Alerta por brote de tuberculosis en una cárcel en Montería

La Secretaría de Salud Municipal realiza una rigurosa vigilancia a cada paciente diagnosticado. Los reclusos están aislados y s estableció un cerco epidemiológico

La secretaría de salud de Montería confirmó que los reclusos están en tratamiento - crédito archivo Infobae

La Secretaría de Salud de Montería informó que inició las acciones de control y prevención ante la detección de cuatro casos activos de tuberculosis en el Centro Penitenciario Las Mercedes, en la capital del departamento de Córdoba

Los enfermos, todos de sexo masculino, presentan síntomas como tos con flemas, tos con sangre, fiebre, sudoración nocturna y pérdida de peso. Según la Secretaría de Salud, la tuberculosis es una enfermedad respiratoria grave que puede llegar a ser mortal en caso de no ser tratada, por lo cual es fundamental que las personas que presenten estos síntomas consulten a un médico de inmediato.

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En el caso del Centro Penitenciario Las Mercedes, los pacientes están aislados en un pabellón especial y reciben el tratamiento completo de seis meses. Además, la Secretaría de Salud destacó que la búsqueda de sintomáticos respiratorios dentro del penal se lleva a cabo de manera constante por el personal de salud de la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (Uspec) y en jornadas de apoyo en conjunto con el Municipio y el Departamento.

De hecho, se conoció que las acciones de control y prevención incluyen el aislamiento de los pacientes en un pabellón especial, realizar cercos epidemiológicos para identificar a las personas que han tenido contacto con los pacientes, hacer de pruebas moleculares para micobacteria. Además de la entrega de tratamiento a los pacientes y a las personas que han tenido contacto con ellos.

Según las autoridades sanitarias dicen que el brote de tuberculosis está controlada - crédito Inpec

Por otra parte, la Secretaría de Salud hace un llamado a la comunidad a que esté atenta a los síntomas de la tuberculosis y a que consulte a un médico de inmediato si los presenta.

La tuberculosis, un cuento viejo en Montería

Los casos recientemente reportados de tuberculosis en Las Mercedes no son un hecho aislado. De hecho en 2016 se reportó que los reclusos que padecían enfermedades como tuberculosis o Sida no estaban recibiendo sus medicamentos de control. Lo anterior lo denunció el entonces secretario de salud José Jaime Pareja. Eso deja en evidencia que en la cárcel ya había presencia de la enfermedad y abre la duda a si se están tomando las medidas de saneamiento necesarias para erradicarla.

En su momento Pareja aseguró que había una evidente deficiencia con respecto a la prestación del servicio, pues tenían dos meses de no recibir los medicamentos correspondientes, pese a que son enfermedades transmisibles. “Nos parece grave esa situación y es más crítica aún por el grado de hacinamiento que existe en el penal el cual tiene capacidad para 700 presos y hay más de dos mil”, sentenció Pareja.

La cárcel tiene más problemas sanitarios

A finales del mes de octubre del presente año, la Defensoría del Pueblo expresó su profunda preocupación debido a la complicada situación sanitaria, de salud y alimentaria que hay en el establecimiento penitenciario Las Mercedes, ya que según la entidad se identificaron graves riesgos de vulneración de los derechos humanos de la población privada de la libertad.

Según la Defensoría la cárcel tiene graves problemas sanitarios - crédito Personería

De hecho, se ha evidenciado que la atención médica dentro de la cárcel no cumple con los estándares necesarios. Las citas y cirugías de baja y media complejidad son autorizadas para llevarse a cabo en otros departamentos, lo que ocasiona dificultades considerables ya que no se dispone de transporte para trasladar a los pacientes. Lo anterior ha hecho que algunos reclusos hayan estado esperando más de un año para recibir una cita médica o exámenes clínicos.

Asimismo, la entrega de medicamentos y el suministro de alimentos también presentan serias deficiencias, ya que la entrega de medicamentos puede demorar hasta dos semanas y, en ocasiones, no llegan. Además, las comidas carecen de proteína y, según los propios reclusos, a veces llegan en estado deplorable.