Tras el ataque terrorista perpetrado por el grupo islamista Hamas contra Israel, que comenzó el sábado 7 de octubre de 2023, se confirmó la muerte de Antonio Macías Montaño, un colombiano que estaba desaparecido después de asistir a una fiesta electrónica a menos de 5 kilómetros de la Franja de Gaza. Esta zona fue asaltada por militantes palestinos armados.
Desgarradoras imágenes y testimonios dan cuenta de la masacre que ocurrió durante el festival, donde también fue asesinada Ivonne Rubio, pareja del joven colombo-israelí.
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A las 6:00 de la mañana de ese fatídico sábado, el cielo del desierto del Néguev se tiñó de sangre, llamas y disparos, luego de que militantes palestinos del grupo extremista Hamas se tomaran el festival Tribe of Nova -un evento de música electrónica- como parte de su ataque sorpresa contra Israel.
El festival, que congregó a cerca de 3.000 amantes del género, entre israelíes y extranjeros, terminó convertido en una masacre sin precedentes: los hombres armados asesinaron a tiros a las personas que se encontraron en el lugar y secuestraron a cientos de asistentes.
Según la agencia de rescate Zaka, en total fueron más de 260 cuerpos los que fueron hallados en el lugar donde se celebraba el ‘rave’. Entre los fallecidos se encontraban los cuerpos de Ivonne Rubio y Antonio Macías, una pareja de colombianos amantes de la música electrónica, quienes asistieron al evento para celebrar su aniversario.
“Papi, estamos en guerra”
Pasaron solo segundos para que los asistentes comprendieran que era un ataque armado del grupo palestino, y que debían huir para salvaguardar sus vidas.
“Estábamos en el festival y comenzó a sonar una ‘sirena roja’ (alerta de cohete). El caos fue inmediato, sobre todo cuando los carros querían empezar a salir del lugar. Luego empezamos a escuchar los disparos y empezamos a correr”, relató uno de los sobrevivientes de la masacre al diario Marca.
A esa misma hora, entre los estallidos de los misiles y mientras el grupo de terroristas ingresaba a la zona del festival disparando indiscriminadamente contra los asistentes y destruyendo los automóviles para que no pudieran escapar, Ivonne Rubio y Antonio Macías Montaño llamaron a sus padres.
“Papi, papi, estamos en guerra y yo voy corriendo a buscar un búnker”, fueron las palabras que Ivonne le dijo a Julio, su padre, antes de perder por completo la comunicación con él, informó el diario El Tiempo.
Mientras tanto -según el mismo medio- Antonio Macías le decía a Claudia, su mamá, que estaban lanzando bombas en la zona y que, apenas pudiera, la contactaría de nuevo. Nunca pasó.
“Fue tal la sorpresa que Claudia pensó que había soñado que su hijo la llamó. Una vez despierta, viendo las noticias, se dio cuenta de que su hijo estaba corriendo peligro de muerte”, relató el rotativo bogotano.
En redes sociales comenzaron a circular videos de la angustia que se apoderó de los asistentes a la fiesta mientras intentaban sobrevivir. En algunos se ven a personas escondidas en arbustos, a la vez que se escuchan disparos. Otros muestran como jóvenes eran llevados por los terroristas a punta de pistolas.
Sobrevivientes a la masacre aseguraron a diversos medios que tuvieron que esperar cerca de tres horas en la zona hasta que el Ejército israelí apareció y los rescató en medio de la sangrienta escena. El paradero de Ivonne y Antonio para ese entonces continuaba siendo un misterio.
Juan Hernán Hincapié, uno de los amigos de Antonio, y quien estaba con la pareja en el momento del ataque, indicó a Noticias Caracol que, al parecer, los jóvenes si habían alcanzado a resguardarse en un búnker tal y como le avisaron a sus familiares.
“Nos contaron que ellos entraron al búnker y que Hamás llegó y les tiró una granada, mataron a las primeras personas que estaban en el búnker, entraron después y quemaron hasta donde alcanzaron con el arma que tenía y tanto Antonio como otros amigos alcanzaron a salir corriendo, pero los cogieron a tiros. Se salvaron esos tres muchachos que nos contaron la información, de resto no se sabe nada más de los otros”, contó Hincapié al noticiero bogotano.
La muerte de Ivonne
”Estamos en guerra”, declaró horas más tarde el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, tras el sorpresivo ataque del grupo palestino Hamás.
Con el paso de las horas y los días, las familias de los jóvenes esperaban encontrarlos. Algunos tuvieron suerte, otros no. Claudia, la mamá de Antonio, por su parte solo pedía que su hijo e Ivonne no estuvieran secuestrados ni siendo torturados.
“No puedo recriminar a Dios por llevarse a mi hijo de la peor forma: él me lo dio, él me lo quitó. Lo que le pido a Dios es que no lo hayan secuestrado y que no lo estén torturando. No quiero que Ivonne ni él vivan esas cosas. Estoy preparada para las cosas buenas y malas”, le dijo la madre de Antonio a Álex Macías, primo del joven, quien dialogó con el diario El Tiempo.
Aunque las familias de la joven pareja mantenían las esperanzas en alto, todo cambió cuando la policía israelí confirmó que Ivonne había sido hallada sin vida el miércoles 11 de octubre.
Tras el asesinato de la joven de 26 años, y su posterior entierro en Jerusalén el 12 de octubre, Antonio continuaba desaparecido.
No sería sino hasta la mañana del viernes 13 de octubre que una prueba de ADN confirmaría que el joven colombo-israelí también era una de las víctimas que fueron halladas sin vida en el lugar donde se desarrolló el festival. Al parecer, según la revista Semana, su cadáver fue hallado en el refugio antiaéreo donde se escondía.
“Con gran tristeza nos enteramos de su muerte, un día después del entierro de nuestra amiga Ivonne. ¿Cómo puede este mundo ser tan cruel? Ya no quedan lágrimas”, escribió Valentina, una de las amigas del joven en su red social.
A casi una semana del estallido de la guerra, ya son más de 1.300 personas las que han muerto a manos de Hamás en Israel, mientras en Gaza son más de 1.500 las que han perdido la vida.
Entre las miles de víctimas queda la pareja colombo-israelí, quienes llevaban tres años de relación sentimental, y dejan huérfanos a Aviel, de cuatro años, hijo de Ivonne, y a Manuela, de seis años, hija de Antonio.