Durante el último tramo del año se incrementa el consumo de papel y cartón debido a la alta actividad económica. Isabel Cristina Riveros, directora de la Cámara de la Industria de Pulpa, Papel y Cartón de la Andi, hizo un llamado sobre la importancia de reciclar de manera adecuada estos materiales para disminuir los desechos en rellenos sanitarios y mantener la sostenibilidad del papel y cartón.
La preocupación surge debido a la presencia de residuos no reciclables que se mezclan con papel y cartón, lo cual obstaculiza su reutilización.
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Según Riveros, la contaminación en este ámbito se debe a la inclusión de materiales que deberían omitirse por comprometer la calidad del reciclaje. Esta situación a menudo se produce por el fenómeno del “Wishcycling”, una práctica que consiste en desechar elementos por la mera expectativa de que sean reciclables, sin serlo necesariamente.
“La contaminación en el reciclaje se refiere a cualquier elemento presente en el papel y el cartón, que no debería estar ahí porque limita su reciclabilidad. Esto puede deberse al ‘wishcycling’, que es cuando depositamos un residuo que puede ser contaminante, solo por la esperanza de que sea reciclable”, resaltó la directiva.
Por ello, la Andi enfatiza la correcta separación de los residuos de papel y cartón durante la temporada de fin de año por el alto consumo que se experimenta en diferentes sectores de la economía nacional, esto se hace con el objetivo de optimizar el proceso de reciclaje.
Se insta a la población a informarse y actuar conscientemente para evitar la contaminación que reduce la posibilidad de recuperar y transformar estos materiales.
Para aprender a reciclar correctamente, la Cámara de la Industria de Pulpa, Papel y Cartón de la Andi ofrece una serie de consejos y directrices que permiten a los ciudadanos distinguir entre lo que es reciclable y lo que debe descartarse de otro modo. Estas acciones son cruciales para reducir el impacto ambiental y facilitar el trabajo de las plantas de tratamiento, las cuales dependen de recibir materiales que puedan ser efectivamente procesados.
Durante la temporada navideña y de fin de año en Colombia, una gran cantidad de productos de papel y cartón se destacan tanto en su uso como en la importancia de su correcto reciclaje.
Entre ellos, el papel de regalo, realizado en su mayoría de papel kraft o estraza, sobresale por ser 100% reciclable, incluso si está impreso o roto. A su vez, el cartón corrugado, empleado comúnmente en empaques de diversos productos, es otro candidato idóneo para el reciclo, siempre que no sea utilizado en maneras que comprometan su integridad, tales como servir de base para velas o ser quemado.
Los desperdicios de alimentos, que a menudo se encuentran en papel o cartón usado para empaquetar comida, no deben ser reciclados debido a que pueden fomentar el crecimiento de moho y debilitan las fibras del papel, poniendo en riesgo el proceso de reciclaje.
De igual importancia es la separación correcta de papeles de imprenta y escritura como parte de la limpieza de fin de año en oficinas y centros de estudio. Estos papeles deben entrar en el ciclo de reciclaje, incrementando la sostenibilidad en el uso de recursos.
Así mismo, algunos artículos como los tubos de snacks, que parecieran ser cartón, en realidad no son reciclables por su composición mixta de materiales.
Lo mismo se aplica a toallitas húmedas, pañuelos, toallas de papel y papel encerado o de horno; estos últimos por su capa de silicona. Sin embargo, en el caso de los vasos de papel o cartón con recubrimiento plástico, este puede ser retirado para permitir su reciclaje.
Las bolsas de compras de papel, ofrecidas por tiendas y almacenes, siguen siendo una opción ecológica no solo para cargar los productos adquiridos, sino también para recolectar residuos de papel y cartón destinados al reciclaje.
Es primordial que los consumidores reconozcan la importancia de estos materiales reciclables y la forma correcta de desecharlos, una acción que cobra particular relevancia en épocas de alto consumo como la actual. La correcta gestión de estos recursos disminuye considerablemente el impacto ambiental y promueve prácticas sostenibles en un momento clave para el equilibrio ecológico.