A pesar de que se esperaba un aumento en el precio del galón de gasolina, como se ha venido dando mes tras mes desde enero, los ministros de Hacienda, Ricardo Bonilla, y de Minas y Energía, Andrés Camacho, decidieron congelar los valores para octubre. Con eso, el precio del combustible en Colombia se mantiene como uno de los más bajos de la región.
Con la decisión del Gobierno nacional, la gasolina se mantendrá en $13.964 y el ACPM en $9.065. Al llevarlo a dólares estadounidenses, el precio para la gasolina corriente es de US$3,43; solo es más barata la gasolina en Venezuela (US$0,13), Bolivia (US$2,05) y Ecuador (US$2,4).
De todas formas, al hacer un comparativo entre las regiones en el interior del territorio nacional, el galón de gasolina más costoso lo tiene Villavicencio, en donde se consigue a $14.473; le siguen Cali ($14.397), Bogotá ($14.373), Manizales ($14.357), Pereira ($14.340), Ibagué ($14.308) y Medellín ($14.306).
El precio de la gasolina viene aumentando en Colombia como medida para cerrar el déficit que arrastra el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC), que cerró en 2022 en $39 billones. Como medida para que ese hueco no siga creciendo, el Gobierno de Gustavo Petro decidió aplicar un aumento gradual al precio de la gasolina, lo cual ha sido una medida poco popular.
Ese déficit viene del diferencial entre el precio de venta del combustible a nivel nacional y los precios internacionales, teniendo en cuenta que la gasolina en Colombia es subsidiada.
Justamente, el precio del petróleo de la referencia Brent se disparó a nivel internacional, llegando a US$95 el barril. No obstante, el Gobierno decidió mantener el precio del galón de gasolina que viene desde septiembre.
Esa decisión se tomó, según el ministro Ricardo Bonilla, debido a que no se ha podido implementar la tarifa diferencial que se le prometió al gremio de los taxistas para compensar los costos que han tenido que asumir por los consecutivos aumentos en el precio de la gasolina.
El motivo por el cual no se ha podido implementar tal subsidio, explicó también el jefe de cartera, es porque solo 40.000 taxistas se han inscrito en el Registro Único Nacional de Tránsito (Runt), pese a que se calcula que en las vías del país circulan alrededor de 300.000 taxis. Esto impediría que al Gobierno conozca con exactitud quiénes recibirán el beneficio y en qué partes del país, explicó Bonilla.
A nivel latinoamericano, los precios más altos en la gasolina los tienen Uruguay (US$7,35), Perú (US$5,82) y Chile (US$5,57). Incluso, Argentina, Paraguay y Puerto Rico tienen gasolina más cara, con US$3,45, US$3,53 y US$4,11, respectivamente.
Pero el precio de la gasolina en Colombia debería seguir aumentando. De hecho, el Gobierno nacional anunció que seguirá evaluando las medidas necesarias para disminuir el “impacto fiscal por la dinámica de los precios internacionales de los refinados, que han aumentado debido a factores internacionales como el precio del petróleo”.
Incluso, en una entrevista para la emisora W Radio, el ministro Bonilla confirmó que todavía hacen falta unos tres meses de aumento en el precio del galón de gasolina para estabilizar el déficit del FEPC. Esos aumentos se darían durante noviembre, diciembre y enero.
Ante esa misma emisora, el jefe de cartera explicó que de cuánto sería el aumento: “Se prevé que serán tres aumentos de $600, para un total de $1.800 con miras a cerrar la brecha entre el precio local y el precio internacional”.
De tal manera, que cuando termine el ciclo de alzas a nivel nacional, el precio de la gasolina estará costando en promedio $15.800, es decir, USD$3,79 al cambio de hoy ($4.167,87). Con ese valor, Colombia pasaría a tener la gasolina más cara que Argentina y Paraguay y sería el sexto país con la gasolina más barata.