La Fábrica de Licores de Antioquia se copió del Aguardiente Amarillo y la SIC tomó medidas

De acuerdo con la autoridad nacional de protección de la competencia, la FLA estaría explotando ilegalmente uno de los productos más emblemáticos de la Industria Licorera de Caldas

Guardar

Nuevo

- créditos montaje Infobae, imágenes tomadas de las redes sociales de Licores de Antioquia y Caldas
- créditos montaje Infobae, imágenes tomadas de las redes sociales de Licores de Antioquia y Caldas

La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), entidad encargada de promover y proteger la competencia y los derechos de los consumidores, emitió el fallo final a favor de la Industria Licorera de Caldas por ser víctimas de plagio del producto Aguardiente Amarillo de Manzanares, por parte de la Fábrica de Licores de Antioquia (FLA).

Ahora puede seguirnos en WhatsApp Channel y en Google News.

De acuerdo con la SIC, el producto Aguardiente Real producido por la FLA tiene varias semejanzas con el licor que es emblema la Industria Licorera de Caldas, por lo que ordenó retirar el producto del mercado.

La FLA deberá retirar la bebida, así como detener su promoción y comercialización ya que reproduce de manera ilegal la imagen de del Aguardiente Amarillo de Manzanares. Vale señalar que cuando se anunció el lanzamiento del Aguardiente Real varias observaciones en redes sociales, inclusive memes, señalaron la gran similitud entre ambos productos.

En caso de que la Fabrica de Licores de Antioquia se abstenga de acatar las medidas podrá verse expuesta a sanciones más graves por parte de la SIC.

 la SIC puede obligar a la empresa infractora a cesar la producción y venta del producto copiado de manera inmediata - créditos SIC
la SIC puede obligar a la empresa infractora a cesar la producción y venta del producto copiado de manera inmediata - créditos SIC

En caso de que una empresa sea hallada responsable de violar la normativa de propiedad intelectual al plagiar un producto, podría enfrentar medidas como multas económicas, las cuales pueden llegar hasta los 2.000 salarios mínimos mensuales legales vigentes. Estas penalidades se calculan en función de varios criterios, incluyendo la magnitud del beneficio ilícito y la capacidad financiera del infractor.

Además de las multas, la SIC puede obligar a la empresa infractora a cesar la producción y venta del producto copiado de manera inmediata. También se puede mandar el retiro del mercado de los productos que incumplan con las leyes de propiedad intelectual. En ciertas circunstancias, la entidad de control puede exigir que se haga pública la sanción, utilizando para ello medios de comunicación y así notificar a la ciudadanía acerca de las violaciones cometidas.

Las compensaciones por daños y perjuicios son otra faceta que podría enfrentar la empresa plagiadora, pues la parte afectada tiene el derecho de iniciar acciones legales para reclamar una indemnización. Adicionalmente, se pueden efectuar correcciones en el registro de la propiedad industrial, que incluyen desde modificaciones hasta la cancelación de los registros implicados.

Las regulaciones y sanciones impuestas por la SIC tienen el propósito de disuadir a las empresas de incurrir en prácticas de plagio o competencia desleal, creando un entorno empresarial ético y justo.

En Colombia, la infracción de propiedad intelectual es un asunto penalizado por la ley, que afecta tanto a los propietarios de los derechos como a los que los vulneran. Consistiendo en un delito contra los derechos de autor y derechos conexos, esta falta es sancionada de acuerdo con normativas como la Ley 23 de 1982, la Ley 44 de 1993 y la Decisión Andina 351 de 1993. Las consecuencias de tales acciones incluyen sanciones penales, civiles y medidas cautelares.

Las sanciones penales por violar derechos de autor pueden ser severas y resultar en penas de prisión, mientras que las sanciones civiles podrían conllevar multas económicas significativas. Los procedimientos legales también permiten medidas cautelares, que pueden incluir el secuestro de mercancías infractoras, entre otras.

El riesgo de las bebidas sin sellos de autenticidad y calidad

Durante las festividades del 2022 varios lugares de Bogotá y Soacha registraron intoxicaciones con sustancias venenosas como el metano, utilizado para fabricar licor adulterado - créditos (Infobae, Jesús Avilés)
Durante las festividades del 2022 varios lugares de Bogotá y Soacha registraron intoxicaciones con sustancias venenosas como el metano, utilizado para fabricar licor adulterado - créditos (Infobae, Jesús Avilés)

Durante las pasadas festividades decembrinas en Bogotá y Soacha, el consumo de licor adulterado resultó en la muerte de 50 personas. Este alarmante saldo ha llevado al director del Instituto Nacional para Ciegos, Carlos Parra, a proporcionar recomendaciones esenciales para identificar bebidas alcohólicas fraudulentas y evitar riesgos para la salud. Parra destacó la necesidad imperante de comprar alcohol exclusivamente en tiendas con certificación y sugirió limitar el consumo en lugares que carezcan de garantías de autenticidad y calidad.

En una aparición en el programa de Citytv, “Le tengo el remedio”, Carlos Parra insistió en inspeccionar las tapas, sellos y estampillas de seguridad de las botellas, ya que la manipulación o ausencia de estos puede indicar adulteración. Este hecho es de especial relevancia, teniendo en cuenta que la venta de licor adulterado es ilegal y sus efectos pueden ser mortales, como se evidenció en los 49 decesos registrados entre el 22 de noviembre de 2022 y el 14 de enero de 2023, según datos del Instituto Nacional de Salud (INS).

Guardar

Nuevo