En medio de la polémica desatada por la solicitud de la periodista María Jimena Duzán para que el presidente Gustavo Petro acepte que tiene “problemas de adicciones” y la contundente respuesta del mandatario, un fragmento del libro Una vida, muchas vidas, la biografía del jefe de Estado, ha sobresalido, ya que describe el consumo de algunas drogas durante su época como diplomático en Bélgica.
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De acuerdo con lo escrito por el mandatario colombiano, el consumo de drogas llegó a raíz de una soledad que lo condujo a una exploración profunda e intelectual:
“Con una amiga colombiana exploré incluso el consumo de algunas drogas, la experimentación de las sensaciones, el viaje hacia el interior, hacia lo profundo, desligado de los nexos de la sociedad, de mi propia lucha y vocación; trataba de explorar los rincones de una geografía interna... La soledad me llevó a una exploración profunda, que se volvió además intelectual”.
Una coincidencia con esta referencia y con la polémica desatada alrededor del mandatario fueron las palabras de Ingrid Betancourt hace algunos meses, en las que recordó un episodio en el que vio a Gustavo Petro en un mal estado. Ese recuerdo lo trajo a colación en medio de un debate presidencial y luego en otros espacios de entrevistas, señalando que los retrasos e incumplimientos de Petro eran a raíz de problemas mentales o adicciones:
“Vi a sus niños pequeños, eran muy chiquititos, debían tener tres añitos, ellos corrían por toda la casa porque era una visita privada. Me imagino que para los pequeños era normal, porque saltaban encima del hoy presidente, daban vueltas. La esposa, apenada, diciendo: ‘Bueno, qué pena con ustedes, los estábamos esperando, pero no ha reaccionado. Vuelvan más tarde’”.
En esa ocasión, el presidente respondió a Betancourt que lo que presentó fue un episodio emocional, pero solamente eso, y le recordó una situación que habría tenido la candidata presidencial con su entonces pareja Carlos Alonso Lucio, con quien le “rompieron una cama” a Petro.
“El chisme de Ingrid además no lo entiendo porque trato de recordar ese momento. Yo estaba en Europa, evidentemente en un momento que para mí no era placentero, porque yo me había ido amenazado de muerte. Entonces, eso que cuenta Ingrid son mentiras. Incluso a mí no me gustó porque llegaba con Lucio, eran novios en ese momento, me rompieron una cama”.
De igual forma, en esa ocasión respondió a la exesposa de Petro, Mary Luz Herrán, con quien el jefe de Estado convivió durante esos años en Bruselas. Herrán defendió a Gustavo Petro:
“Hoy más que nunca, el país requiere la verdad. En Bruselas y más allá, el padre de mis hijos nunca ha sido un mal referente ni ha estado enfermo. Nuestro hogar no conoció lujos. Les presento estas fotos de nuestra vida en Bruselas. Los invito a juzgar por sí mismos”.
Señalamientos al presidente Petro por presuntas adicciones
El escándalo alrededor de Gustavo Petro se encendió con la carta abierta de María Jimena Duzán que se publicó a través de Cambio, en el que la periodista afirmaba que había sido una de las votantes que eligió a Py que respaldó su idea de Gobierno con el Pacto Histórico, pero tras un año de mandato ha evidenciado serios problemas.
“Buscando explicaciones sobre por qué usted anda tan atrincherado, me encontré con una posible causa: hay fuentes que me aseguran que las razones de sus desapariciones, las cuales se han vuelto cada vez más frecuentes y prolongadas, tendrían que ver con que usted ha querido mantener oculto un problema de adicción”.
Al respecto el jefe de Estado respondió sin mencionar a Duzán afirmando que a lo único que era adicto era al café en las mañanas.