Se conoció el documento oficial que daría inicio al cese bilateral al fuego entre el Estado Mayor Central y el Gobierno nacional. En medio de la instalación de la mesa de diálogo entre esa disidencia de las Farc y la delegación designada por el presidente Gustavo Petro, se hizo una modificación al anuncio inicial que afirmaba que las operaciones ofensivas se detendrían el 16 de octubre.
Sin embargo, la nueva fecha quedó para las 00:00 horas del 17 de octubre y tendrá una prolongación de tres meses. Es decir, las partes se comprometieron a no empuñar armas hasta el próximo 15 de enero de 2024. Así lo estipuló el decreto expedido en las últimas horas, previo a la instalación de la mesa de negociaciones que tardó más de cuatro horas en dar comienzo.
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“Se decreta el cese al fuego bilateral y temporal de carácter nacional con impacto territorial sobre la base de un Acuerdo para el respeto de la población civil”, señala el documento oficial publicado recientemente por la Oficina del Alto Comisionado para la Paz.
Asimismo, las partes acordaron que el cese de operaciones ofensivas tendrá en cuenta a la población civil, que ha resultado fuertemente afectada por los recientes hechos de violencia que han se han vivido en los departamentos de Cauca, Putumayo y Norte de Santander.
“Respetar la vida en todas sus formas, los derechos y las libertades de la población civil, el territorio y el ambiente, en particular de los grupos de especial protección constitucional, incluidos los firmantes del Acuerdo de Paz”, reza en el decreto.
En el texto que fue avalado y firmado por el presidente Gustavo Petro sobre las 12:30 p. m. de este 16 de octubre, también se estableció que se respetarán los comicios que se adelantarán en todo el país el 29 del mismo mes y que se han visto amenazados por presuntos actos irregulares para violentar la seguridad de varios candidatos en los que tiene injerencia el grupo armado al mando de alias ‘Iván Mordisco’.
Según se pudo conocer, el acuerdo final también sufrió retrasos por cuenta de la creación de un protocolo que le permitiera a las partes saber en qué territorios específicos aplicará el cese bilateral al fuego. Sin embargo, a pesar de no tenerlo claro, en el texto final quedó estipulado que tanto el EMC como las Fuerzas Militares de Colombia tendrán que someterse a las disposiciones finales.
“Determine las áreas en las que hace presencia el Estado Mayor Central de las Farc-EP las cuales serán objeto de validación del Gobierno Nacional. En todo caso, estas no podrán incluir zonas pobladas o que y áreas que comprometan la seguridad nacional”.
Como ya se había informado antes, la suspensión de las operaciones militares por parte de la fuerza pública de Colombia no aplicará cuando se trate de combatir las economías ilegales que existen en el país, ya que esto implicaría un posicionamiento acelerado de actividades como el narcotráfico, que pondría en jaque la seguridad nacional.
Entretanto, el presidente de la República, Gustavo Petro, se refirió a la instalación de la mesa, que significaría el inicio del fin del conflicto armado con una de las disidencias más fuertes y abundantes en el territorio nacional, desde la firma del acuerdo de paz en 2016, cuando el Juan Manuel Santo aún se desempeñaba como primer mandatario.
“Colombia hoy espera dar un mensaje de paz desde el interior mismo de su sociedad. No podemos lanzar un mensaje coherente de paz al mundo si nos matamos entre nosotros mismos. Una Colombia en paz será una potencia mundial de la Vida”.