La tabla del descenso en la Liga Betplay parece casi que definida por la situación del Atlético Huila y Unión Magdalena, conjuntos cuyos promedios los tienen con un pie y medio en la Primera B, mientras que clubes como Envigado y Jaguares se salvaron en 2023, pero quedando amenazados para la temporada 2024 junto con los históricos Once Caldas y Deportivo Cali.
Respecto al cuadro de Montería, que tampoco está en la pelea para clasificar a los cuadrangulares del campeonato, cumplirá su noveno año ganando la batalla para seguir en la máxima categoría, el primer objetivo a cumplir para la institución Felina.
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Sin embargo, parece que ha sido la única tarea que Jaguares cumple, ya que desde 2015 se encuentra en una batalla incansable contra el “fantasma del descenso”, se salva en las últimas jornadas y solo en una ocasión estuvo tranquilo y fue por una decisión de la Dimayor.
Nueve años “sobreviviendo” en primera división
Jaguares de Córdoba tuvo su primera temporada en la “A” en 2015, cuando tenía como única tarea mantener la categoría y consolidarse en una liga que, desde ese año, pasó de 18 a 20 equipos, pero los directivos nunca pensaron que tendrían que pelear durante nueve años por no bajar a la “B”.
En su primer año, el cuadro de Montería logró 110 puntos en la tabla del descenso y se salvó de caer al Torneo Betplay por una diferencia de cuatro unidades, la misma cifra por la que siguió en la Liga Betplay para 2017 y 2019, salvando su puesto en la última jornada del campeonato.
Una de las razones para que Jaguares esté todos estos años en la primera división se debe a que la mayoría de clubes que ascienden desde la “B” no cuentan con una nómina sólida para mantenerse, prueba de ello fue que en 2019 descendieron los mismos que llegaron a la máxima categoría y eran Leones junto a Boyacá Chicó.
Por otro lado, a partir de 2022 cambió el sistema de descenso, que pasó de ser un puntaje que los ascendidos heredaban del antepenúltimo en la tabla del descenso, que durante mucho tiempo fue el cuadro de Montería, a tener un promedio donde se divide la cantidad de puntos sumados en los partidos disputados.
Sin embargo, Jaguares se mantuvo con la misma amenaza porque en 2022 quedó con un promedio de 1.18, y actualmente tiene 1.12, que son cifras muy bajas, pero lo tienen en la máxima categoría porque otros conjuntos se vieron con pocas condiciones, fútbol y esperanzas para continuar en la “A”.
La pandemia le sintió bien a Jaguares
Solo en una ocasión fue que Jaguares no tuvo prisa por el descenso, pero no se dio por una excelente campaña, sino por una decisión de la Dimayor que tuvo en cuenta la pandemia del COVID-19, la suspensión del campeonato por seis meses y el aplazamiento de ese tema por un semestre.
En agosto de 2020, los equipos profesionales acordaron que los descensos de ese año se pospondrían para mediados de 2021 porque solo se disputó un torneo, eso benefició tanto a Boyacá Chicó (98 puntos) como Jaguares (94 puntos) porque eran los últimos en la tabla.
Para 2021 se dieron dos descensos, el primero fue de Chicó y ascendieron Huila y Quindío en junio, luego en diciembre descendieron esos mismos dos conjuntos y Jaguares se salvó con una diferencia entre siete y 11 unidades, en ambos semestres, lo que demuestra que siempre se benefició de que otros conjuntos no tuvieron la misma suerte de permanecer en la “A”.