Hasta Nariño (Antioquia) llegó un comando especial integrado por la Policía de Colombia, el Centro de Cooperación Policial Internacional de Río de Janeiro (Brasil) y las Fuerzas Especiales de Reino Unido con un solo objetivo: capturar a Oliverio Cárdenas Duque, alias Oliver, un peligroso narcotraficante de 61 años que se hacía pasar por un ciudadano común y corriente mientras era buscado por las autoridades de 191 países.
El narco de origen brasileño, capturado en lo que se denominó operación Neptuno, es acusado de conseguir las sustancias estupefacientes en Colombia y hacerles controles de calidad para asegurarse de su pureza y posteriormente concretar el envío de la droga a Europa desde las ciudades de Salvador Bahía y Sao Pablo en Brasil.
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Según pudo conocer la revista Semana, la operación para capturar al narco brasileño necesitó de un minucioso seguimiento de dos meses del hombre de 61 años que tenía como fachada la administración de un pequeño hostal en Nariño y pasaba desapercibido entre los habitantes de la población antioqueña; sin embargo, clandestinamente se encargaba de catar la droga que después enviaba a sus socios en Brasil.
De acuerdo con las autoridades, alias Oliver se enfocaba en distribuir la droga en los sitios turísticos brasileños que le generaban mayores ganancias:
“Habría diseñado una estrategia desde Colombia, encargándose del tráfico y verificación de la pureza, marca y procedencia del estupefaciente, en las ciudades de Salvador Bahía y Sao Pablo (Brasil), donde contaba con personas de confianza para la consolidación de envíos de cargamentos de cocaína hacia Europa”, le dijo una fuente judicial a Semana.
El detenido fue solicitado por el Juzgado 17 Judicial Seccional de Bahía (Brasil) y será extraditado para cumplir una condena por narcotráfico.
“Se encuentra inmerso en una investigación judicial adelantada por la Policía Federal de Brasil por los delitos de tráfico de cocaína, utilizando las ciudades de Salvador Bahía y Sao Pablo como sus principales centros de acopio y consolidación de negocios para el envío de cargamentos de cocaína hacia Europa vía marítima”, sostuvo la Policía.
Las autoridades también están detrás de la pista de Brian Adrián Harvey, señalado de ser el socio de alias Oliver y el cerebro de una estrategia de tráfico y comercialización de cocaína y otras sustancias alucinógenas que ofrecían bajo la premisa de alta pureza y calidad colombiana en Brasil y varios países europeos.
No fue el primer narco brasileño capturado en Antioquia
Alias Oliver es el segundo narco de origen brasileño detenido en territorio antioqueño, anteriormente había sido detenido en Medellín Hugo Orlando Sánchez Jiménez, alias Romario.
Los hechos se presentaron en agosto del 2023, cuando unidades de la operación Dirección de Inteligencia de la Policía (Dijín) y autoridades de Brasil desarrollaron una operación en el barrio Laureles de Medellín para atraparlo.
De acuerdo con las autoridades, alias Romario exportaba cocaína desde Colombia, Perú y Brasil a Estados Unidos, Europa y algunos países africanos y su presencia en Medellín correspondía a las intenciones de consolidar una célula del Primer Comando de la Capital, grupo de traficantes que lideraba en Brasil.
Romario también hacía parte de otro grupo de narcotraficantes denominado Narcosul; sin embargo, la atención se centra en el Primer Comando Capital, pues es el grupo de narcos señalado de ordenar el asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, quien fue ultimado a tiros mientas estaba de vacaciones con su esposa en una playa de Colombia.
Curiosamente, alias Romario era buscado por las autoridades de Brasil, pero en 2019 había sido expulsado de ese país por los crímenes de narcotráfico, lavado de activos, entre otros.