Esto fue lo que se ahorró el país tras la victoria de Carlos Fernando Galán, que no necesitó segunda vuelta en Bogotá

Es un hecho: Bogotá no tendrá segunda vuelta para escoger su nuevo alcalde, que sucederá en el cargo a Claudia López y cumplirá el periodo 2024-2027. Carlos Fernando Galán, que según las encuestas partía como gran favorito para ganar el 29 de octubre, revalidó las expectativas y evitó que la escogencia del nuevo mandatario distrital se fuera al balotaje.

De acuerdo con los resultados emitidos por la Registraduría Nacional del Estado Civil, escrutado el 100% de los votos, el aspirante del Nuevo Liberalismo alcanzó el 49,02% por ciento de los votos, con 1.497.596 sufragios, más que suficientes para llevarse el triunfo en primera vuelta. Su inmediato contendor, Juan Daniel Oviedo, sacó 614.233 apoyos en las urnas, que representan el 20,10%.

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Galán, que aspiró por tercera vez llegar al Palacio Liévano, ya no necesitará ir a una nueva cita, que se había definido el 19 de noviembre, pues Oviedo ubicó a más de 28 puntos porcentuales, y no logró el derecho de ir a una nueva elección, que debía hacerse 21 días después de que los capitalinos acudieran a los puestos de votación para una contienda altamente polarizada.

En el camino para escoger nuevo burgomaestre se quedaron Gustavo Bolívar, que tuvo la tercera votación de la contienda; y los exsenadores Rodrigo Lara Restrepo y Jorge Enrique Robledo, el exministro de Defensa Diego Molano, el exdirector de la Policía Nacional, Jorge Luis Vargas; y, también, los poco conocidos Rafael Quintero y Nicolás Ramos.

Al final, el “voto útil” y la conveniencia de que Galán obtuviera la victoria en primera, con el fin —entre otras— de ahorrarle un nuevo gasto a las autoridades electorales del país, le valieron el éxito al candidato presidencial Luis Carlos Galán, exsenador de la República y exconcejal de Bogotá, para sentenciar la contienda.

Cabe destacar que mediante el Acto Legislativo 03 de 2019, el cual modificó el artículo 323 de la Constitución Política de Colombia, estableció que para la elección del alcalde de Bogotá debía efectuarse una segunda vuelta, en caso de que ninguno de los candidatos obtuviera el 40%. A diferencia de otras grandes ciudades del país, como Medellín, Cali y Barranquilla.

Como el primero de los dos requisitos se cumplió por parte de Carlos Fernando Galán, ya no será necesario convocar de nuevo a los bogotanos a las urnas. El aspirante del Nuevo Liberalismo por fin la Alcaldía, luego de los fracasos de 2011, cuando terminó cuarto en la intención de voto, y 2019, en el que fue superado por López.

Esto le representó al país ahorrarse, según datos de la Registraduría Nacional del Estado Civil, cerca de 40.000 millones de pesos, que hubiera representado un nuevo llamado a las mesas de votación de los capitalinos. Un aspecto que valoraron en redes sociales, pues varios de los internautas mencionaron que entró con el “cinturón” de la austeridad.

Y es que justamente en la más reciente elección (2019), la diferencia entre Galán y la actual alcaldesa fue de 86.179 votos; uno de los motivos que justificó el cambio planteado en el Legislativo, que no fue implementado desde entonces para “no contaminar” el proceso electoral en curso. Pero, además, que los gobernantes no superaran el 35% de los votos obtenidos.

En 2011, cuando resultó elegido el hoy presidente de la República, Gustavo Petro, obtuvo el 33,36% de los sufragios (723.157); mientras que en 2015, Enrique Peñalosa sacó el 33,18% (906.058 votos). El índice más alto fue el de Claudia López, que para 2019 consiguió el 35,21% del respaldo en la contienda (1.108.541).

Solo el fallecido Samuel Moreno, en 2008 y antes de protagonizar uno de los escándalos de corrupción más grandes en Bogotá, logró superar el umbral del 40%, pues cuando resultó elegido como mandatario distrital obtuvo el 43,94% (920.013 votos).

Es válido recordar que el perdedor de esta definición, Oviedo, tendrá el derecho de convertirse en concejal del distrito gracias al Estatuto de la Oposición, que entró en vigencia desde 2018. De hecho, tras caer en la jornada del 27 de octubre de 2019, Galán aceptó la dignidad de ocupar una curul en el cabildo, que tuvo entre el 1 de enero de 2020 y el 10 de diciembre de 2021.