Colombia decidió y, con más del 90% de los votos escrutados, los nacionales ya conoces a sus próximos alcaldes, gobernadores, concejales, miembros de Asambleas Departamentales y Juntas Administradoras Locales (JAL).
Sus victorias son el resultado de programas y propuestas que apelan a las necesidades de los votantes, declaraciones contundentes y estrategias de prensa que hicieron de la suya una campaña que llegó a puerto.
Entre los ganadores, sin embargo, también resaltan personalidades que, aunque poco convencionales en la política colombiana, lograron hacerse a un espacio para dar rumbo a las regiones, durante el periodo 2024-2027.
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Entre victorias anunciadas, como la de Carlos Fernando Galán en Bogotá o Federico ‘Fico’ Gutiérrez en Medellín, hay sorpresas, como la del alcalde electo de Tunja, Mikhail Krasnov, mejor conocido como “el ruso”.
Nació en la extinta Unión Soviética y llegó de intercambio, desde Alemania, para adelantar sus estudios, que no son pocos, pues cuenta con maestrías en Relaciones internacionales, sociología, economía e idiomas.
Como muchos otros extranjeros que llegan a Colombia, terminó enamorándose de esta tierra y decidió quedarse para ser profesor en la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, pero, la manera en la que los alcaldes anteriores dieron manejo a la ciudad, lo llevó a pensar en incursionar en política; una decisión que encontraría su mayor respaldo en la población joven que, hoy, lo llevó a alcanzar la Alcaldía.
Su postura de mano dura contra los ladrones es compartida por Jaime Andrés Beltrán, quien logró superar en las urnas a Carlos Felipe Parra y Consuelo Ordoñez, convirtiéndose en el próximo alcalde de Bucaramanga, a pesar de cargar con el mote del “Bukele colombiano”.
Lejos de perjudicar su imagen, terminó siendo un punto a favor frente a los votantes, que, al parecer, respondieron de la mejor manera a propuestas polémicas cómo la de validar la “paloterapia” contra los ladrones y establecer un plan candado permanente para evitar la entrada de migrantes a la ciudad, pues, según él, son los únicos responsables por el aumento en los índices de inseguridad en la capital de Santander.
Al igual que él, Juvenal Diaz Mateus enfocó su campaña a la Gobernación del departamento en cómo reforzar la seguridad, utilizando como garantía sus 35 años de experiencia en las fuerzas militares, que lo llevaron a destacar como el general gobernador.
En su recorrido por los 87 municipios de Santander recogió más de 60.000 firmas y coaval de siete partidos, aunque se mostró distante del clan Aguilar, que habría apoyado a sus hermanos Luis Eduardo Díaz Mateus e Iván Díaz Mateus, en campaña, a la Cámara y el Senado, respectivamente.
Del otro extremo, no solo del territorio, sino también del espectro político, Luis Alfonso Escobar –por el Pacto Histórico– se convirtió en el primer gobernador afro del departamento de Nariño, superando, por más del 20% de la votación a Berner León Zambrano Eraso.
Escobar estudió economía, se especializó en Gestión Ambiental y obtuvo un doctorado en en Cambio Global y Desarrollo Sostenible. Mientras, su tocayo, y ahora concejal de Cali, Andrés Escobar, enfocó sus estudios en Mercadotecnia.
Él, probablemente, sea el ganador que mayor controversia genera, pues, durante el estallido social del 2021 fue grabado, disparando contra un grupo de manifestantes. Sin embargo, parece haberse redimido, o al menos eso piensan los más de 130 pastores de iglesias cristianas que apoyaron su candidatura al concejo, sustentada en los calores religiosos y patrios.
Durante elecciones, a través de un video publicado en sus redes sociales, invitó a los caleños a votar por el alcalde electo Alejandro Eder, pero, recibió una respuesta tajante, pues negó que entre ambos existiera o fuera a forjarse alguna alianza.