Así cayó cargamento de estupefacientes que tenía como destino la cárcel El Pedregal

Dosis de tusi, cocaína y popper se encontraban camufladas en encomiendas para posteriormente ser comercializada por los privados de la libertad al interior del centro penitenciario en Antioquia

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Las autoridades encontraron un cargamento
Las autoridades encontraron un cargamento repleto de elementos prohibidos que pretendían ingresar a El Pedregal - crédito Suministrada

A través de un operativo sin precedentes que se llevó a cabo en la cárcel El Pedregal de Antioquia, unidades del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, Inpec, realizaron la que sería la mayor incautación de elementos prohibidos en lo que va de 2023.

De acuerdo con lo informado por las autoridades, hasta el momento, 18 de las 112 encomiendas inspeccionadas, que iban para los privados de la libertad, contenían sustancias ilegales y objetos no permitidos.

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Al parecer, la empresa involucrada en el traslado de estos paquetes es Ágil Entregas S.A.S., cuyo camión transportaba cocaína, popper tusi, marihuana, licor entre otros artículos no permitidos.

Incautaciones y detalles del operativo

Fuentes cercanas le revelaron a Infobae Colombia que, presuntamente, los elementos ilícitos tenían como destino el patio 6, nivel 1, un pabellón de máxima seguridad del centro penitenciario. La exitosa detección de estos objetos se desarrolló en medio de las acciones contra la corrupción y ha sido posible gracias a la pericia de los funcionarios de la cárcel Pedregal. Adicionalmente, se descubrió que la intención era comercializar estos elementos de manera ilegal dentro del penal.

Infobae Colombia tuvo conocimiento de que en el cargamento los uniformados encontraron: “38.400 gramos de marihuana, 3.230 gramos de cocaína, 600 granos de tussi rosado, 20 unidades de popper, 65 litros de ron, 10 litros de aguardiente, 24 cervezas, 5.000 gramos de levadura, 11 celulares, 01 módem de internet, 41 sim card, 50 cargadores para celular, 2 bafles, 1 gramera digital, 2.600 cigarrillos, y hasta un televisor portátil” indicó la fuente allegada al Inpec.

Contexto de la situación carcelaria

El sistema penitenciario en Antioquia y en Colombia enfrenta constantes desafíos en términos de seguridad y prevención del delito dentro de sus instalaciones. Este tipo de operativos refleja el compromiso de las autoridades con la seguridad y la lucha contra las redes de corrupción que afectan el normal funcionamiento de las prisiones en el país.

Los elementos ilícitos tenían como
Los elementos ilícitos tenían como destino el patio 6, nivel 1, un pabellón de máxima seguridad del centro penitenciario de Antioquia - crédito Colprensa

Precisamente, debido a esta serie de estrategias que ha venido implementado el director del Inpec, coronel Daniel Gutiérrez, con las cuales pretende frenar la extorsión, corrupción y delincuencia dentro de las cárceles, ha sido amenazado en repetidas ocasiones.

El Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) intensificará las inspecciones al interior de las prisiones, realizando requisas diarias, mientras que el Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (Gaula) llevará a cabo requisas semanales, con el fin de evitar que los reclusos posean teléfonos móviles. Esta medida responde a la identificación de 30 individuos involucrados en actividades de extorsión dentro de las cárceles, quienes serán segregados para impedir la formación de redes criminales. La mayoría de los señalados hacen parte de organizaciones delictivas.

En palabras del coronel Gutiérrezf, “El Inpec le va a hacer requisas a estos 30 extorsionistas y el Gaula le va a hacer una requisa semanal. Si se encuentra un teléfono en la celda de alguno de esos 30 delincuentes, de inmediato la Fiscalía va a abrir un proceso judicial para investigar a los servidores penitenciarios que no actúan en transparencia y permiten el ingreso de un teléfono para que hayan estos”. Por tanto, las autoridades penitenciarias estarán sujetas a investigación si se evidencia complicidad en el ingreso de dispositivos prohibidos.

El plan de acción implementado se enmarca en la estrategia para combatir el fenómeno de extorsión desde las cárceles, un problema que afecta gravemente la seguridad tanto interna como externa de los centros de reclusión, y que repercute en la sociedad en general.

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