Guerra entre ‘Los Pepes’ y ‘Los Costeños’ sería el origen de dos masacres en 72 horas en el Atlántico

La situación de orden público en el departamento del Atlántico tiene en vilo a la población civil por la guerra entre los grupos armados los Costeños y los Pepes, que perpetraron dos masacres en Malambo y Soledad el sábado 21 de octubre y el lunes 23.

En la primera masacre murieron tres personas y otras tres resultaron heridas, mientras que en la segunda hubo la misma cantidad de occisos y lesionados. Ambos ataques armados fueron por el control territorial y el expendio de droga en los municipios del área metropolitana de Barranquilla.

Con las dos masacres se hizo trizas la supuesta paz iniciada por Digno Palomino, alias el Viejo, líder de los Pepes, y Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, líder de los Costeños.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Google News.

Las autoridades intentan esclarecer los hechos sucedidos en el billar Palatino de Soledad, donde hombres armados llegaron sobre las 10:30 p. m. del lunes 23 de octubre, trancaron la entrada del lugar, asesinaron a tres personas y dejaron tres más heridas.

Los occisos fueron identificados como Jean Carlos Betancourt Acosta, de 25 años; Juan José Rodríguez Rivaldo, de 43 años, y Franklin de Jesús Guerrero Vargas, de 33 años.

Entre tanto los heridos fueron Luis Miguel Lobo Pote, de 35 años, Henry de Jesús Donado Balza, de 18 años, y Jeffry de Jesús Ojeda Pacheco, de 22 años, acompañante del objetivo de los sicarios: Jorge Luis Ojeda Jiménez, alias Ricostilla, presunto cabecilla de los Costeños que se encontraba en el billar.

Ojeda Jiménez, de 24 años, sería uno de los comandantes de los Costeños en Soledad, tiene anotaciones judiciales por homicidio agravado y fabricación, tráfico o porte de armas de fuego. Además fue señalado de asesinar a un joven en Soledad en 2021.

En la noche del sábado 21 de octubre un grupo de hombres armados irrumpió en un quinceañero de Malambo, asesinaron a tres personas y dejaron a otras tres heridas.

Las autoridades identificaron a las víctimas mortales como Manuel Antonio Domínguez De Hoyos, un adolescente de 16 años, que se proyectaba como futbolista; Jefferson Jesús Chirino Vera, de 24 años, quien se ganaba la vida como reciclador. De la tercera persona muerta se desconoce la identidad.

Por otra parte, los heridos fueron Juan Camilo Martínez Barreto, de 18 años; William Andrés Carrillo Fontalvo, de 30 años, otro reciclador que al parecer residía en la casa del quinceañero y María Jesús Moreno Sandoval, una mujer de 71 años que se dedicaba a la venta ambulante de dulces.

La casa donde ocurrió la masacre está ubicada en el barrio Los Ciruelos y había sido señalada en varias oportunidades como un punto de venta de droga incluso las autoridades realizaron varios allanamientos en el lugar y encontraron estupefacientes que eran distribuidos por hombres de alias Castor, líder de los Costeños.

En el lugar de los hechos había sido capturado Osnaider José Rosado, alias Tatán, encargado de la comercialización y la venta de droga de los Costeños en ese sector de Malambo.

Las dos masacres del Atlántico fueron perpetradas, presuntamente, por hombres de los Pepes que recibieron órdenes directas de Digno Palomino, alias el Viejo, para acabar con integrantes de los Costeños.

Ante eso las autoridades temen por una escalada de la violencia en el área metropolitana de Barraquilla pues Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, líder de los Costeños no se quedaría de brazos cruzados y podría responder de la misma manera, acabando con la supuesta paz que habían acordado ambos grupos a mediados de agosto de este año para ingresar a la paz total del Gobierno de Gustavo Petro.

Alias el Viejo y alias Castor eran compañeros e incluso compadres, lideraban juntos a los Costeños y se repartían las zonas del Atlántico para cometer crímenes; sin embargo, los criminales pasaron del sacramento bautismal a la enemistad mortal luego de que alias el Viejo decidiera armar su propio grupo criminal en 2022 y empezara a matar a hombres de confianza de Castor.