Acandí: el pueblo que convirtió la crisis migratoria en una oportunidad para generar ingresos

Los pobladores del corregimiento del Chocó han adaptado su vida para atender a las miles de personas que quieren cruzar la frontera con Panamá

Guardar
Los pobladores de Acandí encontraron la forma de generar ingresos con la crisis migratoria - crédito CNN Español
Los pobladores de Acandí encontraron la forma de generar ingresos con la crisis migratoria - crédito CNN Español

En Acandí, Chocó, se puede apreciar un evento único de la naturaleza, pues hasta las playas del corregimiento llegan cientos de tortugas carey y caná para su anidamiento, que solo sucede una vez al año, más precisamente en Semana Santa.

Pero, en los últimos años, Acandí pasó de ser un destino turístico para ver tortugas a convertirse en el punto de llegada de miles de migrantes que intentan cruzar el Tapón del Darien en su intento por entrar a Panamá y continuar su camino hacia Estados Unidos.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Google News.

Acandí fue fundado en 1908 y su nombre proviene de la lengua indígena “Acantí” que significa río de piedra. Está conformado por los corregimientos de Capurganá, Capitán, Caleta, Peñaloza, San Miguel Cabecera, Santa Cruz de Chugandi, Sapzurro, Titiza y Villa Claret, algunos de ellos destinos obligados para el paso de migrantes que se dirigen a la selva.

Pero, con la crisis migratoria que vive Colombia, el corregimiento del Chocó se ha visto en la necesidad de adaptarse y modificar su estilo de vida para recibir a miles de personas que se encuentran de paso por el país.

Sobre este tema, un informe de CNN en Español evidenció la nueva realidad de Acandí, en la que sus pobladores buscaron la manera de hacer de la migración un negocio, una problemática que también le ha traído beneficios a la comunidad.

El periodista Wilson Barco llegó hasta el último punto en territorio colombiano antes de comenzar la selva y cruzar a Panamá, por lo que pudo evidenciar las largas filas de migrantes que esperan ser identificados por las autoridades del lugar.

Las autoridades en Acandí deben identificar a todas las personas que llegan al corregimiento y que buscan pasar la frontera con Panamá - crédito CNN Español
Las autoridades en Acandí deben identificar a todas las personas que llegan al corregimiento y que buscan pasar la frontera con Panamá - crédito CNN Español

Pero, las labores de los pobladores en Acandí no se limitan solo a ver la llegada de los migrantes, pues también han desarrollado toda una economía en torno al paso de los migrantes por el territorio.

Y es que son tantos extranjeros y colombianos que se aventuran a cruzar el Darien, que los lugareños se han organizado para abrir restaurantes, crear un sistema de transporte a base de motocicletas, motocarros y camionetas y hasta cambio de dólares.

Sobre las medidas con las que se atiende a los migrantes, el gobernador del Chocó, Ariel Palacios, explicó que gracias a un trabajo transversal con algunas ONG y varias instituciones, se ha logrado que las personas que llegan hasta el corregimiento puedan tener un trato digno.

“Aquí estamos trabajando con todas las instituciones, las ONG, la fuerza pública y es tendiente a lograr que estas personas puedan hacer su tránsito como ciudadanos del mundo y que realmente pues tengan un trato digno y humanitario en nuestro territorio”

Cada día miles de migrantes copan las calles de Acandí, por lo que la cantidad de dinero que se mueve en la zona también ha sido utilizado para beneficiar a los pobladores, que han visto cómo su pequeño pueblo es el foco de una crisis que parece no acabar.

Campamento Las Tecas, el último punto antes de adentrarse en la selva - crédito CNN Español
Campamento Las Tecas, el último punto antes de adentrarse en la selva - crédito CNN Español

Entre las ventajas que ha dejado la migración en el territorio, está la construcción de obras públicas como, por ejemplo, centros de salud o calles, inclusive, un sistema de acueducto que muestra una cara diferente al paso de miles de personas por el corregimiento.

Al respecto, Elías Quiroz, residente de Acandí, aseguró que: “Escuelas, centros de salud, calles, pavimentaciones, unidades sanitarias, alcantarilla, acueducto, todo eso se ha hecho con la plata de la migración. La comunidad de Acandí Seco Bajo tiene su escuela gracias a la migración.

El último punto antes de comenzar la travesía por la selva es el campamento Las Tecas, donde los pobladores de Acandí también encontraron una manera de generar ingresos, pues preparan el lugar y alquilan carpas a las más de 2.000 personas que llegan día tras día, por lo que saben que es un negocio que parece no terminará pronto.

Guardar