Jorge Enrique Robledo, el arquitecto y 10 veces mejor senador de Colombia, que quiere llegar a la Alcaldía de Bogotá

El reconocido político de izquierda habló de sus propuestas y contó algunos detalles de su vida personal

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Jorge Enrique Robledo oficializa su
Jorge Enrique Robledo oficializa su candidatura a la Alcaldía de Bogotá ante la Registraduría - crédito Camila Díaz/Colprensa

Infobae Colombia estuvo con el considerado 10 veces consecutivas como mejor senador de Colombia por los líderes de opinión, quien en la actualidad adelanta campaña para llegar a la Alcaldía de Bogotá. Jorge Enrique Robledo, candidato por Dignidad, habló de empleo, educación, salud, movilidad, seguridad y otros temas importantes para la ciudad.

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Infobae Colombia: Usted fue elegido 10 veces consecutivas como el mejor senador de Colombia, ¿cree que, si llegara a quedar electo como alcalde de Bogotá, podría también ostentar ese título, pero esta vez como el mejor alcalde de la capital de los colombianos?, ¿por qué?

Jorge Enrique Robledo: Pues haría el esfuerzo porque así fuera, pero eso no se sabrá sino a la hora del veredicto, porque yo gané esas 10 veces la distinción de ser el mejor los diez años en que fui senador. Pero claro, voy a hacer esfuerzos por hacer las cosas lo mejor. Pero también les digo esto, yo no actúo en política y en la vida porque me aplaudan y porque me den medallitas, ese tipo de visiones no las tengo.

- Todos sabemos, por declaraciones en medios y publicaciones en X (Twitter), que usted y el presidente Gustavo Petro no se la llevan muy bien, a pesar de que ambos son de izquierda. ¿Cómo piensa manejar las relaciones Casa de Nariño-Palacio Liévano si llegara a quedar electo como alcalde de Bogotá?

- En lo que a mí respecta, tengo la certeza de que puedo relacionarme con el Presidente de la República sin ningún problema, en la medida en que lo que vamos a hablar serán asuntos de interés para los bogotanos. O sea, a mí no me van a enceguecer las diferencias que tengo con él, y yo espero que él tenga la sensatez suficiente para que de la misma manera se relacione conmigo, porque lo que yo le voy a pedir a Gustavo Petro, por ejemplo, respaldar el tema del TransMilenio cero, no es en beneficio de Jorge Enrique Robledo, es en beneficio de las gentes de Bogotá, sin los votos de esas gentes de Bogotá, Petro no hubiera sido presidente y sin los votos de esa gente, yo no sería senador.

- ¿Buscará apoyo en su antiguo partido político, el Polo Democrático?

- Sí, hay mucha gente que estuvo con el Polo y hoy está con nosotros, y eso es más o menos normal en política. Hay gente de distintos orígenes que está respaldando mi candidatura.

- ¿Cómo acabaría con la llamada mermelada que muchas veces se maneja para que en el Concejo de Bogotá algunos cabildantes le aprueben proyectos al alcalde de turno?

- Es que la mermelada tiene que ver con que quienes están gobernando y quienes firman los cheques, digamos, hagan acuerdos indeseables con cualquier sector político. Conmigo no va a haber acuerdos de ese tipo, o sea, que en lo que respecta a mí no va a haber mermelada. Yo me voy a relacionar con toda la clase política de Bogotá, los concejales de todos los orígenes, etcétera, pero siempre pensando en qué es lo mejor para Bogotá, pero no sobornando a nadie.

- ¿En qué va a consistir su política de austeridad en el Distrito?

- Yo tengo la impresión de que hay gastos innecesarios, pero eso lo voy a constatar cuando me posesione como alcalde. Vamos a estudiar cuidadosamente qué cosas están haciendo y donde encuentre que hay, digamos, situaciones de despilfarro, de derroche o de poca austeridad, vamos a ajustar. Cero tolerancia con la corrupción y con el despilfarro y ¿por qué?, porque es obvio que el presupuesto de Bogotá es bastante inferior a las necesidades de los bogotanos, entonces, tenemos que lograr que esa plata rinda para hacer más cosas de las que necesita la gente que vive aquí en la capital de la República.

- ¿Continuaría con el “corredor verde” por la Séptima?

- Yo no estoy de acuerdo con ese proyecto. Ahora, si ese proyecto queda firmado y contratado, pues es una realidad que yo no puedo modificar, pero, si de mí depende, no se hará, porque es una decisión equivocada; de entrada, ese TransMilenio no cabe por la Séptima; es que no cabe, y por eso tienen que, prácticamente, cerrar el tránsito norte-sur por esa vía y eso le genera un impacto muy dañino a la ciudad.

Hay otro asunto que hay que mencionar, esa licitación la sacaron a concurso sin que estuvieran todos los estudios, ese es un error garrafal. Yo fui 26 años profesor de tiempo completo de Arquitectura en la Universidad Nacional, y si hay un error grande, es sacar a contratar una cosa que no tiene todas las definiciones de detalle, porque eso se presta para todo tipo de equivocaciones.

- ¿Qué cambios propondría a futuras líneas del metro?

- Habría que hacer estudios de detalle, pero que quede claro que yo soy partidario de que Bogotá tenga una red de metros. Entonces, por ejemplo, la idea de continuar con ese metro y llegar a Suba, pues en principio me suena sensata. Que venga otra red desde Soacha, también puede ser, pero todo eso habrá que respaldarlo con estudios. Yo soy una persona que no tomo decisiones que no haya estudiado muy cuidadosamente, y los estudios técnicos los respeto muchísimo. Habría que trabajar más en esa dirección.

- ¿A qué programas sociales de la administración de Claudia López le daría continuidad?

- Habrá que mirarlos uno por uno, pero digamos que, en general, la economía del cuidado, que tiene que ver con respaldar de muchas maneras a las mujeres que sufren por su propia condición de Bogotá, pero además por ser mujeres, ese es un tema que me parece una buena idea; entre otras cosas, porque en el origen de esa política estuvo mi oficina en el Senado. Así como eso habrá que mirar otros programas, becas de educación, etcétera, eso toca mirarlo minuciosamente, porque no es solo un problema de si sigue el programa, sino con cuánta plata, y eso ya exige estudios de detalle.

- ¿Explíquenos detalladamente su propuesta de pasaje cero en TransMilenio y en qué se diferencia de la propuesta del candidato Luis Carlos Galán y de la del presidente Gustavo Petro?

- Carlos Fernando Galán ha amenazado con una propuesta, pero no la ha hecho; inclusive en eso estoy esperando que hagamos un debate él y yo, porque él dice que no está de acuerdo con mi propuesta, pero tampoco nos muestra cuál es la de él.

Con la de Petro no puedo estar de acuerdo porque él copia mi idea. Acordémonos que la primera persona que planteó este asunto fui yo. Copia mi idea de que haya pasaje cero, pero después dice Gustavo Petro que se financiará subiendo las tarifas de la electricidad a la gente, así no puede ser, porque qué sentido tiene que la gente se ahorre una plata en una cosa si la gravan en otra, eso es un despropósito.

Qué es lo que yo estoy diciendo: primero, las razones sociales de esos son evidentes, hay dos y medio millones de bogotanos y bogotanas que están haciendo menos de tres comidas al día: el hambre que hay aquí no tiene nombre. La gente camina distancias larguísimas porque no tiene con qué pagar el TransMilenio; hay 800.000 personas que su ingreso diario es la suma de dos pasajes de TransMilenio, o sea, que socialmente eso es una necesidad.

Ahora, ¿cómo se financia?, eso es relativamente fácil de entender y es posible: primero, ya hoy, ojo con esto, ya hoy el Distrito le está aportando casi tres billones de pesos al pasaje de TransMilenio; sin ese aporte del Distrito el pasaje costaría el doble, y yo quiero advertir desde ya, yo no voy a subir los pasajes de TransMilenio, y quiero oír qué van a hacer los que están diciendo que lo que yo propongo no se puede, en cuánto van a subir los pasajes de TransMilenio. ¿Van a eliminar ese subsidio del Distrito?, les hago una pregunta directa, no se hagan los locos, porque dicen que es que no se puede; yo digo, sí se puede de entrada, porque voy a mantener el subsidio que ya hoy está pagando el Distrito.

Y, en segundo término, la otra mitad de la plata, que es una suma que no es astronómica, la paga el Gobierno nacional. Esa es mi propuesta, que del presupuesto nacional salga la otra mitad de la plata. Entonces, fíjense que sí se puede, lo que pasa es que sí se puede si uno quiere, pero resulta que quienes están compitiendo conmigo no quieren, entonces, dicen que no se puede. Ese es un truco, claro.

- ¿Cómo funcionará el plan público de empleo que usted propone?

- Lo que he planteado al respecto es crear 100.000 empleos con recursos del Distrito. Todo eso va a ser empleo productivo, no es para otra cosa. Tiene que ver con estimular a los jóvenes y a las mujeres, por decir alguna cosa, guardias del tránsito, ese puede ser uno; promoción de temas ambientales, para sembrar árboles en las zonas populares de Bogotá y hacer parques, o educación o salud, esta es una ciudad que tiene mil necesidades y sobra en qué poner 100.000 empleos, que yo financiaría con gasto público del Distrito, empleos productivos en cosas que se necesitan, no es salir a regalar plata y cosas de ese corte. ¡Ni pensarlo!

- ¿En qué consiste Bogotá hambre cero?

- Es una propuesta que apunta a hambre cero; por ejemplo, vamos a mantener sistemas de comidas calientes para los ancianos, sin comidas calientes eso es muy complicado. Hay que aumentar el número de jóvenes en jornada única y eso no funciona si no es con la alimentación. Hay muchos más aspectos puntuales: personas que sufren enfermedades mentales, hay muchas cosas que se pueden hacer para respaldar que la gente pueda alimentarse. Es que hay hambre en Bogotá, quiero enfatizar, ¡hay hambre, hambre en Bogotá!

- ¿Cómo trabajaría para eliminar la pobreza en Bogotá? ¿Qué programas sociales de alto impacto propone?

- Aquí hay una cosa que hay que señalar con franqueza, y soy el único que lo estoy haciendo, buena parte de la crisis económica de Bogotá, de la pobreza y el desempleo, ustedes la encuentran también en Barranquilla, en Cali, en Medellín, en todas partes. Aquí hay que hacerse una pregunta, el problema no es de las alcaldías, es de políticas nacionales que han destruido los aparatos productivos. Entonces, yo voy a respaldar en lo que pueda la producción, pero hay unas causas nacionales que hay que señalar, es parte de la tragedia que tenemos. Aquí marco una diferencia con mis competidores, es que yo soy el único que he defendido de verdad un cambio en las políticas económicas nacionales; casi todos quienes están compitiendo conmigo han sido parte de los gobiernos anteriores que le han hecho un daño descomunal a Colombia y a Bogotá, y ahora parece como si ellos no hubieran vivido en Colombia y no tuvieron nada que ver con los gobiernos anteriores, y ustedes lo revisan y han sido duquistas, uribistas, santistas, etcétera. Bueno, ese tipo de honores no me caben a mí, porque no he estado con ninguno de esos gobiernos.

- ¿Qué opina de las obras inconclusas?

- Sé que hay un problema grave en la contratación y es que hay muchas obras inconclusas, hay inclusive ya pleitos jurídicos en las contrataciones del Distrito; ese es un tema que tenemos que llegar a resolver. Una de las cosas más urgentes de resolver en Bogotá en movilidad es que se terminen las obras inconclusas. Aquí hay un problema gravísimo, hay gente que se está quebrando porque esas polisombras verdes están impidiendo que la economía se desarrolle y ahí vamos a hacer un trabajo muy grande.

- ¿Qué propuesta tiene para la formalización de trabajadores del Distrito que están por OPS?

- Mi política es no aumentar el número de trabajadores del Distrito que están por prestación de servicios y hacer un esfuerzo grande para contratarlos de manera directa. Lo que hoy está pasando en salud, en obras públicas, en prácticamente todos los sectores, vamos a darle reversa a ese tipo de medidas. Yo he sido siempre amigo de los derechos laborales de los trabajadores, eso lo saben los trabajadores de Colombia y de Bogotá. Siempre me he opuesto a todas esas formas de tercerización, porque son cosas calculadas para para empobrecer a la gente. Yo creo que así no se resuelven los problemas de una ciudad como Bogotá.

- Hablemos de medioambiente, ¿cuál es su propuesta para continuar con la recuperación del río Bogotá?

- Hay que seguir avanzando sobre ese tema del río Bogotá; en general todos los asuntos ambientales hay que atacarlos, todo lo que tiene que ver con la estructura ecológica principal hay que cuidarlo. La Van der Hammen, los humedales, todo ese tipo de cosas.

En el caso del río Bogotá, se necesita descontaminar, entonces hay que hacer la Ptar Canoas, pero dejo claro, la Ptar Canoas no será privatizada, no será un negocio de particulares. Esto no es por un capricho económico, es que si se hace privatizada va a aumentar las tarifas del acueducto entre el 12 y el 15%, o más. O sea, hacerla privatizada, montarle un negocio a alguien, lo que va a hacer es aumentar la pobreza y el hambre entre la ciudadanía. Eso lo puede hacer el Distrito directamente a un costo inferior al que lo haría el particular, porque es que los particulares no actúan donde no hay ganancia. Ahora, en general, en una economía de mercado, casi todo debe tener ganancia, pero no es verdad que todo tenga que tener ganancia.

- ¿Cómo va a cuidar a las mujeres de Bogotá?

- Ese es un tema bien complejo, porque Bogotá, como todas las ciudades de Colombia, adolecen por un problema que es gravísimo, que es un machismo absolutamente insoportable y detestable. Yo toda mi vida he militado en la causa antimachista, toda la vida he militado en la causa de que las mujeres no deben ser maltratadas de ninguna manera, pero por qué, cuál es el crimen de ser mujer, y aquí las maltratan en todas las condiciones. Es más, el sitio más peligroso para una mujer en Bogotá y en Colombia es su hogar, así de enferma esta la sociedad. Pero además maltratan a los afros también por afros, o a los indígenas por indígenas o a los Lgbti también por su condición; no, conmigo no vienen esas cosas.

Esto tiene muchas maneras de enfrentarse, pero yo quiero enfatizar una que estoy planteando solo yo entre los candidatos, van a ser cuatro años en mi administración en una campaña de cultura ciudadana, explicándole a las gentes de Bogotá que eso no se debe hacer, que eso es inaceptable, que eso es una cosa súper atrasada, súper retardataria, nadie gana con eso, es una cosa horrorosa. Pero eso hay que explicárselo a la gente, porque la gente no lo sabe.

Yo voy a hacer un trabajo muy grande en cultura ciudadana, además de un conjunto de medidas que también hay que tomar para proteger a las mujeres. Vamos a necesitar que la Policía actúe muy bien cuidándolas y protegiéndolas. Y ojo, los policías tendrán que entender que tienen que atender estos reclamos y que no caben cuentos de preguntarle a la mujer agredida: ¿y usted que estaba haciendo? Pues porque esas son formas de machismo absolutamente insoportables.

- La seguridad es el tema que más preocupa a los bogotanos, ¿usted sí va a asumir como comandante en jefe de Policía?, promesa que le reclaman a Claudia López no haber cumplido. ¿Cuál es la estrategia para disminuir la inseguridad desbordada que viven los bogotanos?

- Sí, yo voy a estar pendiente de esto, por supuesto que sí. Eso es una realidad legal sobre la que yo actuaré, pero también hay una cosa que hay que reconocer. Hay oficiales de la Policía que han hecho carrera, vamos a hacer el esfuerzo de ponernos de acuerdo con ellos sobre cómo hacer las cosas, Por ejemplo, hay un asunto en el que creo bastante, además de aumentar el número de policías, mejorar sus actuaciones, etcétera, que es el respaldo ciudadano. Eso es una cosa que hay que coordinar con los que saben, no tiene sentido montar una relación de que es que yo mando aquí, entonces yo soy el que doy las órdenes; no, tenemos que montar una relación democrática, porque lo que necesitamos es que la seguridad funcione, no que a mí alguien me ponga una medallita.

- ¿Qué cambios propone para mejorar la atención en salud de los bogotanos?

- Hay que hacer una operación muy grande. Aquí hay que explicar una cosa que se ignora mucho. El grueso de la salud en Bogotá lo ofrecen EPS de uno u otro sistema, ahí el alcalde de Bogotá no tiene derecho a nada. Es bien importante tenerlo en cuenta, porque eso funciona según las leyes de la República que el alcalde no puede modificar ni dejar de cumplir. Esa es una realidad en la que estamos.

¿Cuál es la parte de la salud en la que la Alcaldía sí tiene injerencia? Todo lo que llamamos la Red pública hospitalaria, los puestos de salud, todo ese tipo de cosas. Ahí el alcalde sí tiene derecho a tomar determinación, y la otra parte en donde el alcalde puede tener injerencia es en una EPS que funciona bajo las normas de la Ley 100, pero es de propiedad del Distrito, ahí sí podré como alcalde trazar orientaciones y opinar.

Ahora, lo que yo voy a hacer es un esfuerzo grande para que nos pongamos de acuerdo el sistema público del Distrito, la EPS del Distrito y las EPS privadas para adelantar campañas que nos mejoren la salud de la ciudad, eso tendrá que concertarse de una u otra manera. Ahí, aumentar el número de trabajadores contratados directamente es importantísimo para la calidad.

Un tema que me preocupa mucho, en Bogotá y en Colombia se están cerrando muchas camas pediátricas; es decir, las camas hospitalarias o de clínicas para atender a los niños, y las están cerrando porque no es negocio, eso es como un crimen. Yo voy a hacer un esfuerzo muy grande, primero, para que eso no suceda en donde el Distrito decide, y persuadir a las empresas privadas de que por ahí no se puede avanzar. Aquí el único cuento en salud no puede ser que las cosas sean negocio, porque es una verdadera vergüenza que nuestros niños estén muriendo, porque las cosas se hacen mal hechas.

- Y en el tema de desarrollo urbano, ¿cree que Bogotá está creciendo ordenadamente?

- No, de ninguna manera. Mire, Bogotá son dos ciudades. Esto lo entiendo yo bien como arquitecto, no es de ahora, sino desde hace muchos años. Esta zona donde nosotros estamos haciendo esta grabación (norte de Bogotá, barrio Chicó Norte), es la parte, llamemos, moderna de Bogotá, donde las cosas más o menos funcionan y hay zonas verdes, pero es en la parte más grande de Bogotá en área en donde los problemas ambientales, urbanísticos, de vías y de falta de agua, etcétera, son espantosos, lo que pasa es que eso casi no se habla.

Yo esto lo conozco desde que era estudiante de arquitectura. Aquí hay un barrio en Bosa que se llama El nuevo Chile, que es un barrio de autoconstrucción que se hizo con planos míos y de unos compañeros, esto es un tema que he estudiado mucho. El 80% de las edificaciones en Bogotá, sobre todo las de los barrios populares, no cumplen normas de sismorresistencia, o sea, un temblor más grande que el que nos asustó en estos días (magnitud 6,1) puede producir una catástrofe.

Yo voy a hacer un esfuerzo muy grande como alcalde para ir con el poder del Distrito a colaborar en esos barrios para que esa autoconstrucción se haga de la mejor manera, con los mejores criterios técnicos, con los hierros necesarios, con el concreto que es, con las columnas. Esto es una cosa que a mí me ha impresionado toda la vida, porque sé de las inmensas debilidades que hay allí. Esto, aun, cuando lo oculten es una realidad, pero les voy a dar otro dato, en una parte grande de esos barrios si un niño quiere conocer un árbol tiene que ir a otro barrio, son verdaderos desiertos urbanizados.

Vamos a hacer también una operación grande para que en esas zonas también empiecen a aparecer zonas verdes; eso no se va a volver verde de un día para otro, yo no les voy a hacer demagogia, pero sí voy a dejar las cosas sentadas para que en un proceso mi alcaldía y otras alcaldías le empiecen a cambiar el rostro a los sitios donde viven esos compatriotas.

- ¿Cómo será la participación de los jóvenes, comunidad LGTBIQ+, víctimas de la violencia, población migrante y minorías, en una posible alcaldía suya?

- Vamos a hacer todos los esfuerzos por consultar con los distintos sectores involucrados las políticas. Eso lo vamos a hacer, por ejemplo, en ese tema que mencioné hace un momento de una cultura ciudadana antiviolencia por las diferencias que son naturales entre las personas, esas son cosas que habrá que conversar con ellos mismos a ver cómo se hace. Escucharlos, de qué se trata, cómo pueden ser las relaciones, qué medidas tomar. Lo mismo, por ejemplo, en el tema de la cultura, a mí ese tema de la cultura me interesa muchísimo; en eso he vivido toda mi vida.

Yo fui durante muchos años miembro del Consejo de Monumentos Nacionales, del comité técnico capítulo de Caldas, es un tema que es parte de mi vida, eso yo no lo voy a decidir arbitrariamente, vamos a sentarnos con esas comunidades del mundo de la cultura a ver qué hacemos en unas y otras cosas, porque al final los recursos son escasos, entonces hay que distribuirlos de la manera más democrática.

- ¿Qué vendría para la cultura y el deporte?

- Lo que el alcalde tiene que hacer en temas de culturas es respaldar los distintos desarrollos culturales, son por lo menos cinco grandes áreas que uno tiene que atender, o más: el tema del teatro, de la música, la literatura, las artesanías, las manifestaciones, digamos, de las culturas tradicionales, etcétera. Todo eso es lo que digo que vamos a sentarnos a concertar con ellos, a ver cómo lo respaldamos de la mejor manera. Yo tengo mis ideas y a quienes yo nombre ahí tendrán sus ideas, pero lo mejor en estos casos es bregar a que se haga concertación sobre las cosas que haya que decidir.

- Si no llegara a pasar a la segunda vuelta, ¿haría alianzas políticas? ¿con quién las haría?

- Eso lo miraremos ese día, porque es que tengo descartado que no pase a la segunda vuelta.

- ¿Por qué votar por Jorge Enrique Robledo y no por los otros candidatos?

- Sobre eso diría dos cosas: primero, porque mi programa es mejor que el de ellos. Buena parte de lo que ustedes oyeron ni se les pasa por la cabeza a ellos, yo lo estoy planteando y otras cosas más de las que no hemos hablado; pero hay otra diferencia, que también es bien notoria, que es mi vida, es que uno no solo vota por un programa, uno vota por las hojas de vida, qué es lo que ha hecho la gente.

Yo llevo 50 años diciendo que los que nos han gobernado, los mismos con las mismas, están destruyendo a Colombia, que por ahí no es, que acaban con el agro, que no acaben con la industria, que no llenen el país de desempleo o por lo menos no roben tanto; llevo 50 años diciéndoles eso. Yo soy el senador y el colombiano que más duro se ha enfrentado contra la corrupción en Colombia, la de los partidos tradicionales, la de los mismos con las mismas. Yo les pregunto a quienes están compitiendo conmigo: ¿ellos pueden decir eso?, ¿o ellos se la han pasado la vida acompañando las malas políticas?

Colombia no está tan mal como está por un castigo del cielo, sino por los malos gobiernos, y ellos han estado con todos esos gobiernos, entonces a mí me cuesta mucho trabajo creerles las ideas de cambio que están proponiendo. Por ejemplo, el tema de Peñalosa, ¿cuántos de esos candidatos no son peñalosistas, no fueron peñalosistas, lo respaldaron en todo? Ese absurdo que fue capaz de decir Peñalosa, que un TransMilenio hacía lo mismo que un metro, ¿no se lo aplaudieron y lo tienen clasificado como genio?

O el otro caso que hay que contar, aquí no tenemos metro subterráneo porque Gustavo Petro saboteó el metro que empezamos a hacer en el 2008 y fue capaz de decir que un tranvía por la Séptima hacía lo mismo que un metro. Aquí hay gente que lo está respaldando y a su política nacional, que también es un fiasco.

Entonces, en estas cosas yo soy incomparable, no me parezco a ninguno de ellos, y estos son asuntos claves, porque, quiero repetir hasta el cansancio, así ellos lo callen, una parte inmensa de los problemas de Bogotá son decisiones de los presidentes, esa es la realidad. Toda la política de privatización, ¿por qué tenemos el lío que tenemos de basura? Porque aquí montaron una política de privatización a la que yo me opuse en su momento y le entregaron las basuras a unos negociantes que les importa un pepino recoger o no las basuras, porque lo único que les importa es que les suene la caja registradora. Entonces, como no resulta negocio limpiar bien la ciudad, pues no la limpian bien. Como no les resulta negocio hacer en el Doña Juana lo que hay que hacer, pues no lo hacen bien. Estos son dos aspectos que hay que mirar con detenimiento.

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