A través de su campaña “Soy Su Voz”, la organización Aldeas Infantiles S. O. S. convocó a la protesta que anualmente se lleva a cabo para marchar en contra del abuso sexual infantil. La manifestación de este año, que será el 23 de noviembre, se enfocará en la crisis de la salud mental de las víctimas y llenarán la Plaza de Bolívar con 2.000 juguetes.
Durante los últimos años los números de abuso sexual infantil en Colombia han alcanzado niveles alarmantes. Por ejemplo: de acuerdo con cifras del Instituto de Medicina Legal, en 2022 en el país se registraron 20.877 exámenes médico-legales por presuntos delitos de carácter sexual contra menores de edad. Esta cifra representa un incremento del 19% respecto al número de exámenes practicados durante el año anterior. Además, esa cifra constituye la más alta registrada en los últimos 10 años. Con relación a 2023, durante el primer semestre, se reportaron más de 11.000 exámenes.
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Dato preocupante: a diario, en Colombia, cerca de 57 niños, niñas y adolescentes, son víctimas de violencia sexual; la mayoría no recibe la atención psicológica que estos casos requieren.
“Toda víctima de abuso sexual debe acompañarse con un tratamiento psicológico que mitigue el impacto que el hecho pudo ocasionar en su salud mental. En los niños y niñas, particularmente, estas afecciones son mucho más profundas”, explicó Esteban Reyes, director nacional de Aldeas Infantiles S.O.S. “Por ende, su tratamiento debe ser un proceso especial y profesional que, en muchos casos en Colombia, no ocurre. Por eso nos tomamos la Plaza de Bolívar para pedir al Estado un mayor acompañamiento a las víctimas de este flagelo”, puntualizó Aldeas Infantiles S. O. S.
Algunos de los trastornos más frecuentes que afectan la salud mental que se derivan luego de un acto de violencia sexual son: depresión, trastorno de estrés postraumático, ansiedad, dificultades del sueño, síntomas somáticos (cansancio y debilidad causados por ansiedad), trastornos de pánico y pensamientos suicidas.
Entendiendo que estas afecciones influyen en niños y niñas, las mujeres afrontan un riesgo mayor, todo por causa de su salud sexual y reproductiva (embarazos no deseados, abortos inseguros y contraer infecciones).
Niñez afectada
Las cifras de casos de abuso sexual a niños, niñas y adolescentes en Colombia encienden las alarmas y se espera que con este plantón el Gobierno nacional y las instituciones tomen cartas en el asunto.
- 2022 fue el año con mayor número de casos de Proceso Administrativo de Restablecimiento de Derechos (Parf) del Icbf registrado en la historia, por motivo de violencia sexual, con 19.065 casos.
- El 87% de las víctimas fueron mujeres.
- De 10 a 14 años corresponde el rango de edad más frecuente de las víctimas registradas.
- El 81,42% de los casos registrados sucedieron en la vivienda de la víctima, y más del 82% de los victimarios resultaron ser cercanos al núcleo familiar del o la menor.
- La impunidad en estos casos alcanza al 90%.
La ciudad que lidera los registros de denuncias por abuso sexual es Bogotá, con 4.142 casos durante 2022. Le sigue Medellín (668) y la capital del Valle del Cauca, con 587. Evidentemente, la población de Bogotá es más numerosa con relación a las ciudades de este escalafón. Si se mantiene la relación de que por cada 100.000 habitantes se registran las denuncias, en el caso de la capital colombiana arroja como resultado 51, Medellín 26 y Cali 23.
Actuar a tiempo
Desde la organización no gubernamental y sin ánimo de lucro, Aldeas Infantiles S.O.S., se dan algunos lineamientos que padres y cuidadores de menores pueden efectuar ante la sospecha de un abuso. Sin dejar de lado que siempre habrá profesionales capacitados para atender este tipo de casos ante la ruta dispuesta por el Icbf.
Como primer paso, recomiendan escuchar cuidadosamente al niño o niña, darle confianza y animarle a hablar sobre lo que les ha sucedido. Mantener la calma para dar la impresión de seguridad, calma, cuidado y protección. También es importante buscar atención médica y psicológica.
La línea de atención 141 es especializada a niños, niñas y adolescentes víctimas de violencia sexual. Ante cualquier caso de abuso sexual contra menores, la ciudadanía puede activar esta ruta especializada.