A medida que se acerca la fecha de las elecciones regionales en Medellín, la polémica en torno a la publicidad política en el espacio público de la ciudad ha alcanzado un punto culminante.
La Personería de Medellín, a través de su Unidad para la Protección al Interés Público (UPIP), ha emitido una alerta sobre la falta de control en la exhibición de propaganda política, destacando la preocupación por la falta de regulación y los mensajes agresivos utilizados en las campañas.
La Personería de Medellín ha expresado su inquietud sobre la falta de regulación en la publicidad política en la ciudad. Según sus declaraciones, se ha recibido un número significativo de quejas de partidos políticos, movimientos y ciudadanos que alegan que gran parte de la publicidad instalada no cuenta con los permisos adecuados de la Subsecretaría de Espacio Público.
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Además, se ha destacado que esta publicidad tiende a usar mensajes agresivos, destinados a atacar a otros candidatos, en lugar de promover de manera constructiva la candidatura de un postulante. Esta situación plantea serias dudas sobre el propósito genuino de la publicidad electoral y su impacto en la ciudadanía.
La administración municipal, bajo el liderazgo del actual alcalde de Medellín, Óscar Hurtado, ha reconocido la dificultad de controlar la proliferación de propaganda electoral que no cumple con los requisitos y permisos necesarios. Las jornadas permanentes para retirar esta publicidad han sido una de las medidas adoptadas por las autoridades para abordar esta problemática.
Según Hurtado, el exceso de propaganda política que se instala sin la debida autorización ha dificultado el seguimiento riguroso de la situación. Como respuesta, se ha instado a los partidos políticos y candidatos a respetar las normas de uso del espacio público y mantener la estética de la ciudad.
La Personería de Medellín ha tomado medidas para abordar la problemática de la publicidad electoral no autorizada. Tras realizar visitas a diferentes áreas de la ciudad, se identificaron vallas y pasacalles que no cumplían con la normativa vigente. Como resultado, se procedió al desmonte de esta publicidad, reforzando la importancia de que toda publicidad cumpla con los permisos correspondientes y contribuya a la mejora de la estética urbana.
Además de la falta de control en la publicidad electoral, la Personería de Medellín ha dirigido su atención a los puestos de votación.
Se han ejecutado visitas a las instituciones educativas que servirán como centros de votación en colaboración con la Registraduría. Durante estas visitas, se han formulado recomendaciones para garantizar condiciones de seguridad y accesibilidad para todos los votantes.
Este factor es de suma importancia, ya que Medellín se prepara para las elecciones regionales del 29 de octubre, con la habilitación de 239 puestos de votación que albergarán 5.300 mesas y contarán con 35.000 jurados. Además, se establecerán 98 comisiones escrutadoras para garantizar la transparencia del proceso electoral.
La controversia en torno a la publicidad electoral no autorizada ha afectado a varias campañas en Medellín. Según datos proporcionados por la Alcaldía de Medellín, hasta septiembre del año en curso se habían presentado 21 quejas formales por la instalación de propaganda electoral sin autorización.
Además, se habían retirado más de 100 ejemplares de publicidad de campañas que no contaban con los permisos necesarios. Este impacto afectó a una variedad de colectividades políticas, incluyendo a Medellín nos Une, Antioquia Viva, Cuidemos Medellín, el Centro Democrático y Salvación Nacional, entre otros.
Entre tanto, según la última encuesta de GAD3 Tracking Colombia, Gutiérrez se mantiene en la cima con una intención de voto del 65.5%, a pesar de una ligera disminución en su popularidad. Esta cifra ubica al candidato del partido Creemos a una distancia abismal de su competidor más cercano, Juan Carlos Upegui, quien obtuvo un 14.2% de apoyo.