En la madrugada del 2 de junio de 2023, los vecinos del edificio Torres de Alcalá, en Sogamoso (Boyacá), se alertaron por el estruendo que provocó la caída de una mujer desde el séptimo piso del edificio, quien se llevó a su paso unos cables de energía.
La escena no pudo ser peor para su familia: el cuerpo tendido sobre el asfalto de la abogada Laura Juliana Pérez, que estaba próxima a cumplir 31 años de edad y se había mudado recientemente al apartamento con su entonces pareja, Víctor Vianchá.
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De acuerdo con los testimonios recogidos por El Tiempo, vecinos del edificio escucharon un fuerte alegato, que incluía insultos hacia Pérez. Incluso fue uno de vecinos el que alertó de la situación a la administración del edificio, siendo esta la que contactó a la Policía.
En ese momento y según el informe entregado por las autoridades, Laura Juliana se habría suicidado, pero esa versión no se la cree la familia de la joven abogada. Para sus parientes, el prometido de la joven tendría algo que ver en su muerte, ya que era el único que se encontraba en el apartamento cuando ocurrieron los hechos.
En relación con el caso, Víctor Vianchá se encuentra en proceso como “indiciado”. Mientras tanto, la familia de Laura Juliana está a la expectativa de los resultados de una prueba física realizada por la Fiscalía, la cual será determinante en la dirección que tomará la investigación sobre la muerte de la mujer en Boyacá.
En la búsqueda por esclarecer la muerte de Laura Juliana Pérez y determinar si se trató de un feminicidio, la familia emprendió una investigación independiente que incluyó el análisis de un perito forense. Según los resultados plasmados en un video con simulación 3D, la caída de la mujer desde el balcón apunta a que fue provocada por una fuerza externa. El perito argumentó que los movimientos parabólicos del cuerpo sugieren un impulso ejercido por alguien más.
Según conoció El Tiempo, las indagaciones sobre el caso de Laura Juliana Pérez siguen en curso, además, se está a la espera del dictamen de Medicina Legal para evaluar si existe alguna variación en la versión preliminar del suicidio.
Adicionalmente, la entidad encargada de la investigación también espera los resultados de una prueba similar realizada por profesionales contratados por la familia de la abogada fallecida.
Las pistas que inquietan a los familiares de la abogada boyacense
De acuerdo con lo conocido por el medio citado, Laura Juliana vivía un infierno a raíz de su relación con Víctor Vianchá, a quien señaló ante sus familiares como un consumidor recurrente de alcohol. Incluso, la joven había decidido cancelar su matrimonio con el ahora indiciado.
Una de las pruebas que evidenciarían la crisis en la entonces pareja fue la presunta carta que Juliana habría escrito a su pareja:
“Nuestra comunicación se rompió. No me atrevo a hablarte de frente porque tu reacción siempre es muy fuerte, creo que ya no me puedo arriesgar a eso”, según reseñó El Tiempo.
En videos que fueron recuperados por la familia de Juliana se evidencia el fuerte altercado que tuvo la mujer y su pareja en un establecimiento nocturno de Sogamoso, horas previas al fallecimiento de la abogada. En el clip, reseñado por el medio citado, se observa a Vianchá salir del lugar mientras grita a su entonces pareja: “La odio. La odio por siempre. No la quiero volver a ver ni a escuchar”.
Por último, otra particularidad en la actitud de Vianchá fue la que tomó cuando Juliana se encontraba en un centro asistencial de Sogamoso. Allí, según el hermano de la abogada, el indiciado le afirmó que su pareja “le había arruinado la vida”. Se conoció además que el sospechoso asistió al sepelio de Laura Juliana, y desde ese momento no se supo más del joven.