Encontraron el cadáver de uno de los más buscados de La Guajira: tenía signos de tortura y varios impactos de bala

En la mañana del martes 3 de octubre fue encontrado el cuerpo sin vida de Eris Andrés Pineda Daza, alias el Pasito, uno de los delincuentes más buscados por la Policía de La Guajira.

El cadáver fue encontrado por cuatro indígenas en la carretera que conduce desde Palomino hacia Riohacha en un sector conocido como Arroyo Guerrero.

Las autoridades llegaron hasta el lugar de los hechos para hacer la inspección técnica del cadáver, que tenía las manos amarradas en la espalda con sunchos, politraumatismos, dos impactos de bala en la cabeza y otro cerca al corazón.

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Los lugareños no reconocieron el rostro del occiso, que no tenía papeles de identificación en su ropa, razón por la cual las autoridades tuvieron que esperar hasta que los forenses de Medicina Legal hicieran los registros de necrodactilia e identificaran a la víctima en la base de datos de la Registraduría.

La Policía confirmó que el cadáver era de Pineda Daza, que hizo parte de los más buscados de La Guajira y tenía un mes de haber salido de una cárcel en Bogotá. Al parecer, alias Pasito decidió volver a La Guajira el domingo primero de octubre y apareció muerto dos días después en una de las principales vías de ese departamento.

Alias Pasito tenía 28 años y 12 registros judiciales: cinco por concierto para delinquir, tres por hurto calificado y agravado, uno por homicidio, otro por tráfico de estupefacientes, uno por amenazas extorsivas y otro más por lesiones personales, que lo hicieron merecedor de estar entre los más buscados por la Policía de La Guajira.

Una de las primeras detenciones de alias Pasito fue en julio del 2017, cuando tenía 22 años. En ese entonces cayó junto a otros 19 delincuentes señalados de pertenecer al clan Úsuga, liderado por Darío Úsuga David, alias Otoniel, que posteriormente lideraría el clan del Golfo.

Los detenidos seguían órdenes de cometer extorsiones, desplazar poblaciones, cometer homicidios selectivos y facilitar las rutas del narcotráfico en La Guajira y sus alrededores de la mano de dos policías corruptos que también fueron capturados.

Las autoridades determinaron que alias Pasito y sus cómplices le pedían entre $300.000 y $500.000 a transportadores ilegales de combustible, ganaderos, agricultores para ‘brindarles seguridad’ y dejarlos transitar libremente por Dibulla y Riohacha.

En 2017 alias Pasito volvió a ser detenido por las autoridades, esta vez por los delitos de extorsión y concierto para delinquir en la Comuna 10 de Riohacha, donde cobraban entre $100.000 y 20 millones de pesos a los residentes.

Pineda Daza cayó junto a otras siete personas que se presentaban ante la comunidad como integrantes de los Pachenca, grupo paramilitar reducto del frente resistencia Tayrona de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).

Alias Pasito cayó nuevamente en 2021 cuando ya había ganado estatus dentro de la organización criminal y hasta tenía escolta personal, un hombre de 22 años identificado como Jonnier De Jesús Almanza Rodríguez, a quien le incautaron una granada de fragmentación que, al parecer, usaba para amedrentar a las víctimas de extorsión.

Las autoridades señalaron a Pasito y su escolta fueron indicados de asesinar a Dagoberto Segundo Aguilar Caraballo en medio de un ajuste de cuentas entre grupos delincuenciales de La Guajira.

El fortalecimiento del clan del Golfo hizo que se librara una guerra con los Pachenca en la zona por tomar el control de las rutas del narcotráfico y las autoridades no descartan que la muerte de alias Pasito esté relacionada con esa disputa armada que genera zozobra en las poblaciones de La Guajira y santa Marta, donde se registraron enfrentamientos armados entre ambos grupos hace un par de semanas.