Menor murió electrificada con una teja de zinc

En Norte de Santander, especialmente en su capital Cúcuta, los habitantes se encuentran afligidos con una muerte accidental que ocurrió en el barrio San Luis. Una niña de 12 años murió al sufrir una descarga eléctrica, al parecer una teja de zinc fue por donde la electricidad transcurrió y terminó afectando a la menor de edad.

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La trágica muerte ocurrió en una humilde vivienda del sector, allí la menor falleció al tocar accidentalmente el tejado que habría tenido contacto directo con un cable eléctrico en mal estado. Su hermano de tan solo ocho años fue el primer testigo del dantesco hecho al ver en suelo inerte y sin vida a su hermana mayor.

La comunidad que llegó a prestar auxilio tras escuchar los gritos de horror del menor se percataron de la niña de 12 años, al intentarla mover del suelo sintieron una leve descarga que confirmó la causa del fatídico fallecimiento.

La niña que aseguraba quería estudiar para ayudar a su mamá y su hogar falleció en medio de difíciles condiciones económicas por lo que la comunidad del barrio está recolectando fondos para poder pagar los gastos fúnebres de la menor.

De igual manera los vecinos del San Luis han lamentado el fallecimiento de la niña que se caracterizaba por su cordialidad y alegría, reporta el diario Vanguardia.

Las autoridades recomiendan que, en caso de encontrarse con cables deteriorados o desgastados, la mejor práctica es desconectar de inmediato la fuente de energía y reemplazarlos por cables nuevos. No se debe intentar reparar un cable dañado con cintas aislantes, ya que esto puede ser peligroso. También es crucial contar con un profesional electricista calificado para llevar a cabo cualquier reparación o instalación eléctrica en el hogar, asegurándose de que todo esté en cumplimiento con las normativas de seguridad.

Cúcuta, la principal ciudad del departamento de Norte de Santander y una población fronteriza que no supera el millón de residentes, enfrenta una desafiante realidad: el mayor número de personas viviendo en situación de calle. Esta preocupante situación fue expuesta por la organización social “El Banquete del Bronx” en un reportaje de Noticias Caracol.

Esta localidad es la que registra el mayor índice de personas sin hogar, y sus calles se han convertido en un depósito de desperdicios. Un total de 62 sitios al aire libre funcionan como vertederos utilizados por este grupo de individuos que busca en la basura y en los canales de drenaje alimentos y objetos necesarios para su supervivencia.

Según el censo más reciente realizado por el Gobierno nacional, se estima que al menos 1.200 personas se encuentran en esta situación en la ciudad. Sin embargo, “El Banquete del Bronx” advierte que para el año 2023, la cifra ya ha superado los 3.000.

Este fenómeno se ha agudizado en la ciudad fronteriza con Venezuela, ya que entre los nuevos habitantes de calle se encuentran migrantes. Una de estas personas, de nacionalidad extranjera, relató a Noticias Caracol que hace algunos meses dio a luz a un bebé en medio de la calle y la basura, pero que el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) se lo arrebató. Por lo tanto, aprovechó la entrevista para solicitar ayuda, con la esperanza de cambiar su vida y recuperar a su familia y a su hijo.

En las principales ciudades de Colombia, como Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla, es una vista común la presencia de personas sin hogar que vagan sin rumbo, piden limosna, rebuscan en la basura y residen en lugares improvisados como callejones, puentes, bancas de parques y paraderos de transporte público. Este grave problema social es una consecuencia directa de la falta de políticas públicas efectivas destinadas a abordar y ayudar a quienes, debido a factores como el alcohol, las drogas o problemas de salud mental, no pueden salir de la indigencia por sus propios medios.