Así fue capturado Luis Alfredo Garavito, el mayor violador y asesino de niños en Colombia

Luis Alfredo Garavito Cubillos, uno de los peores criminales en la historia de Colombia, falleció sobre el mediodía del jueves 12 de octubre de 2023. Según informaron desde el Inpec, el responsable de la muerte de alrededor de 172 menores de edad en el país, sucumbió al cáncer en la Nueva Clínica Santo Tomás del Caribe en Valledupar (Cesar).

El nacido en Génova (Quindío) cumplía una condena de 40 años de prisión que, originalmente y por la suma de todos sus crímenes, era de alrededor de 1.853 años y 9 días recluido dentro de un centro carcelario. Sin embargo, por las leyes de la época en la que fue interceptado por las autoridades, no era permitida la cadena perpetua dentro del territorio nacional, Garavito fue sentenciado a cuatro décadas tras las rejas.

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No obstante, Luis Alfredo Garavito solo estuvo preso durante poco más de 24 años debido a que estuvo bajo poder de las autoridades desde el 22 de abril de 1999 hasta el jueves 12 de octubre de 2023, cuando falleció.

Sobre la mañana del jueves 22 de abril de 1999, el criminal se encontraba en Villavicencio (Meta) buscando a la que sería su siguiente víctima después de casi siete años de torturar, violar y asesinar a decenas de menores de edad en todo el territorio nacional.

Según señaló El Tiempo para la época, Garavito, que se identificó para ese entonces bajo el nombre de Bonifacio Mosquera Lizcano, atrajo la atención de un niño de 10 años que se encontraba en la Plaza Los Centauros de la capital del Meta. El menor de edad se dejó llevar de los llamados del criminal, quien le dijo que le compraría una lotería si se le acercaba.

Una vez el niño estuvo a pocos metros de donde permanecía el violador, el criminal lo amenazó con asesinarlo con un cuchillo en caso de que emitiera grito alguno. Así las cosas, ambos subieron a un taxi que los dejó en un sector conocido como Anillo Vial, en zona rural de Villavicencio.

Al descender del vehículo, Garavito, con el niño bajo su mando, ingresó a un matorral en una de las zonas de la casa finca Rosa Blanca, ubicada cerca del barrio La Coralina, en las afueras de la ciudad. Allí, pocos minutos después, el criminal desnudó al menor de edad para posteriormente amarrarlo de manos y pies, y comenzar con sus habituales torturas.

No obstante, el niño comenzó a emitir llamados de auxilio, los cuales fueron escuchados por un habitante en condición de calle que caminaba por la zona. De inmediato, el sujeto se acercó al lugar y logró presenciar la escena del menor de edad desnudo y amarrado. Al percatarse de ello, el hombre atacó a Garavito lanzándole piedras, mientras que este se defendió con un cuchillo antes de escabullirse entre el potrero.

El habitante en condición de calle liberó al niño y lo llevó hasta la casa finca en donde los presentes dieron aviso a las autoridades. Minutos más tarde, el cabo primero Pedro Babativa, acompañado por dos agentes de la Policía Nacional, llegaron al lugar de los hechos, en donde aguardaron a que Garavito saliera del potrero en el que permaneció escondido por varias horas.

Finalmente, los uniformados, que recibieron el apoyo de varios miembros de la fuerza pública, se percataron de que un hombre de baja estatura que vestía una camisa a cuadros, como lo había descrito el niño, buscó salir de los matorrales y lo interceptaron. Al ser indagado sobre su identidad, Garavito mostró una cédula falsa con el nombre de Bonifacio Mosquera.

Bajo esa identificación, el criminal fue llevado hasta el Comando de Policía de Villavicencio el jueves 22 de abril de 1999. Una vez en poder de las autoridades, Garavito fue vinculado como presunto autor de 13 asesinatos de menores de edad en las afueras de la capital del Meta.

A esto se le sumó que las autoridades hallaron también los restos de varios niños a las afueras de Pereira (Risaralda). Tras realizar las respectivas investigaciones y después de varios meses de someter a “Bonifacio Mosquera” a múltiples interrogatorios, el criminal confesó ser Luis Alfredo Garavito Cubillos, autor de más de 170 asesinatos de menores de edad en todo el territorio nacional para el 28 de octubre de 1999.

Tal habría sido la rendición de cuentas del violador, que se demoró horas detallando los crímenes por los que era inicialmente acusado, sin embargo, con el pasar de los meses, Garavito ahondó en cada uno de los delitos que habría cometido durante más de 20 años de historial criminal.