En la mañana del lunes festivo 16 de octubre, en Tibú (Norte de Santander), en la conflictiva región del Catatumbo, el gobierno Nacional, a través de su política de paz total, oficializó la instalación de la mesa de diálogos de paz con el Estado Mayor Central (EMC), la disidencia de la extinta guerrilla de las Farc que considera como la más grande del país.
“Ante ustedes asumimos el compromiso de llevar a buen término la construcción de la paz con esta plural, hermosa, inteligente y capacitada delegación que ha designado el presidente Gustavo Petro”, expresó el alto comisionado para la Paz, Danilo Rueda, en el acto oficial que incluyó el inicio de un cese bilateral del fuego que comienza a regir desde las primeras horas del martes 17 de octubre.
Mientras que el vocero del EMC, Andrey Avendaño, expresó ante periodistas: “Desde la organización tenemos esperanza de que hoy podamos por fin ya dar inicio formal a la instalación de esta mesa”.
Ante este hecho, que genera esperanza en el país para que cese definitivamente la violencia dentro del conflicto interno armado en Colombia, los gobiernos de algunos países garantes del naciente proceso, así como de otras zonas del planeta, expresaron sus buenos deseos para que resulte exitosa esta negociación.
“Saludamos el inicio del segundo proceso de paz en este gobierno colombiano🇨🇴. El cese del fuego es el primer paso para sentar una base más sólida para la paz y el desarrollo social (sic)”, publicó la embajada de China, a través de su cuenta oficial en la red social X.
Mientras que la representación de Noruega señaló que confirmaba su participación como una nación garante en este nuevo proceso que se lleva a cabo en el país.
“Felicitamos la instalación hoy de la Mesa de Diálogos de Paz entre el Gobierno de #Colombia y el EMC FARC-EP y la firma del Acuerdo de Respeto a la Población Civil y el Cese al Fuego. Noruega agradece y acepta la invitación de las partes a ser país garante en esta Mesa de Diálogo (sic)”, destacaron en la cuenta de X del país nórdico.
También recordaron que en el pasado han cooperando para lograr que el conflicto armado colombiano concluya definitivamente después de casi 70 años de confrontaciones.
“Noruega tiene una larga tradición de apoyar procesos de paz en Colombia, y asumiremos esta nueva responsabilidad en concurrencia con nuestro compromiso con la implementación del acuerdo de paz de 2016 con las extintas Farc-EP asi como con otros diálogos de paz en curso (sic)”, agregaron.
Suiza se sumó a los elogios al gobierno Nacional y destacó que desde el martes se detengan las hostilidades entre las dos partes en conflicto.
“Saluda la instalación de la Mesa de Diálogos de Paz entre Gobierno de Colombia y EMC FARC-EP, y celebra la firma del Acuerdo de Respeto a la Población Civil y Cese al Fuego (sic)”, señalaron en X desde la cuenta de su embajada en Colombia.
Así como Noruega, confirmaron su participación dentro del proceso y que se garantice la implementación del que se concluyó con la desmovilización de las Farc.
“Agradeciendo la confianza de las partes, Suiza acepta ser país garante en esta Mesa. En favor de una paz integral en Colombia, seguimos con el compromiso de apoyar a la implementación plena del Acuerdo de 2016 y los diálogos de paz ya en curso (sic)”, trinaron.
Finalmente, el gobierno de Irlanda también elogió el inicio formal del proceso y expresaron su deseo de que sea exitoso para acabe la violencia.
“Felicitamos la instalación de la Mesa de Diálogos de Paz y el cese al fuego bilateral entre el Gobierno Nacional de la República de Colombia y el EMC FARC-EP. Este es un paso importante para la construcción de una paz estable y duradera en Colombia centrada en la protección de la población civil y la promoción de los DDHH (sic)”, afirmaron en comunicado.
Y al igual que Noruega y Suiza, también aceptaron la invitación como nación amiga dentro de los diálogos de paz con esa disidencia.
“Irlanda ha confirmado su participación como país garante en el proceso. Reafirmamos nuestro firme compromiso con la paz en Colombia, incluyendo tanto la implementación del Acuerdo Final de Paz de 2016 como los esfuerzos actuales para lograr una paz más amplia. Creemos que poner fin a la violencia para lograr una paz a largo plazo solo es posible abordando las causas profundas e históricas del conflicto y garantizando la participación inclusiva de toda la sociedad. Deseamos a las delegaciones el apoyo, perseverancia y visión necesarias para seguir adelante en el camino hacia la anhelada paz (sic)”, finalizaron la misiva.