La reserva activa y veteranos de las Fuerzas Militares han hecho públicos sus reparos al Gobierno de Gustavo Petro respecto al manejo que le ha dado a las instituciones encargadas de la defensa. La molestia se ha visto reflejada en marchas en contra del presidente de la República e incluso con una discusión de un mayor retirado del Ejército que enfrentó al general Helder Giraldo en el aeropuerto El Dorado de Bogotá.
El coronel en retiro Carlos Martínez Caballero, vocero de Faro, señaló a Infobae Colombia que respetan la postura del hombre que increpó al general Giraldo, pero no la comparten. Desde la organización que tiene más de 70 aliados a nivel nacional de la reserva y veteranos, apoyan a la fuerza pública y consideran que el problema es del máximo comandante: el presidente Petro.
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“Tanto el Gobierno en cabeza del presidente y el ministro no le dan el respaldo que se merece a la fuerza pública ni asumen una postura contundente. Nosotros mismos como Faro, hemos salido a las calles a exigirle al gobernante de turno que debe haber una separación de poderes, un respeto irrestricto a la fuerza pública y lógicamente una garantía sobre lo que es la seguridad de la defensa del país”, señaló el coronel (r) Martínez.
Desde la Reserva Moral de Colombia sostienen que si bien hay molestia en la política nacional, expresarle los reparos al general Giraldo no es la forma apropiada, debido a que él tiene el deber constitucional de seguir las directrices del Gobierno y tampoco tiene la posibilidad de elegir. Pero creen que detrás de esos hechos hay una estrategia política.
“Cuando un militar en retiro se enfrenta con un militar activo, hay gente a la que sí le conviene que eso suceda, hay personas que sí les interesa que haya una división y un fraccionamiento; y la mejor muestra es la cantidad de militares y policías que después del retiro se aliaron al Pacto Histórico”, afirmó el vocero de Faro.
Los exmilitares ven con preocupación las reacciones de los funcionarios del Gobierno nacional a las situaciones de violencia que sufren los miembros activos, por lo que consideran que no hay respeto a la institución ni una postura mancomunada.
“La actitud que se tomó cuando fueron secuestrados los policías en el sector del Caquetá, los postulados que se manifiestan por parte del presidente, del Ministro y de su gabinete cuando asesinan a soldados, cuando secuestran a soldados, cuando se viola el respeto a la institucionalidad de la fuerza pública, en cabeza del máximo comandante de la fuerza militar que es el presidente, si él no adopta una postura seria y directa de respaldo a su fuerza pública nos da mucho que pensar”, sostuvo el vocero de Faro.
“Además de eso debemos decir que antes de ingresar al cargo del presidente de la República ya había manifestado su animadversión con la misma fuerza pública; entre ellos el hoy candidato Gustavo Bolívar, que fue senador y es del Pacto Histórico, aliado al presidente Gustavo Petro, que llamó ‘cerdos’ a los policías, echándole la madre a los policías y luego fue senador y hoy es aspirante al al primer cargo de la capital de la República”, afirmó Martínez.
No están de acuerdo con la política de separar a la Policía del Ministerio de Defensa porque consideran que es romper años de trabajo para generar unidad, denuncian la reducción del presupuesto para el sector, además de señalar que Iván Velásquez no los representa.
Desde Faro señalan que la falta de respaldo se evidencia en los eufemismos utilizados en casos de violencia contra la fuerza pública. Por ejemplo, rechazan que no se condenen como atentados terroristas los asesinatos de soldados y policías por parte de los grupos armados, o se llame cerco humanitario lo que consideran un secuestro.
“No se puede asumir un papel de un presidente, que es el máximo comandante de las fuerzas militares y la Policía, y que no salga a defender a sus hombres y adopte una posición contundente de defensa. Eso es como si el papá no saliera a defender a los hijos; para eso asumió el papel de presidente, para eso asumió el papel de máximo comandante de la Fuerza militares, si no lo quiere asumir, entonces que se retire y que lo asuma alguien que quiera defenderlo”, señaló el vocero de Faro.
“En cambio sí sale a tomar unas posturas públicas en su alocución donde irrespeta a los militares diciendo que por un pollo frito asesinaban a los jóvenes; que muestre las pruebas ante las autoridades competentes para determinar que eso es cierto. Yo no creo jamás que un militar haya matado por un pollo frito a una persona, pero el presidente lo dijo públicamente en una locución nacional, con una cantidad de apelativos en contra de los militares y policías. Eso no lo hace un máximo comandante si no tiene las pruebas. En esos hechos es cuando nosotros no estamos de acuerdo y exigimos el respeto”, agregó.