Miles de personas, nacionales e internacionales, se dieron cita en la capital del país para conocer los adelantos del sector de la floricultura, uno de los principales productos de exportación de Colombia. Uno de los hechos más llamativos del evento fue la posibilidad de conocer el trabajo que realizaron los expositores para llegar con flores nunca vistas logradas en sus propios cultivos.
Uno de los principales eventos de la feria de floricultura, que volvió a Bogotá tras cuatro años de ausencia, es el concurso de variedades. Allí los expositores y cultivadores llevan la selección más destacada de sus producciones en especial aquellas variedades que crearon a través de técnicas de cultivo propias.
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“Si algo caracteriza desde 1991 la feria Proflora es la innovación, y este año no fue la excepción. Más de 200 nuevas variedades hicieron parte de este concurso y estarán exhibidas, durante los 3 días que dura la feria, ante cerca de 6.500 personas, de 60 países, vinculadas al sector floricultor”, señaló Augusto Solano, presidente de la organización.
Los cultivadores realizan diferentes técnicas de cultivo para modificar, naturalmente, las texturas, gamas cromáticas y formas de las flores con el fin de crear variedades innovadoras y en este espacio competir por los premios de tres categorías principales.
Una de las categorías es Productores, en el que se califica los atributos de las flores como duración en florero, altura del tallo, tamaño del follaje, resistencia y calidad de la flor. En esta categoría participan muestras florares que ya son comercializadas.
Otra categoría es Obtentores de flores, en la que se analiza la innovación en el desarrollo obtenido a partir de diferentes cruces naturales de semillas, en un proceso conocido como hibridación, para obtener nuevas variedades. Las compañías que realizan estos experimentos en laboratorios y participaron del concurso presentaron muestras que todavía no son comerciales.
“Un obtentor (breeder) no realiza modificación genética y pudo demorar hasta 6 años para presentar en Proflora 2023 una nueva variedad. Para obtener 3 o 4 de ellas, los obtentores debieron realizar cerca de 8.000 cruces de este tipo”, explicó el presidente Solano.
Para este concurso participaron 59 empresas de diferentes países que expusieron al jurado, compuesto por ocho expertos nacionales y tres internacionales liderado por el experto en floricultura Rolf Timmerman, investigador en floreros, plantas, vida útil y sanidad vegetal.
El mayor ganador del concurso fue la empresa Plazoleta Bazzani, una compañía bogotana con más de 30 años de experiencia en el sector, que se llevó el premio en la categoría Productor y Gran Campeón, en la categoría Fillers, de la variedad Tessa Lavender, con una especie Statice purpura.
En la categoría Obtentores ganó también una compañía colombiana Guaqueta Trading con más de 40 años de experiencia y heredera de una amplia tradición del cultivo de este tipo de plantas en el país. Ganaron en la categoría otros, con una variedad voyage improved tipo japonés de la especie Lisianthus o flor del desierto.
“Durante Proflora, las Flores de Colombia demostrarán su compromiso con el país, con las comunidades rurales y con los 200 mil empleos formales, directos e indirectos, que anualmente generan. Así reflejamos el empeño de nuestros floricultores por responder asertivamente a los nuevos consumidores, a sus necesidades y a las del comercio sostenible en general.”, aseguró Solano, presidente de la exposición.
En este evento participaron más de 300 expositores que pudieron llegar a un público de 7.000 visitantes de más de 60 naciones distinta. Para los organizadores se trata de una vitrina clave para la floricultura nacional a nivel mundial que permite reafirmar la capacidad colombiana en el sector y la innovación y belleza de sus cultivos.