Aguardiente Amarillo enfrenta nuevo lío: estos son los motivos

Un nuevo round entre la Industria Licorera de Caldas (ILC) y otras industrias dedicadas a la fabricación de licor, debido a la exclusividad que pretende con su Aguardiente Amarillo de Manzanares, dejando a un lado otros competidores.

El 6 de diciembre de 2023, la ILC celebró el fallo de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) que sacaba del mercado a Aguardiente Real Amarillo, un producto de la Fábrica de Licores y Alcoholes de Antioquia, debido a las acusaciones por presunto plagio.

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Sin embargo, el martes 12 de diciembre la ILC fue notificada por una demanda de un nuevo integrante en la polémica: Licorera de Cundinamarca, debido a que encontró una serie de inconsistencias en el Aguardiente Amarillo de Manzanares, uno de sus productos insignia.

Las revelaciones las dio a conocer Caracol Radio, en la que Licorera de Cundinamarca señala a ILC de hacer competencia desleal y publicidad engañosa en la información de su producto de la “discordia”.

Una de las quejas radica en que ILC estaría “obligando” a los tenderos a comprar tres botellas de Aguardiente de Caldas por cada botella de Aguardiente Amarillo de Manzanares; de no ser así, la compañía no permitiría la compra de su producto estrella. Esto, según Licorera de Cundinamarca, incurriría en una grave falta ilegal.

En cuanto a la estrategia de marketing que está detrás de Aguardiente Amarillo de Manzanares, estaría basada en información falsa, confusa o errónea, empezando con la persona detrás de la fórmula del popular aguardiente. Según ILC, es Camilo Jiménez, un campesino de Manzanares (Caldas); sin embargo, de acuerdo a la demanda, el verdadero creador del producto sería Juan de Dios Echeverry, un campesino oriundo de Rionegro (Antioquia).

El demandante aseveró que la historia con la que venden el Aguardiente Amarillo de Manzanares tiene información imprecisa, debido a que ILC indica que el aguardiente fue creado en 1885, pero Licorera de Cundinamarca asegura que no es así, que el producto fue adaptado en 2019.

En su defensa, ILC ha aseverado que la compañía conoció la fórmula y la mantuvo intacta hasta 2019, pero el demandante sacó a relucir la fecha de fundación de ILC, 1943.

Por último, en otro de los puntos, Licorera de Cundinamarca cuestiona la fórmula del Aguardiente Amarillo de Manzanares, en el que aseguran que es una bebida con 24 grados de alcohol y sin azúcar; no obstante, para Licorera de Cundinamarca, las bebidas bajas en azúcar se conocieron a partir de 1952. De este modo no tendría razón de ser que en 1885 ya se consumiera aguardiente sin azúcar.

Ante las acusaciones de “ventas atadas”, la ILC dijo que no era posible saberlo porque no ha podido ingresar al mercado cundinamarqués su Aguardiente Amarillo de Manzanares, debido a las restricciones conocidas en junio de 2023, que aseguraban que el producto no cumplía con todas las normas pertinentes para su comercialización.

En cuanto a la historia detrás de Aguardiente Amarillo de Manzanares, el ejecutivo recalcó que tanto la marca, como el color distintivo del aguardiente, surgieron en 1885; posteriormente ILC adquirió la fórmula.