En un debate de control político realizado en la plenaria de la Cámara de Representantes para hablar de la crisis que atraviesa el sector cafetero, los congresistas presentes expusieron que 550.000 familias se están viendo afectadas por los bajos costos del café.
A este encuentro fueron citados el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, el presidente de la Federación Nacional de Cafeteros, Germán Alberto Bahamón, la ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica, entre otras personalidades.
Durante el debate de control, cada una de las problemáticas que vive el sector fue expuesta y varios de los congresistas le pidieron a los representantes del Gobierno nacional presentes que hubiese más inversión en dicho sector, pues los caficultores estaban viendo muy afectados.
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Ante esto, cuando fue el turno de la intervención del ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, no dudó en señalar que la crisis del sector se debe a la quiebra de cooperativas financieras. El jefe de cartera explicó que algunos cafeteros llevaron a cabo algunos contratos con mira hacia el futuro, de una bonanza que no ocurrió.
De todo lo anteriormente mencionado, mencionó que la Federación Nacional de Cafeteros es una de las principales responsables. “Los dejaron que hicieran un contrato con un gran comprador, especulador del mercado externo y no les advirtieron o no les dieron la asesoría. Entonces, ¿dónde está la capacidad técnica de la Federación?, ¿dónde estaba? La Federación es la culpable de la quiebra de las cooperativas y es la culpable de que los cafeteros hayan perdido credibilidad en el mercado de futuro”, dijo.
Por otro lado, aseguró que la crisis que atraviesa el sector es una de las mayores preocupaciones que tiene el Gobierno nacional en la actualidad, y además añadió que: “debemos pensar en cómo fortalecer la institucionalidad cafetera con organizaciones de base. También es importante hablar con los exportadores y reconstruir las cooperativas y organizaciones populares”.
El ministro criticó de igual manera que la federación no tiene un control sobre las hectáreas que tienen los caficultores y aseguró que en varias oportunidades desde su cartera les solicitaron se les hiciera un inventario explicándoles lo anterior.
“Los productores de café tienen en conjunto dos millones y medio de hectáreas totales, sin que la federación sepa qué se hace en el otro millón y medio de hectáreas. No existe ningún control, ni ninguna vigilancia, ni ningún examen. Le hemos pedido a la federación que haga un inventario de qué es lo que hay en ese millón y medio de hectáreas adicionales porque el cultivo del café es solamente una parte de la finca”, señaló Bonilla.
El jefe de cartera incluso señaló que dentro de la Federación algunos funcionarios tienen “salarios muy altos” e incluso sugirió que deberían vender activos que tienen y aseguró que los problemas que hoy se están manifestando vienen de atrás.
Entre tanto, la ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica, también intervino durante el desarrollo del debate recordando la reforma agraria que se adelanta desde su cartera. “El café no se va a quedar por fuera, tenemos que avanzar en la formalización de la propiedad de las tierras caficultoras, la mitad de la caficultura no tiene títulos de sus tierras”, dijo.
En cuanto al presidente de la Federación Nacional de Cafeteros, Germán Alberto Bahamón se defendió del tema de las cooperativas que mencionó el ministro de Hacienda diciendo que únicamente una de estas fue intervenida por la Superintendencia Solidaria.
“De 34 cooperativas, hoy 33 todavía están en buenas condiciones y ejerciendo la garantía de compra en cada una de las regiones cafeteras. Esto ha sido ese trabajo, un trabajo en el que hemos venido articulando esfuerzos y compartiendo información”, respondió.
Finalmente, en el atardecer del debate, el subsecretario Fondo de Estabilización de Precios del Café, Óscar Bernal, aseguró que: “esta es una instancia de apoyo técnico al Comité Nacional, están los 15 representantes gremiales de la federación. Encontrar el costo medio de producción es una tarea ardua, podría decirse que hay tantos costos de producción como caficultores en Colombia y esa es una tarea que hemos abordado para implementar una metodología rigurosa”.