El concejal de Bogotá Diego Cacino arremetió contra la alcaldesa Claudia López durante un debate en el que aseguró que bajo su administración se talaron más árboles que en la de su predecesor, Enrique Peñalosa. Las cifras que presentó fueron cuestionadas por la secretaria de Ambiente de la capital, Carolina de Urrutia, que le respondió en su cuenta de X (antes Twitter).
“Frente a Peñalosa, Claudia López aumentó el 45% el arboricidio, pero también la cuenca del Tunjuelo que la quiere volver a cementar. Todos esos proyectos… ¿El corredor verde realmente es un corredor verde?, ¿los acueductos comunitarios cómo van?”, dijo el concejal de Bogotá.
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La respuesta de Urrutia al concejal se basó en varios puntos. El primero de ellos, al indicar cuántos árboles se se talaron por ahora durante el mandatado de Claudia López en la ciudad. Según datos de la entidad a la que representa, se han visto obligados a talar 15.579 árboles por manejo durante estos tres últimos años debido a las fuertes lluvias que se han presentado. La decisión de deshacerse de ellos surgió para “prevenir emergencias”.
En la administración de Peñalosa la cifra fue de 13.406 árboles talados bajo el supuesto de que podían generar emergencias. Esto quiere decir, que el porcentaje de diferencia entre ambos mandatos es del 16%. Además, Urrutia indicó que por manejo otros 11.486 árboles han sido talados en esta administración, mientras que en la alcaldía anterior fueron 21.603, lo que equivale a 10.117 árboles menos talados.
Por eso, la secretaria de Ambiente aseguró que los señalamientos de Cancino no tienen fundamentos: “Las acusaciones del concejal-candidato @cancinodiegoa sobre talas en Bogotá carecen de rigurosidad y muestran un absoluto desconocimiento del proceso de autorizaciones silviculturales, al igual que lo han hecho otras de sus declaraciones en temas ambientales”, sostuvo.
Explicó entonces que la entidad distrital solo otorga tres tipos de autorizaciones para “el manejo silvicultural”, que son por emergencia, manejo y obra. Con estas tres excepciones para permitir la tala de árboles, se buscaría “eliminar la tala indiscriminada” en la ciudad. Añadió que este último criterio, que fue utilizado anteriormente al considerar que los árboles no eran de las especies correctas, no ha sido utilizado por la administración de López, según dijo Urrutia.
El Jardín Botánico de Bogotá se encarga entonces de intervenir los espacios en los que los árboles representen un riesgo. También lo hace por cuestiones fitosanitarias, es decir, por enfermedad o porque estén inclinados, sin que eso represente necesariamente un riesgo inminente.
Con esa explicación, la secretaria de Ambiente cuestionó los datos presentados con Cancino, bajo los cuales sustenta las acusaciones contra Claudia López: “Las cifras de tala que menciona el concejal no sé de dónde salen. Los permisos tienen plazos para cumplirse y muchos de los efectuados por quienes los tienen provienen de administraciones anteriores; muchos aún no se intervienen y las cifras presentadas no tienen pies ni cabeza”, dijo Urrutia.
Ahora bien, la funcionaria aseguró que se van a plantar 800.000 árboles nuevos, lo que quiere decir que no están categorizados como compensaciones por los que se han tenido que talar.
Para ello, aseguró que se invirtieron 54.000 millones de pesos. De la totalidad propuesta, 435.000 ya han sido sembrados en diferentes espacios de la ciudad: humedales, calles, aceras, áreas verdes. “No son un invento y no son ‘chamizos’”, afirmó.
Añadió que se tomó la decisión de hacer cambios en la resolución de compensación con el objetivo de que las obras que se ejecuten mantengan el arbolado. “Pasamos de una compensación 1,2x1 (como se hacía anteriormente) a mínimo 5x1 árboles o IVP (Individuo Vegetal Plantado) como mínimo cuando se tala un árbol”, explicó.
Concluyó al invitar al concejal Cancino a que se reúnan para expandir los datos y darle a conocer “cómo funciona este tema”. Sin embargo, enfatizó que no es válido que se desinforme y no se sea riguroso al momento de hacer campaña, teniendo en cuenta que Cancino busca participar en las elecciones del 29 de octubre para volver a ser elegido como concejal de Bogotá.