La falta de oportunidades laborales y la inestabilidad económica en el país han llevado a que algunos colombianos consideren emigrar a Estados Unidos, uno de los países que más migrantes recibe, con la perspectiva de lograr el “sueño americano”.
De acuerdo con las más recientes estadísticas publicadas por las autoridades en Estados Unidos, en este país viven más de 800.000 colombianos, cifra que podría ser superior debido al margen de personas que se encuentra en la nación norteamericana de manera ilegal.
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Aunque son más las historias de colombianos que se radican en Estados Unidos, también existen casos contrarios en los que extranjeros llegan a territorio nacional y, por diferentes motivos, deciden radicarse en Colombia. Ese es el caso de Julie Balzano, estadounidense que vive en Medellín porque es más económico que residir en Nueva York.
En diálogo con CNN, la mujer de 60 años reveló que en 2021 tomó la decisión de vender su casa en Long Island para reducir gastos, pero al no encontrar un apartamento o vivienda que se ajustara a su presupuesto, optó por alquilar un lugar diferente esperando a que con el paso del tiempo los precios pudieran disminuir en Nueva York.
Pero luego de un nuevo aumento en los precios de las propiedades en esta ciudad, Balzano pensó en cambiar de residencia. Debido a que visitaba recurrentemente Colombia y una amiga se había mudado al país sudamericano, aceptó vivir por unos meses en Medellín mientras que se recuperaba económicamente.
Julie Balzano es divorciada y tiene dos hijos adultos, por lo que no tenía nada que la atara a Miami. Su hija vive en Florida, a varias horas en auto de Long Island, mientras que en Medellín está a tres horas de diferencia en avión.
“Es interesante, porque me grabé en el aeropuerto. Y había vivido en el extranjero cuando era más joven, así que el traslado a otro país no era algo que me resultara completamente desconocido. Pero como una mujer que estuvo casada y tuvo un hogar, que crio a sus hijos y ha estado al lado de sus padres al final de su vida, encontrarme en esta etapa de mi vida completamente libre de cualquier otra responsabilidad que no sea la mía es una experiencia surrealista, liberadora y aterradora al mismo tiempo”.
Desde su llegada a Medellín en agosto de 2022, Balzano logró obtener una visa de nómada, inició un emprendimiento y creó un grupo en Facebook para encontrar a más extranjeros radicados en la capital antioqueña.
Con la compra de un apartamento en Laureles, barrio que encabezó la lista de global Time Out de los lugares más cool del mundo, se encuentra gestionando una visa de inversión que le permitirá permanecer en Colombia de manera frecuente sin tener que tramitar nuevos permisos.
Balzano afirmó que, además del clima de la ciudad, lo que más le gusta de vivir en Medellín es no tener que preocuparse por lo económico, ya que sus gastos en la capital antioqueña son mínimos en comparación con lo que debía pagar de manera mensual en Estados Unidos.
“El clima es increíble. Es realmente la ‘Ciudad de la eterna primavera. Estoy viviendo en el ‘barrio más cool. Y cuesta aproximadamente un tercio de lo que cuesta vivir en Miami”.
Como aprendió español cuando era voluntaria de los Cuerpos de Paz, no tiene problemas para comunicarse en el país. Afirma que lo más difícil ha sido no tener auto, pero que por el momento prefiere usar taxi. Además, aunque sabe que no está en una ciudad más segura que la gran mayoría de sitios en Europa, afirma que las creencias que hay sobre Medellín son lejanas a la realidad.
“Medellín es hoy una ciudad diferente”, dice. “Eso no significa que sea perfecta. Pero no es la Medellín de la década de 1980 y 1990, y mucha gente todavía cree que lo es”.