Con mucho esfuerzo y dedicación en los últimos años, los deportes subacuáticos han experimentado un auge sin precedentes en la ciudad de Medellín, Colombia. Lo que una vez fue considerado un pasatiempo oscuro y poco común ha florecido en una comunidad de entusiastas que practican en las profundidades de las piscinas del complejo acuático César Zapata de la Unidad Deportiva Atanasio Girardot.
Es así como hoy, después de muchos años en los que el país desconocía su existencia, la Selección Colombia de Rugby Subacuático ya ha logrado obtener en tres oportunidades el título de campeón mundial de este deporte bajo el agua. Y es que esta disciplina ha sufrido un crecimiento impresionante en Medellín, que ha dejado a deportistas como Sergio Alejandro Ruiz, fundador de una de las escuelas deportivas más jóvenes de Medellín, Makos.
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“Yo antes decía que jugaba rugby subacuático y la gente me miraba confundida. Ahora lo menciono y la respuesta es diferente porque las personas saben que este deporte nos ha dado reconocimiento a nivel internacional”, aseguró Ruiz en diálogo con El Colombiano.
Según comentan los atletas, su deporte se enfrentó a la extrañeza de los paisas por aguantar la respiración durante largos periodos y además intentar anotar un gol desafiando la fuerza del agua. Sin embargo, ese escepticismo se ha transformado en asombro y admiración a medida que crecen las listas de inscritos a deportes subacuáticos de manera rápida. Lo que solía ser una rareza ahora se ha convertido en una práctica común y apreciada en Medellín.
Figuras como Samuel Gaviria, entrenador y jugador de la Selección Colombia masculina, han llevado al equipo a la victoria en las Copas del Mundo en Graz, Austria en 2019 y Montreal, Canadá, en 2023. Además, Medellín es el hogar del Club Orcas, considerado el mejor equipo del mundo en rugby subacuático, habiendo ganado tres veces el título de campeón mundial de clubes, más recientemente en Berlín, Alemania, en noviembre de 2022.
Pero el auge de los deportes subacuáticos en Medellín no es un fenómeno exclusivo de la capital antioqueña. Se ha extendido por toda la región desde hace 25 años y han tenido como escenario diferentes piscinas con profundidades que varían entre 3.5 y 5 metros, lo que permite a los atletas moverse en las tres dimensiones: arriba, abajo y a los lados mientras interactúan con una pelota.
Y es que la afición por el agua y los deportes que se pueden practicar en ella ya le han dado paso a que existan varias escuelas en el departamento, como en el caso del Club Orcas, Ecomares, Medellín UWR y Makos, entre otros. Este fenómeno estaría relacionado también con las oportunidades que se han dado desde el departamento para promover todas las disciplinas deportivas.
“Le seguirá dando crecimiento, no solo al rugby sino a todos los deportes subacuáticos en Medellín, que tiene una amplia ventaja con respecto a otras ciudades de Colombia. Hay un futuro alentador para estas actividades en la ciudad”, señaló David Tobón, miembro del club Makos, al medio citado.
Pero no solo el rugby subacuático se ha abierto paso entre los paisas. La apnea también ha florecido en Medellín con el paso de los años. De hecho, para el 2013 las competencias de este deporte atraían a solo unas pocas personas, mientras que en la última edición de este desafío bajo el agua logró contar con la presencia de 72 deportistas.
En esta disciplina, en la que los deportistas deben intentar descender a la profundidad de la piscina y sostener la respiración por el mayor tiempo posible, Colombia también tiene referentes internacionales como en el caso de Sofía Gómez Uribe, quien logró obtener un récord mundial de dos minutos y 45 segundos sin respirar a una profundidad de 84 metros.
Los logros de los deportistas de la región han hecho que en Medellín se esté experimentando una revolución en los deportes subacuáticos. El rugby subacuático y la apnea han ganado un seguimiento apasionado, y la ciudad se ha ganado la reputación de ser un epicentro mundial de estos deportes. Con el éxito internacional de atletas como Samuel Gaviria y el continuo crecimiento de eventos como el Festival Makos de Apnea, el futuro de los deportes subacuáticos en Medellín es prometedor y emocionante.