El desparpajo de la cartagenera Lorna Cepeda ha quedado impregnado en reconocidos personajes suyos, como ‘la Peliteñida’ de Yo soy Betty, la fea o ‘la Chismosa’ de Chepe Fortuna. Además, ha estado en otras decenas de grandes producciones en cine, televisión y teatro durante más de 25 años de carrera artística.
Sin embargo, no todo ha sido color de rosa para ella y no siempre hubo solo éxitos para recoger a cada paso que daba, sino que también tuvo momentos de dificultades en los que llegó a pensar que no podría seguir adelante.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Google News.
En una entrevista con Juanpis González (personaje de ficción interpretado por el humorista Alejandro Riaño), la actriz contó uno de esos instantes de dificultad, por una deuda con las autoridades fiscales de Colombia.
Tal como el personaje de Patricia Fernández, secretaria de Ecomoda, Lorna también estuvo sin trabajo por mucho tiempo, al punto que “la pobreza le estaba respirando en la nuca”, como le habría dicho la rubia fantoche a su mejor amiga, Marcela Valencia.
Tanta era la falta de ingresos para solventar su estilo de vida que tenía una fuerte deuda con la DIAN por los impuestos que debía pagar de ley. “Tuve un momento difícil. Digamos que estuve sin trabajo, literal, por bastante tiempo, en verdad me endeudé, estuve en la inmunda”, recordó la artista en diálogo con el comediante.
En la misma charla, hizo memoria de que uno de los motivos por los que llegó a ese punto de inestabilidad financiera fue porque contó con un mal contador, y la urgencia la obligó a vender el apartamento y el carro para ponerse al día con los impuestos pendientes.
“De repente, me dijeron que yo debía y yo no sabía qué estaba debiendo. Y resulta que eran como muchos intereses, muchas penalidades. Una vez les dije: ‘Ustedes tienen que cobrarle mejor a la gente que debe muchísima más plata que yo’”, agregó.
Confesó que a pesar de los problemas de liquidez, decidió cambiar el rumbo de su vida. Lorna apeló a su fe católica, le pidió a la Virgen de Guadalupe que le diese una oportunidad. Cree que funcionó, pues pudo sobreponerse a la adversidad.
Por otra parte, la celebridad bolivarense rememoró el momento en que decidió entrar a la televisión, el cual estuvo acompañado de algunas mentiras.
“Cuando Roberto Reyes, director de la producción, me preguntó que si tenía experiencia, yo le dije que sí, pero nunca había hecho nada”, comentó Cepeda, admitiendo que después se llenó de temor porque no contaba con las herramientas técnicas para lograrlo.
Sin embargo admitió rápido su inexperiencia y tomó clases de actuación, una recomendación de la también actriz Silvia de Dios. “Yo creo que hice sufrir a muchos en esa grabación, porque estaba muy perdida, tanto así que Silvia me dijo un día que yo debía tomar clases de actuación y me recomendó el lugar en donde ella estudiaba. Así conocí al maestro Alfonso Ortiz, con quien me formé durante casi cinco años y ahí empecé de verdad”, añadió.
En ese proceso, los canales fueron confiando en ella cada vez y la pusieron en roles cada vez más importantes. El de Patricia fue el que la catapultó. “Patricia Fernández me dejó muchas anécdotas, porque yo soy muy despistada y desubicada. Recuerdo que en una escena en las que debía coger bus, me subí en el que no era. Ese día todos lloramos de la risa”, aseguró.
Concluyó destacando el impacto de Betty, la fea, que “es increíble el éxito de esta historia tanto años después, la gente aún me recuerda como ‘la Peliteñida’, cada repetición, cada adaptación es un nuevo bum. Lo único que les puedo contar es que podrán haber pasado los años, pero ella no cambió mucho”.