De refugio de narcos a hospedaje de estudiantes: propiedades de los hermanos Rodríguez Orejuela alojarán a cien jóvenes para que puedan ir a la universidad

La historia de Colombia se ha visto afectada por la incursión de distintas estructuras criminales. Una de las más sonadas fue el cartel de Cali, una peligrosa banda terrorista dedicada al narcotráfico, pero gracias al agente de la DEA Edward Kacerosky se puso fin al cartel criminal liderado por los hermanos Rodríguez Orejuela en los 90.

Ahora, casi 30 años después, la Sociedad de Activos Especiales (SAE) le dio un giro total a una de las propiedades más importantes del cartel, el miércoles 15 de noviembre la entidad entregó en Cali -la misma ciudad tan azotada por la cuadrilla- predios y becas a estudiantes que han sido vulnerados de Colombia.

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La entrega estuvo a cargo de Daniel Rojas Medellín, que dirige la SAE, durante el evento el funcionario destacó como el antiguo hotel del cartel que perteneció a los hermanos Rodríguez Orejuela y que fue adquirido con dineros del narcotráfico, ahora será sede de una residencia universitaria que beneficiará a un gran número de jóvenes que estén interesados en formarse.

“Se trata de un Hotel de 1.650 mts², 6 pisos y 49 habitaciones, avaluado en $2.000 millones, que se entrega a la Fundación Negro Soy Feliz, el cual beneficiará a al menos 100 jóvenes que llegan a Cali a adelantar sus estudios universitarios”, mencionó el director.

Según la Sociedad de Activos Especiales, estos jóvenes van a mantener las instalaciones del hotel a través de la productividad de los locales comerciales que hacen parte del edificio que administrarán las madres de quienes se verán beneficiados, poniendo en funcionamiento una tienda de artesanías y un restaurante donde los jóvenes asegurarán su alimentación.

En total, la Fundación Centro Colombiano de Estudios Profesionales (Cecep), entregará 100 becas a jóvenes para acceder a programas de formación académica como: archivística, recursos humanos, gestión documental, contable y financiera, sistemas informáticos, y otros más.

También se entregaron unas canchas sintéticas de 1.670 mts², avaluadas en $473 millones, y unos espacios comerciales que aportarán al sostenimiento de un proyecto productivo. Todo ello con el objetivo de transformar la vida de estos jóvenes y a su vez cambiar la historia que rodea a los lugares que antes fueron producto de la ilegalidad. }

‘’Sigue la revolución del cambio en Cali: Entregamos un hotel de 1.650 mts², 6 pisos y 49 habitaciones para que 100 jóvenes del pacifico puedan ir a la universidad. Y una oficina para la sede de la Fundación al Rescate Pacífico que vela por los derechos de las poblaciones Afro. Cuando hablamos del cambio, hablamos de asociarnos con los campesinos, los jóvenes y las mujeres’', dice en un mensaje de la SAE en su cuenta oficial X.

Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela, fueron arrestados en los años 90 y pagaron prisión en los Estados Unidos luego de declararse culpables en 2006 en Miami por cargos de narcotráfico. Estos lideraron por una larga temporada el cartel de Cali.

Entre los años 80 y 90 hubo una lucha de poder entre esta estructura y el Cartel de Medellín, pero luego del deceso de Pablo Escobar, el cartel de Cali se convirtió en el líder de la cocaína.

En junio de 1995 Gilberto Rodríguez Orejuela fue capturado por un grupo de la Policía Nacional y un mes más tarde -agosto- fue capturado su hermano Miguel Rodríguez Orejuela. Durante su detención en Colombia, los hermanos Orejuela continuaron dirigiendo las operaciones de la organización de la mano del hijo de Miguel, William Rodríguez-Abadía, y otros que supervisaban varios aspectos del cartel usando nuevas rutas.

Gilberto fue extraditado a EE. UU., en 2004 y su hermano Miguel en 2005. En el 2006, en Miami, los hermanos se declararon culpables por cargos de narcotráfico y fueron sentenciados a 30 años de prisión. Además, Rodríguez-Abadía se declaró culpable de conspiración de narcotráfico.

El Departamento del Tesoro anunció en 2014 que se consideraba desaparecido el cartel de Cali. Para la fecha eliminó a 308 personas y entidades de su lista de sanciones financieras. Esta medida impactó a 78 personas, 230 empresas, propiedades inmobiliarias y otras entidades que, según el gobierno de los Estados Unidos, se usaron para lavar dinero durante el auge del cartel.

En 2020, Gilberto Rodríguez Orejuela solicitó su liberación anticipada de una cárcel en Estados Unidos por su estado de salud y en junio de 2022, este falleció en un centro médico de Carolina del Norte. Rodríguez Orejuela padecía de varias enfermedades como cáncer de colon y próstata.