Desconsolado: Luis Manuel Díaz, papá de Luis Díaz, lloró tras reencontrarse con su familia en Barrancas

La zozobra, que durante doce días se apoderó de la familia del futbolista Luis Díaz, por el secuestro de su padre, Luis Manuel Díaz, el popular Mane, terminó el jueves 9 de noviembre, luego de que el hombre de 56 años fuera entregado a una delegación de las Naciones Unidas y la Iglesia católica.

Díaz, que llegó a Valledupar (Cesar) en helicóptero, luego de que el Ejército de Liberación Nacional (ELN) lo dejara en libertad en la Serranía del Perijá, y posteriormente fue trasladado vía terrestre a Barrancas (La Guajira), protagonizó un emotivo momento al llegar a su casa, en donde era esperado por sus familiares y amigos.

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El primer entrenador del hoy atacante de la Tricolor no aguantó su emoción al ver a su esposa, Cilenis Marulanda, y sus hijos, al igual que demás seres queridos, y se quebró en el momento en el que descendió del automotor de la misión humanitaria, en una operación que contó con fuerte custodia militar.

Desde tempranas horas, la ilusión de ver pronto al entrenador, que fue secuestrado el 28 de octubre cuando se movilizaba en una camioneta junto con su pareja sentimental, camino a una estación de gasolina, era grande.

El helicóptero se desplazó desde la vereda El Salado, zona rural de Barrancas, hasta el aeropuerto Alfonso López Pumarejo de Valledupar, a donde aterrizó pasadas las 11:00 a. m. Las primeras imágenes de la liberación de Mane fueron publicadas por la cuenta en X (antes Twitter) de la Conferencia Episcopal de Colombia.

Francisco Ceballos, obispo de Riohacha, y monseñor Héctor Henao, delegado para las relaciones Iglesia-Estado, fueron los representantes del clero en esta liberación y los encargados de llevar al hombre de nuevo a su casa, luego de días de angustia por parte de todo el país, que se mostró consternado por el secuestro del padre del deportista guajiro.

A su arribo a su hogar, Díaz tomó respiro y, posteriormente, tomó el megáfono y quiso dedicarle unas sentidas palabras a sus familiares y a la comunidad que se congregó a las afueras de su residencia. En sus primeras declaraciones, el progenitor de uno de los deportistas más destacados de Colombia en el mundo expresó todo su agradecimiento.

En los videos registrados desde Barrancas también se pudo apreciar la herida que tiene en su pierna derecha, que le impidió caminar con facilidad, por lo que tuvo que ser alzado por sus familiares. Además, en su rostro se veía un notable agotamiento, producto de las jornadas en las que tuvo que moverse por la espesa vegetación de la Serranía.

A su vez, la mesa de diálogos de paz con el ELN se manifestó sobre el secuestro y el regreso a la libertad de este ciudadano. Con un comunicado que fue difundido en redes sociales, los miembros de la delegación del Ejecutivo expresaron su “alegría” por la liberación y señalaron que su retención significa un hecho “que nunca debió ocurrir”.

En su retorno a la libertad, se supo que por temas de seguridad, el reencuentro entre Luis Manuel Díaz y su hijo, el delantero Luis Díaz, se daría en Inglaterra, gracias a un avión que sería dispuesto por parte del Liverpool F.C. para la familia, en un desplazamiento que emprendería su círculo más cercano; incluido su hermano Jesús, que también es futbolista.