Caso Maximiliano Tabares: primeros condenados por el asesinato del menor en medio de rituales de Santería

Maximiliano Tabares, de ocho años de edad, fue asesinado en el municipio de Remedios, nordeste antioqueño. Por su muerte, un juez especializado avaló el preacuerdo celebrado entre la Fiscalía General de la Nación y la defensa de los procesados.

Luego de casi un año desde que las autoridades hallaron el cuerpo sin vida del menor, Alias Orejas o el Orejón y alias la Discípula o la Sumisa son los primeros condenados por el asesinato del niño. En este hecho hubo un total de seis acusados, quienes son señalados de tortura y desaparición forzada, eran sus propios familiares.

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Cabe destacar que tras una serie de análisis efectuados por el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, el 27 de octubre de 2022 pudieron confirmar que el cadáver encontrado 36 días después de haber sido reportado como desaparecido correspondía al pequeño Maximiliano.

El caso de Maximiliano Tabares impactó a los colombianos, puesto que, al parecer, fue perpetrado por integrantes de su propia familia, quienes a su vez integraban la secta satánica autodenominada como los Carneros. Con base en las indagaciones, la abuela, la madre y el padrastro se encuentran en prisión, junto con tres personas más.

En el dictamen de Medicina Legal, se evidenció que el menor fue torturado hasta morir y falleció como consecuencia de un trauma craneoencefálico provocado por objeto contundente.

Según las investigaciones, Maximiliano fue visto por última vez en la noche del 20 de septiembre de 2022 en el barrio Gaitán, de Segovia, entrando con su madre a la casa de su abuela, en donde se encontraron muñecos vudú junto con libros de esoterismo y varios cuadernos, utilizados supuestamente para realizar rituales después de la medianoche. A la mañana siguiente la madre lo reportó como desaparecido.

Pasados unos días, integrantes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) encontraron el cuerpo del menor mediante coordenadas e información suministrada por Sandra Patricia Caro Pérez, mamá de Maximiliano y Róbinson Esmit Arboleda Ramírez, alias Orejas, otro de los implicados en este aberrante hecho.

Hasta la vereda Cuturú Alto de Segovia, ubicado a una hora y media del casco urbano de esta población, llegaron los uniformados en compañía de Orejas, donde después de una excavación encontraron el cadáver del niño en alto grado de descomposición. Posteriormente, el cuerpo fue llevado a Medicina Legal, donde se confirmó la identidad de Maximiliano Tabares.

Uno de los preacuerdos vincula a Robinson Esmit Arboleda Ramírez, alias Orejas o el Orejón, celebrado entre la Fiscalía General de la Nación y la defensa del procesado, en el que se pactó una pena de 40 años y 10 meses de prisión, según confirmó el ente judicial. Orejas es acusado por los delitos de homicidio agravado, tortura agravada y desaparición forzada, de los cuales fue víctima el menor.

En cuanto a Susana Ceballos Zapata, alias la Discípula o la Sumisa, compañera sentimental del condenado, fue sentenciada a 5 años y 8 meses de cárcel por los delitos de favorecimiento de homicidio agravado, favorecimiento de tortura agravada y favorecimiento de desaparición forzada agravada.

El ente confirmó mediante un comunicado que: “El trabajo articulado de la Fiscalía y la Policía de Infancia y Adolescencia logró determinar que el niño fue golpeado indiscriminadamente durante dos días por el grupo delincuencial Los Carneros, en medio de un ritual para ubicar una supuesta guaca con oro”.

En este proceso de investigación ya están acusados y en etapa de juicio, la madre del menor, el padrastro, la abuela materna y su compañero sentimental. Finalmente, la Fiscalía anunció que la audiencia de lectura de fallo fue programada para el miércoles 1 de noviembre de 2023.