A medida que pasan los días se siguen conociendo más detalles de la vida llena de lujos y excentricidades que protagonizaron Nicolás Petro Burgos, hijo del presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, y su exesposa, Daysuris Vásquez, en el proceso que se adelanta por lavado de activos y, en el caso del joven político, por enriquecimiento ilícito.
Además de la investigación que adelanta la Fiscalía General de la Nación, que indaga al primogénito del jefe de Estado por los mencionados punibles, también avanza en un proceso contra Petro Burgos en la Procuraduría General de la Nación, para saber si incurrió en faltas disciplinarias como funcionario público, pues fue diputado del Atlántico entre enero 2020 y septiembre de 2023.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Google News.
Es por esto que como parte de las pesquisas, el Ministerio Público citó a declarar a Vásquez para que diera su testimonio en el caso que afronta su expareja sentimental y las revelaciones que hizo la mujer salpican a un empresario del Meta que estaría detrás de lujosos detalles para el joven político, con el que buscaría congraciarse.
¿Qué dijo Daysuris Vásquez?
En el interrogatorio, revelado por Noticias RCN, la joven estudiante de Derecho contó ante la Procuraduría que fue un comerciante del Meta, de nombre Juan Manuel Sarmiento, el que le cedió al exasambleista una camioneta negra Chevrolet Tahoe, que estaría avaluada en $400 millones, para el uso personal de Nicolás Petro.
Pero además, el empresario, del que no se tiene mayor información, le entregó $40 millones de pesos al exdiputado para un viaje romántico con Vásquez a San Andrés. En otras palabras, financió lo que al parecer fue una “segunda luna de miel” de la próspera pareja, aunque no se conoció cuándo se hizo el viaje a la isla.
“Le dijo: ‘toma la camioneta, te la regalo, te la pongo en disposición’. Y ya iban a empezar a hacer el traspaso y va otro día y le entrega la plata: $40 millones para el viaje”, contó Daysuris en su declaración ante el ente disciplinario.
A su vez, en la diligencia, la mujer reafirmó la versión que había entregado desde marzo de 2023 a la revista Semana, acerca de los aportes de Santander Lopesierra, más conocido como el Hombre Marlboro: exnarcotraficante que pagó condena en los Estados Unidos, y que intentó ser alcalde de Maicao en el presente proceso electoral.
“Fueron aproximadamente 600 millones, por partes. Se lo entregaba el señor Máximo Noriega a Nicolás, él lo llevaba a la casa y allá Nicolás lo guardaba”, dijo Vásquez en su relato ante la Procuraduría, en el que contó cómo guardaban la plata en su residencia y el papel que habría jugado Noriega, que buscó sin éxito ser candidato a la Gobernación del Atlántico.
Pero además, la forma en que habrían sido invertidos los recursos obtenidos, presuntamente, para la financiación de la campaña de su padre, el jefe de Estado, pero que terminaron en los bolsillos del joven político, que se acostumbró a toda clase de comodidades.
Compras lujosas con plata de otros
De acuerdo con Vásquez, decidieron comprar una casa en el sector de Villa Campestre, en Barranquilla. Pero era tal el afán de Nicolás, que él dispuso del dinero, según la mujer, sin consultarle. “Él pagó todo, de hecho, sacaron las cosas de la casa, teniendo el contrato todavía firmado hasta junio”, afirmó la exesposa del hijo mayor de Gustavo Petro.
Y, por último, también indicó que Óscar Camacho, empresario de Norte de Santander, se convirtió en otro de los “padrinos” de la que era la feliz pareja, antes de la aparición en la vida de Petro Burgos de Laura Ojeda; que fue amiga de Vásquez, y ahora es la mamá del nieto del presidente, Luka Samuel Petro.
“Estaban unos empresarios de Cúcuta y fue Máximo Noriega el que les recibió el dinero. Como $300 o $400 millones”, dijo Vásquez, que dejó en claro que supuestamente esos recursos eran para la campaña presidencial de Gustavo Petro. “Pues se quedaron en la casa”, agregó la declarante, en medio de risas.
Con lo que reafirmó que la aspiración del hoy presidente no se habría visto manchada con recursos de los cuales no se tuviera soporte contable. Pese a que ambos entes, la Fiscalía y la Procuraduría tienen fuertes sospechas y, en el caso del delegado Mario Burgos compulsó copias a la Comisión de Acusaciones de la Cámara, el Consejo Nacional Electoral y la Corte Suprema para que investigue al presidente.