Finalmente descubrieron el ladrón que se robaba sus gallinas, pero se llevaron tremenda sorpresa

Tremenda sorpresa se llevaron los habitantes de Cicuco, en la zona centro de Bolívar, cuando descubrieron a un supuesto lardón de gallinas, que actuaba de noche.

Luego de extenuantes jornadas de vigilancia de la comunidad, junto con la Policía (que ya había sido alertada de los hurtos), lograron encontrar al responsable.

Ahora puede seguirnos en WhatsApp Channel y en Google News.

Ni ladrón, ni humano, se trataba de una babilla, que podría superar los dos metros y medio de largo. Al parecer y, según información suministrada por el comandante de la Policía del departamento de Bolívar, coronel Alejandro Reyes, a Noticias Caracol, el reptil se habría alejado del río Magdalena y llegó a Cicuco en busca de alimento.

“Se había salido de su hábitat a orillas del río Magdalena y llegó hasta las casas de los campesinos en el municipio de Cicuco, Bolívar. El reptil, que tenía a algunos habitantes haciendo turno de guardia, había logrado comerse” varios animales de corral, explicó.

En total, fueron quince gallinas y cuatro pollos, que tras su desaparición, encendieron las alarmas en el municipio que se reunió en torno a un objetivo: atrapar al ladrón de aves y llevarlo antes las autoridades.

Sin embargo, al encontrar al verdadero responsable, los habitantes de Cicuco decidieron respetar su vida, entendiendo que estaba perdido, y trasladarlo a un centro de atención animal en donde estará sujeto a revisión veterinaria, antes de ser liberado.

“Ellos se convierten en una amenaza para el ser humano, ya que son demasiado celosos. Se debe ser muy cuidadoso y respetuoso con eso, ya que no se les puede acercar. La mejor medida es alejarse, dejarlos quietos y que ellos busquen el hábitat normal”, sugirió el experto en temas ambientales Luis Quintero, en conversaciones con el medio citado.

Las babillas, de acuerdo con un informe de la Policía, “se encuentra en vía de extinción debido a la caza indiscriminada y su ilegal comercialización por traficantes de fauna”, que ven una fuente de ingresos en la venta de esta especie, por el alto valor que llegan alcanzar su piel y carne.

De ahí que en 2023, más de trescientas ejemplares del ‘Caiman crocodilus’ hayan sido rescatados, en operaciones orquestada por autoridades ambientales, empezando por las 234 babillas que el Ejército, la Fiscalía y la corporación Autónoma del Magdalena (Corpmag) lograron recuperar en el corregimiento de Santa Rita (Remolino), a mediados de junio.

“Gracias a un arduo trabajo de inteligencia militar, se obtuvo información sobre una vivienda ubicada en ese sector, donde mantenían ocultos a los reptiles, por lo que se dio inicio al proceso de allanamiento, y efectivamente se encontraron en el lugar estanques adecuados de forma improvisada, cubiertos por tablas para mantener a los animales en cautiverio, las 234 ejemplares de babillas”, comentó entonces el Ejército Nacional, a través de un comunicado.

Se cree que pudieron haber alcanzado los 1.400 millones en el mercado de especies, pero, por suerte, fueron liberadas, antes de que salieran del Magdalena. Caso aparte al de octubre, cuando 105 babillas fueron rescatadas de una lancha en el departamento del César.

El operativo estuvo a cargo del Batallón Fluvial de Infantería de Marina No.17, que lograron acorralar a los traficantes en el sector de El Ferry (La Gloria), a tal punto que dejaron la embarcación y huyeron sin su “botín” de 800 millones.

“Al parecer, los reptiles serían comercializados por la alta demanda de su piel y su carne”, explicó, entonces, la Fuerza Naval del Caribe, lamentando que, a diferencia del operativo en Santa Rita no capturaran a los responsables de capturar y poner en venta a las babillas.