La compañía Petrobras, la más importante industria petrolera de Brasil, realizó un significativo hallazgo de una reserva de gas natural en aguas profundas del mar Caribe colombiano. Este descubrimiento abre la puerta a futuros planes de asociación con otras empresas con reservas en la región Caribe, con el fin de transformar a Colombia en una nación exportadora de este combustible.
El anuncio de Petrobras refleja una estrategia de fortalecer la presencia energética en la zona y, a la vez, evidencia el potencial que tiene Colombia en el mercado de hidrocarburos.
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La alianza con otras compañías se presenta como una oportunidad para potenciar la economía nacional y avanzar hacia una mayor diversificación en las exportaciones del país, que históricamente han estado lideradas por el petróleo crudo.
“Estamos trabajando en un plan de desarrollo de esas reservas para atender el mercado de Colombia y, eventualmente, si nos juntamos con empresas que también tienen reservas en la región, montar una planta para licuar ese gas natural y poder exportarlo a donde queremos”, afirmó el presidente de la mayor empresa brasileña de hidrocarburos, Jean Paul Prates, en entrevista con EFE.
El acuerdo entre Petrobras y potenciales socios en la región podría significar un importante avance para la industria de gas y petróleo en Colombia, además de marcar un hito en la colaboración entre naciones con reservas caribeñas.
Aunque no se han detallado plazos ni compañías específicas, se entiende que el desarrollo y explotación de dichas reservas requerirá una inversión considerable y una logística adecuada para la exportación del gas natural.
Esta iniciativa se perfila como un movimiento estratégico en un contexto de aumentada demanda global de gas natural, dada su reconocida menor huella de carbono en comparación con otros combustibles fósiles. Además, refuerza el estatus de Colombia como un actor relevante en el escenario energético de América Latina y el mundo. Aunque este proyecto aún se encuentra en sus primeras fases, sin duda alguna marcará un precedente en la infraestructura y la economía energética de la región.
El hallazgo de esta reserva de gas natural fue realizado por la petrolera brasileña Petrobras en asociación con la empresa colombiana Ecopetrol. Según los informes, este yacimiento contiene reservas estimadas en 4 tetrapiés cúbicos (TPC) de gas natural, lo cual supera las reservas probadas actualmente en Colombia.
Este descubrimiento se suma a otras importantes reservas identificadas por empresas como Ecopetrol, Shell y Occidental Petroleum en áreas cercanas. Existe un interés conjunto en establecer un “hub” que facilite la exportación de estas reservas de forma colectiva, lo que representa un potencial crecimiento en la infraestructura energética de la región.
El desarrollo de estas reservas hace parte del Plan Estratégico 2024-2028 de Petrobras, presentado este jueves 23 de noviembre, en el que se contemplan inversiones por un total de 102.000 millones de dólares. De este monto, 73.000 millones de dólares serán asignados a la exploración y producción de petróleo y gas. Sin embargo, solamente 1.300 millones de dólares se destinarán a operaciones internacionales, en la que están incluidas las de Colombia.
“El Plan Estratégico no entra en esos detalles (lo que sería destinado a Colombia) pero la verdad es que (la inversión) está vinculada al desarrollo de la reserva que tenemos allí. Después de explorar y de descubrir, y de comenzar a producir, la pregunta es ¿cómo monetizar ese gas más allá del mercado colombiano?”, indicó el directivo de la multinacional brasileña.
La petrolera estatal brasileña Petrobras confirmó su intención de retomar el desarrollo de las reservas de gas natural del bloque Tayrona, situado a 32 kilómetros (casi 20 millas) de la costa norte de Colombia. Después de una pausa en sus operaciones, la compañía planea iniciar la producción de gas en dicho bloque para el año 2026.
Este movimiento estratégico ocurre tras la revisión de la política de desinversiones implementada durante el gobierno de Jair Bolsonaro y la reasunción del presidente progresista Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil.
Con el cambio de dirección bajo la administración de Lula, Petrobras busca aprovechar la decisión de las autoridades colombianas de promover el desarrollo de las reservas de gas en aguas marinas. Este enfoque tiene como objetivo disminuir la dependencia de las importaciones de gas y fortalecer las industrias de energía y petroquímica de Colombia.
A su vez, sugirió la posibilidad de que las empresas con reservas adyacentes formen un consorcio para la oferta conjunta de gas natural y licuado, idea que podría considerarse en planes futuros.
La directiva de Petrobras, liderada por Prates, ha desestimado la posibilidad de que los planes de la empresa en Colombia se vean afectados por las políticas del presidente colombiano, Gustavo Petro, orientadas a acelerar la transición energética del país.
El gobierno de Petro por el momento dejó de otorgar la concesión de nuevas licencias para la exploración de petróleo y gas natural en Colombia, lo que implica que las petroleras operando en el país deben enfocarse exclusivamente en el desarrollo de las concesiones previamente otorgadas.
Las operaciones de Petrobras y otras empresas en el sector hidrocarburos en Colombia están delimitadas por el marco regulatorio actual que prohíbe la emisión de nuevas licencias para exploración petrolera y gasífera. La medida vigente busca controlar la expansión de la industria en sintonía con los objetivos de la transición energética y la preservación del medio ambiente.
“Detectamos que el presidente (Petro) habla mucho de suspender la producción pero en una determinada área, en la selva amazónica colombiana, en donde hay una disputa antigua, que es polémica por contar con una reserva ambiental importante y donde ya hay bloques exploratorios de petróleo. Me parece que es un asunto querido, un asunto valorizado, pero para la política interna”, concluyó Prates.