puede hacer con la fuerza del pueblo”, manifestó el jefe de Estado.
El presidente señaló que una de las políticas que no podrá culminarse en su Gobierno será la reforma agraria, que todavía es incipiente. Según Petro, avanzan en la meta de comprar y distribuir tres millones de hectáreas, de las que llevan 48.000 en el primer año, pero que son apenas un punto de partida para la redistribución de 15 millones que en su concepto se necesitan para transformar el panorama en el país.
“Este Estado que tenemos hoy no sirve para hacer una reforma agraria, nos toca reconstruirlo”, aseguró el presidente Petro. “Tengo miedo que esa cifra de tres millones de hectáreas que quedó en los acuerdos de paz sea ilusoria si no tenemos la audacia suficiente de lograr números que sobrepasen al menos el millón de hectáreas y le podamos entregar al nuevo Gobierno, ojalá progresista, una sabiduría sobre cómo hacer con eficacia la reforma agraria”, agregó el mandatario.