El Deportivo Cali es uno de los equipos que más expectativa está creando para el último semestre de competencias. Desde la última vez que logró hacerse con el título de liga, a finales de 2021, la institución azucarera comenzó a caer en una crisis, tanto deportiva como administrativa, de la no ha conseguido salir.
Con la renuncia de Luis Fernando Mena de la presidencia del club, Guido Jaramillo quedó a cargo del barco azucarero; en conversación con El País entregó actualizaciones sobre el estado financiero del equipo y profundizó en las razones por las cuales la institución se encuentra en esta crisis económica.
En primer lugar, se refirió sobre los inmuebles que actualmente tiene embargada la escuadra vallecaucana y afirmó que prácticamente son todos los que están en en problemas legales y que mientras se ejecuta el plan de gastos operacionales, este panorama no cambiaría:
“Todos, prácticamente. La sede de Pance, la sede del norte, el lote del hipódromo y una tribuna del estadio”.
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Posteriormente, se refirió sobre los pasivos financieros presentes en los balances del club y precisó que la suma se encuentra sobre los 104 mil millones de pesos y que aparte de que sus esfuerzos están centrados en la búsqueda de nuevos inversores, también tienen su atención puesta en el proceso de reorganización administrativa que les permitirá salvaguardar el futuro del súperdepor:
“En 104 mil millones de pesos y con el flujo de caja que tenemos no va a ser posible pagarlos. Recibimos la deuda en 95 mil millones, se ha incrementado en 9 mil por los intereses. La sociedad anónima es la tabla de salvación. Traería muchos beneficios. Una de las preocupaciones de los asociados es perder sus derechos, y se podría entonces no vender todo el porcentaje de la institución. Si llega un inversionista, podríamos competir con una nómina mucho mejor. En Colombia tenemos los ejemplos, el mismo América, Nacional, Millonarios, Santa Fe”.
Para finalizar, Jaramillo entregó un panorama de lo que vendrá administrativamente en los próximos meses y afirmó que continuarán trabajando para el establecimiento del plan de gastos operacionales, sin poder retrasarse nuevamente en los pagos a sus trabajadores, para luego concretar la transformación a una sociedad anónima:
“Lo que viene es presentar el 18 de octubre el acuerdo con los acreedores, cumplir el plan de gastos operacionales que matriculemos, lo que implica que nunca más nos podremos atrasar dos meses en salarios, porque vendrían sanciones mayores, como perder los derechos deportivos, y eso nos llevaría a una liquidación. Y, finalmente, terminar el proceso yéndonos a una sociedad anónima”
Poco a poco con las acciones ejecutivas tomadas desde la cúpula del equipo, el Deportivo Cali comienza a ver un horizonte prometedor que no los pone en peligro ni de desaparición, ni tampoco de descender a la categoría B del Fútbol Profesional Colombiano.
En el ámbito deportivo el conjunto verdiblanco también está dejando su mejor esfuerzo posible. Los dirigidos por Jaime de la Pava actualmente están en la 15ava posición de la tabla en la liga con 14 puntos, pero todavía con algunos partidos pendientes tienen la oportunidad de entrar a los cuadrangulares semifinales.
El calendario restante para el cuadro azucarero se plantea como un reto bastante superable. A los caleños les quedan ocho partidos para finalizar la fase del todos contra todos, y los rivales pendientes son Unión Magdalena, Alianza Petrolera, Júnior, Deportes Tolima, América de Cali, Envigado, Jaguares y Boyacá Chicó.
De estos encuentros deberán al menos sacar 15 puntos más para llegar al número mágico que asegura la clasificación a la siguiente fase del torneo clausura.