El metro de Medellín es uno de los sistemas de transporte público más utilizados en esa ciudad, ya que a diario se movilizan cerca de 800.000 personas a lo largo de los 31,3 kilómetros que componen la ruta.
El metro ya cuenta con diferentes tarifas, siendo el precio de uso frecuente de 2.880 pesos, y 3.280 pesos para aquellos que lo utilizan eventualmente. Sin embargo, este precio puede variar dependiendo de los componentes que se utilicen, es decir, metro, tranvía, metro cable, bus y alimentador.
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En medio de ese debate y de las dificultades financieras que enfrentan los sistemas de transporte público en Colombia, el economista José Fernando Jaramillo Boon, magíster en Ingeniería - Infraestructura y Sistemas de Transporte de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Medellín, se dio a la tarea de proponer un innovador esquema tarifario para el metro de Medellín.
Jaramillo se inspiró en los mejores Sistemas Integrados de Transporte Masivo (SITM) a nivel mundial y planteó un experimento basado en tres esquemas tarifarios existentes: tarifa plana, tarifa por distancia y tarifa por zonas.
La Línea A del metro de Medellín ya maneja una tarifa diferencial, según segmentos de población. Sin embargo, Jaramillo Boon buscó evaluar la viabilidad de un esquema tarifario por zonas.
La idea divide el trayecto en tres zonas: Norte, Centro y Sur, con tarifas diferenciadas. Jaramillo realizó encuestas a más de 700 usuarios del Metro para evaluar la aceptación del nuevo esquema. Las tarifas serían de $1.594 para viajes dentro de una misma zona, $1.952 pesos entre dos zonas, y $3.022 pesos entre tres zonas.
Los resultados de la investigación mostraron que la mayoría de usuarios de autobuses migraría al metro para viajes entre una y dos zonas, pero un aumento excesivo en la tarifa para viajes entre tres zonas podría motivar a los usuarios a optar por el autobús.
Con ese hallazgo, se incorporó una metodología de análisis de bienestar social para asignar un subsidio cruzado, revirtiendo así la preferencia y logrando que los usuarios optaran por el metro.
Así las cosas, los resultados finales indican que la implementación del esquema de zonas tarifarias podría aumentar la participación del metro en el mercado metro-bus al 53%, representando un 18% del transporte en el Área Metropolitana del Valle de Aburrá.
Además, se proyecta un aumento del 25,8% en el número de pasajeros en comparación con los datos de la encuesta origen destino (EODH) 2017. El esquema de zonas tarifarias se plantea como compatible con las tarifas diferenciales existentes, pero se destaca la necesidad de ampliar la investigación a otros mercados, especialmente en la transición hacia medios de transporte más sostenibles.
En este trabajo el magíster se centró en analizar cómo un nuevo esquema tarifario podría influir en el uso del sistema público, tomando el metro de Medellín como caso de estudio.
Cómo es el metro de Medellín
El metro está compuesto por las líneas A y B. De las 21 estaciones en total, 8 pertenecen a la Línea A, de las cuales son elevadas, y 5 de las 6 estaciones de la Línea B son elevadas. Además, el metro cuenta con 80 trenes que atienden la demanda de ambas líneas y transportan aproximadamente 800.000 usuarios al día. En conjunto, el sistema metro, que incluye metrocables, tranvía de Ayacucho y líneas de buses, moviliza cerca de 1.200.000 viajeros diariamente.
Las estaciones del tranvía son 3: San Antonio, Miraflores y Oriente. Las restantes (San José, Pabellón del Agua, Bicentenario, Buenos Aires, Loyola y Alejandro Echavarría), se les llama paradas. Adicionalmente, en 2018 todas las rutas integradas del Valle de Aburrá quedaron operando con la tarjeta Cívica, es decir unos 1.526 buses.
Algo curioso es que en un tren de 6 coches del metro caben 6 veces el número de personas que en todo el tranvía de Ayacucho, alrededor de 300 personas. Por otra parte, si se juntan los 240 coches de tren, las 498 telecabinas, los 31 buses articulados, los 47 buses padrones y los 12 vehículos tranviarios se movilizarían al tiempo 89.584 pasajeros. Es más del doble de la capacidad del estadio de Medellín y un número similar a los espectadores que caben en el estadio de Wembley, Inglaterra.
Solo en la línea A, las 60 unidades de tren, cada una compuesta por tres coches, recorren en promedio 28.300 km en un día típico. Es como ir y volver en un mismo día a Afganistán, país que está a 14.146 km de Colombia. Sumado a esto, la Línea A tiene la capacidad de mover a 41.480 pasajeros por hora en cada sentido y la de la Línea B es de 16.231 pasajeros/hora-sentido.
Se presume que de lunes a viernes un tren en Línea A recorre 28.300 km diarios y 2.300 km en la Línea B. Los sábados el promedio es 25.000 km en línea A y 2.300 en línea B.Los domingos y festivos, 15.200 km en Línea A y 1.700 km en Línea B y la pilona más alta del sistema Metro está ubicada en la Línea J (Cable La Aurora), mide 33,84 metros de altura.