Para nadie es un secreto que el perro Wilson quedará grabado en la memoria de los colombianos de manera eterna. Este perro desempeñó un papel crucial en la búsqueda de los cuatro hermanos que sobrevivieron en la selva del Guaviare luego de la caída de la avioneta en la que se movilizaban, ya que se perdió su rastro durante el operativo.
Según lo dicho por el general Pedro Sánchez, comandante de Operaciones Especiales de las Fuerzas Militares y líder de la Operación esperanza, el jueves 23 de noviembre se llevó a cabo la entrega de una estatua en homenaje al perro Wilson. El reconocimiento al can no es insignificante, pues se considera que su participación resultó fundamental para localizar a los hermanos Mucutuy. Las huellas que dejó a su paso sirvieron como guía para que el equipo de búsqueda encontrara a los menores, llevando a cabo un auténtico milagro en medio de la densa selva.
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El canino resultó fundamental para encontrar a Lesly, Cristin, Soleiny y Tien Noriel, quienes permanecieron con vida durante 40 días en la inhóspita selva colombiana. No obstante, tras dos meses de búsqueda, el compañero de Wilson, el soldado Cristian David Cuaran tuvo que aceptar que el animal se había quedado perdido en la selva, y encontró su consuelo en los cuatro hermanos de Wilson.
Según reveló Cuaran en entrevista con Caracol Radio, ahora su leal compañero es el hermano de Wilson, quien es actualmente entrenado en la misma especialidad de búsqueda y rescate. “Ahora tengo al hermano de él, se llama Uber. Con él también hice curso y se encuentra en el Fuerte Militar de Tolemaida”, dijo el militar.
Frente a la historia de Wilson, el valiente can que no regresó de la selva, recientemente se lanzó el libro “Operación Esperanza”, que detalla cómo se llevó a cabo el objetivo militar que resultó en el rescate de los cuatro niños perdidos en la selva amazónica. En el texto, la historia de Wilson ocupa un lugar destacado, ya que su participación heroica fue fundamental para el desenlace exitoso. El homenaje al comando canino responde a un deseo popular que surgió desde el principio, cuando los colombianos solicitaban los más altos honores para este héroe de cuatro patas.
“Wilson muy seguramente será recordado como ese héroe de cuatro patas que participó de la Operación Esperanza. Aunque empleamos todas las capacidades humanas y tecnológicas, fue imposible hallarlo”, manifestó en su momento el general Pedro Sánchez, comandante del comando de operaciones especiales de las Fuerzas Militares.
El recuerdo de Wilson prevalece
El perro Wilson era un pastor belga malinois que nació en las montañas de Chiquinquirá, Boyacá. Creció y se convirtió en todo un experto en rastreo e intervención. Gracias a sus entrenamientos y resultados llegó a ser un integrante del Comando Conjunto de Operaciones Especiales de las Fuerzas Militares, donde también están sus padres, Drugia y Manred.
El entrenamiento de rastreo que recibió Wilson depende en gran medida del olfato y la orientación de los perros. Mediante una prenda de referencia, los perros son entrenados para rastrear y ubicar rastros a diferentes distancias. El soldado profesional Elvis Porras señaló que Wilson se destacó por su energía, carácter y la increíble conexión que tenía con su guía.
Era tal el vínculo y carisma que tenía con las personas que la mayor de los hermanos Mucutuy, Lesly, fue quien a través de dibujos contó que estuvieron acompañados en algún momento por Wilson. La conmovedora representación del perrito que pintó cuando fue trasladada al Hospital Militar captó la atención de los colombianos, quienes desde entonces lo consideran como un héroe y lo inmortalizaron a través de diferentes imágenes y nombramientos.