Ecopetrol informó que al cierre de septiembre de 2023 la cuenta por cobrar al Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles (Fepc) asciende a $25,7 billones, con una disminución de $5,2 billones frente al segundo trimestre del 2023.
La estatal explicó que esto se debió, principalmente, por la compensación sin giro de recursos de los dividendos a favor de la nación que cayó $8,0 billones; y el giro recibido a favor de la Refinería de Cartagena que tuvo una caída de $1,9 billones.
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“Lo anterior se compensa con la causación del trimestre que asciende a $4.7 billones”, precisó Ecopetrol al mostrar los resultados del tercer trimestre del año.
Es de anotar que a causa de este déficit es que el Gobierno de Gustavo Petro viene con las constantes alzas mes a mes en el precio del galón de gasolina corriente y por eso planea aumentos en el precio del galón de ACPM (diésel) a partir de febrero del 2024.
Por ejemplo, para noviembre del 2023 este tuvo un aumento de $600 a nivel nacional. Así las cosas, la ciudad en la que es más costoso el combustible es Villavicencio ($15.073).
De acuerdo con la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg), estas medidas pretenden disminuir el impacto fiscal en el Gobierno nacional por la dinámica de los precios internacionales de los refinados que, frente a los precios locales, en promedio, presentan aún una brecha significativa.
Vienen más alzas en el precio de la gasolina
Al respecto, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, afirmó a finales de octubre que “lo cierto es que todavía nos faltan tres alzas en gasolina y empezará después de la discusión del ACPM (diésel), que tiene hoy una brecha de $8.000″.
Esto, tras precisar que la principal conclusión que hay sobre la discusión de la inflación es el peso de los combustibles. Seguido, dijo que Colombia es uno de los tres países de América Latina, junto a Ecuador y Bolivia, que congeló combustibles.
“Cuando el Banco de la República, en general, hace una referencia con la tasa de inflación de otros países y dice que allá han bajado rápidamente, esos países nunca congelaron combustibles. Entonces, la inflación, efectivamente, ha bajado rápidamente en Perú, Chile y en otras partes y ese no puede ser nuestro punto de referencia”, aclaró.
Señaló que el punto de referencia de Colombia es que aquí está bajando la inflación de otros elementos, pero la de combustibles sigue subiendo y es una discusión que hay con los gremios para hacer concertación sobre la manera como estos precios se van a ajustar.
De igual forma, el ministro anotó que con estas alzas el déficit del Fepc terminaría de cerrarse en 2025, dependiendo de cómo se hagan los ajustes del diésel. De igual forma, dejó entrever que cerrarlo no quiere decir que simplemente se lleve tanto la gasolina corriente como el diésel a los precios internacionales y ahí en adelante ya los ajustes sean puntuales, sino que se debe ir ajustando a los cambios que se den, pero ya no serían del nivel de lo hecho hasta ahora.
Indicó que “el déficit en el 2021 fue $17 billones. En el 2022 fue de $37 billones. Estamos pagando todavía. Nos falta pagar $8 billones del 2022. Este año va a terminar en $20 billones. Habíamos previsto inicialmente que podría terminar en $17 billones, pero con los cambios que se han presentado en el precio del petróleo va a llegar dentro de esos $20 billones, de los cuales $17 billones son de diésel y $3 billones de gasolina corriente, pues de este último ya lo venimos cerrando”.
Amenaza a los transportadores de carga
el presidente de la Federación de Transportadores de Carga (Fedetranscarga), Henry Cárdenas, acudió el 9 de octubre a la sesión plenaria del Senado de la República donde transmitió la preocupación de los transportadores.
En su intervención advirtió que si el precio del combustible sube, el negocio se vuelve inviable y, por ende, les tocará parar los camiones en Colombia, lo que es una gran preocupación porque se incrementarán las tarifas, los costos del transporte y hará que los colombianos paguen mucho más por los alimentos que se consumen.
De igual forma, Cárdenas aseguró que los camioneros están dispuestos a cesar de actividades.
“Necesitamos que el Senado hable con el Gobierno. Si sube $8.000 el ACPM en Colombia, nosotros los transportadores entraríamos en una quiebra inminente y de inmediato, porque tendríamos que empezar a pelear con el generador de carga para poder subir un 30% las tarifas que usamos en todo el territorio nacional. Eso significa que para todos nos subiría el Índice de Precios al Consumidor (IPC), cosa grave que no necesitamos”, indicó el líder gremial.
Anotó que es importante para Colombia que el ACPM no suba, ya que se pasa por unos momentos difíciles, y a hoy van 16 conductores muertos en el 2023, lo que quiere decir que la inseguridad en las carreteras está bastante desbordada.
Adicionalmente, precisó que las importaciones bajaron 16% en Colombia y las exportaciones ya van en 5% o 6%, lo que también es un golpe a la actividad.