Las fuertes lluvias del fin de semana causaron que los ríos que recorren el departamento de Santander aumentaran su caudal y que en las vías se presentaran derrumbes de tierra, lo que provocó que una camioneta y una volqueta cayeran a los cuerpos de agua y fueran arrastrados por las fuertes corrientes.
El primer caso se registró en la madrugada del 31 de octubre, cuando un grupo de viajeros se movilizaba en la vía que de San Gil conduce hacia Bucaramanga y fueron sorprendidos por las fuertes lluvias y una avalancha de tierra sobre la vía, lo que hizo que la camioneta se saliera de la vía, cayera al vacío y terminara en aguas del río Manco.
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Los ocupantes de la camioneta sufrieron politraumatismos y fueron trasladados hasta un centro asistencial de Piedecuesta. “Desconocemos el estado de salud de los ocupantes, estamos esperando que el Centro Regulador de Urgencias y Emergencias (Crue) nos entregue un informe detallado, no sabemos las causas del accidente”, le dijo a El Tiempo Fabián Vargas, director de Gestión de Riesgo de Santander.
El funcionario de la UNGRD indicó que también se presentaron crecientes súbitas en los ríos Carare y Fonse, los cuales permanecen en alerta roja debido a la ola invernal. Vargas agregó que se presentaron inundaciones en inmediaciones de la quebrada la Ruitoca, entre la vía Acapulco - Floridablanca, y hay afectaciones por las fuertes lluvia en las poblaciones de la Españolita, en Piedecuesta, y Chimitá, en la vía Palenque.
Se salvó de milagro
Un hecho similar se presentó en el barrio Convivir de Girón, que está ubicado a orillas del río Oro donde muchas familias se dedican a la extracción de arena y piedras para la construcción.
En la mañana del martes 31 de octubre un conductor se salvó de milagro de ser arrastrado por la corriente del río junto con su volqueta. De acuerdo con los testigos, el vehículo estaba cargando arena a orillas del río y de un momento a otro el terreno empezó a ceder y poco a poco se fue desprendiendo hasta que el río se ‘tragó' por completo la volqueta.
En medio de los gritos afanados de los areneros de Girón y curiosos el conductor de la volqueta alcanzó a saltar antes de ser arrastrado por la fuerte corriente.
“La volqueta estaba cargando e iba creciendo el río, el muchacho se llenó de desesperación, no sabía que hacer, subió un poco la volqueta y quedó en un hueco, y luego comenzó a resbalarse el barranco y el muchacho alcanzó a salvarse y salir”, dijo un testigo del hecho.
Algunos lugareños también indicaron que el vehículo fue arrastrado por la corriente por imprudencia del conductor que, de manera imprudente, metió la volqueta en una zona debilitada por el agua. Metros más arriba la volqueta encalló en el río y los lugareños pudieron atarla para sacarla del caudal con la ayuda de una grúa.
Otro carro se fue a un abismo en Santander
En una vía rural del municipio de Capitá (Santander) otro hombre se salvó de milagro de caer con su vehículo en el cañón del Chicamocha.
El dueño del vehículo iba a ingresar a la cabecera municipal e intentó dar la vuelta en la vía, que estaba en pésimas condiciones. Afortunadamente se percató de que el terreno estaba cediendo, se quitó el cinturón de seguridad y saltó del carro antes de que rodara cuesta abajo por la ladera del cañón.
“Esa carretera es de un peligro del 80%, por eso el carro debe estar muy bien de frenos, dirección etc. Bajar despacio y con mucha precaución, sin licor y sin problemas personales, si se distrae pierde”, dijo un usuario de redes sociales al ver el video del accidente.