Daniel Sancho niega cargo por homicidio premeditado del médico colombiano en Tailandia ¿Qué le espera?

El español de 29 años no acepto el homicidio premeditado del médico colombiano Edwin Arrieta en la isla de Tailandia el 3 de agosto del presente año

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El español aseguró que la muerte de Arrieta fue accidental y no premeditada como argumenta el tribunal  - créditos Somkeat Ruksaman/EFE
El español aseguró que la muerte de Arrieta fue accidental y no premeditada como argumenta el tribunal - créditos Somkeat Ruksaman/EFE

Daniel Sancho testificó el 13 de noviembre en el tribunal de la isla de Samui, Tailandia, por el homicidio y desmembramiento del médico colombiano, Edwin Arrieta. El español de 29 años, hijo del reconocido actor Rodolfo Sancho, sorprendió al declararse culpable de solamente uno de los tres cargos que le están acusando en el país del Sudeste Asiático.

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El presunto responsable del homicidio y desmembramiento del cirujano originario de Córdoba el 3 de agosto de este año en la isla de Phangan, se encuentra actualmente detenido en la prisión Koh Samui en Tailandia. Allí aguarda la determinación de su destino legal, que podría ser la pena de muerte o la cadena perpetua. No obstante, las sanciones máximas solo serían impuestas en caso de que el acusado sea hallado culpable del delito de homicidio premeditado, una acusación que Sancho negó ante el tribunal, insistiendo en su inocencia.

Pantallazos de fotografías de Daniel Sancho y Edwin Arrieta- créditos Instagram y Facebook.
Pantallazos de fotografías de Daniel Sancho y Edwin Arrieta- créditos Instagram y Facebook.

El español asegura ser una víctima

Conforme a la versión de Sancho, Edwin Arrieta falleció de manera accidental mientras supuestamente intentaba agredirlo sexualmente. Según su testimonio, el médico colombiano se habría golpeado en la cabeza con un mueble del baño, lo que resultó en su muerte. Sancho admitió únicamente la responsabilidad de ocultar el cuerpo de Arrieta en bolsas plásticas, mientras que rechazó las acusaciones de homicidio premeditado y de haber ocultado el pasaporte del cordobés.

Sancho previamente había comunicado los supuestos intentos de agresión sexual de los cuales afirmaba ser víctima. Incluso, algunos días antes, mencionó que Arrieta había intentado violarlo, lo que, según su versión, desencadenó la situación que resultó en el golpe en la cabeza y, eventualmente, en la muerte del cirujano.

En una de sus primeras declaraciones Sancho aceptó el desmembramiento de Arrieta pero afirmó que el cordobés lo había sometido a maltratos:

“Soy culpable, pero yo era el rehén de Edwin. Me tenía como rehén. Era una jaula de cristal, pero era una jaula. Me hizo destruir la relación con mi novia, me ha obligado a hacer cosas que nunca hubiera hecho”.
Así está el confeso asesino después de 66 días en prisión - crédito Telecinco
Así está el confeso asesino después de 66 días en prisión - crédito Telecinco

Qué sigue en el caso, cuándo se imputará una condena

La diligencia judicial que tuvo lugar el lunes 13 de noviembre estaba inicialmente programada para el 26 de octubre, pero fue pospuesta cuando el español de 29 años solicitó, durante la audiencia, la presencia de un intérprete para traducir todo a su idioma natal. De igual forma solicitó ya no tener los servicios del abogado de oficio Krit Sudthanom, quien le había sido asignado luego de que los familiares de Sancho prescindieran de Anan Chuayprabat por la manera en la que estaba asumiendo la defensa.

Con un nuevo abogado, Sancho presentará las pruebas de su inocencia por el cargo de homicidio premeditado el 27 de noviembre. Se estima que la justicia tomará una decisión sobre la culpabilidad del español hacia mediados de 2024.

Entre la pena de muerte y la cadena perpetua

El destino del hijo de Rodolfo Sancho está pendiente de las próximas diligencias judiciales. En caso de ser hallado culpable del cargo de homicidio premeditado, enfrentaría la posibilidad de recibir la pena de muerte o, en un escenario más indulgente, la cadena perpetua.

Este caso podría arrojar luz sobre el destino del cocinero de 29 años. Un incidente relacionado es el de su compatriota español, Artur Segarra, quien enfrentaba acusaciones de asesinato y desmembramiento del empresario David Bernat. A pesar de las súplicas de clemencia por parte de la defensa dirigidas al rey Maha Vajiralongkorn, Segarra fue inicialmente condenado a muerte, pero su sentencia fue finalmente conmutada por cadena perpetua.

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